Informe OSH Pulse 2025 de EU-OSHA: la seguridad y la salud en el trabajo en la era del cambio climático y digital
OSH Pulse (Pulso sobre Seguridad y Salud en el Trabajo) es una encuesta pulso periódica realizada por la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo (EU-OSHA) para analizar la seguridad y salud en el trabajo, que examina los factores de estrés y medidas preventivas. La primera se realizó en el año 2022; la última la ha realizado entre el 31 de marzo y el 14 de abril de 2025 ‘Ipsos European Public Affairs’ por encargo de la Agencia EU-OSHA. Se entrevistó a una muestra representativa de personas trabajadoras (empleadas y autónomas) mayores de 16 años en los 27 Estados miembros de la Unión Europea, así como en Islandia y Noruega, con un total de 28.220 entrevistas telefónicas a móviles. En Suiza, la recogida de datos se llevó a cabo entre el 2 y el 7 de abril de 2025 mediante entrevistas online asistidas por ordenador. En España se realizaron 1.006 entrevistas, y estos datos desagregados correspondientes nos permiten ver un análisis específico de nuestra situación española.
La encuesta recoge las experiencias y percepciones de los trabajadores europeos en cuatro ámbitos clave: el uso de las tecnologías digitales para el trabajo, los factores psicosociales, los riesgos relacionados con el cambio climático y los resultados sanitarios relacionados con el trabajo.
En el informe ‘OSH Pulse 2025: Occupational safety and health in the era of climate and digital change’, que se acaba de publicar, se abordan:
- Las transformaciones clave en el entorno laboral con la digitalización y sus riesgos asociados.
- Los factores psicosociales y la salud mental.
- Impacto del cambio climático en el trabajo.
- Estado de salud de los trabajadores
Tecnologías digitales en el lugar de trabajo y riesgos asociados con la digitalización
Las tecnologías digitales más utilizadas en el lugar de trabajo, según los datos de la encuesta OSH Pulse 2025, son:
- Los ordenadores portátiles, tabletas, teléfonos inteligentes u otros dispositivos informáticos portátiles con conexión a internet, seleccionados por el 78% de los trabajadores europeos encuestados. Un 4 % más que en anterior encuesta OSH Pulse 2022. El porcentaje en España es menor, 75%.
- Los ordenadores de sobremesa ocupan el segundo lugar, con un 61% de uso. En España es menor, 59%.
- Aproximadamente uno de cada seis trabajadores en Europa, 18%, utiliza software o herramientas impulsadas por inteligencia artificial, por ejemplo, herramientas de análisis de datos, chatbots, asistentes virtuales, herramientas de análisis predictivo o modelos de aprendizaje automático. En España, el 16%.
- Los dispositivos ponibles, como relojes inteligentes, gafas inteligentes, pulseras de actividad u otros sensores integrados, son seleccionados por el 13% de los trabajadores europeos; en España es superior, 15 %.
- Un 6% de los totales encuestados europeos utiliza tecnologías robóticas avanzadas para el trabajo, con máquinas o robots capaces de pensar y tomar decisiones impulsados por IA; el porcentaje español es el mismo.
- Un 3% de encuestados europeos interactúa con robots en su trabajo. En España se eleva al 4%.
En conjunto, en la UE el 90% de los trabajadores declara usar al menos una de las tecnologías digitales incluidas en la encuesta. Por países, este porcentaje varía entre el 78% en Portugal y el 96% en Noruega. Además, en la UE el 32% de los trabajadores dice usar una o más tecnologías digitales avanzadas. El porcentaje de trabajadores que usan tecnologías digitales avanzadas en su puesto principal es más alto en Dinamarca (48%) y más bajo en Portugal (17%). La situación de España es ligeramente inferior a la media europea, aunque es relevante la utilización de dispositivos ponibles y la interactuación con robots en su trabajo.
Respecto a las plataformas digitales, el 5% de los trabajadores declara haber obtenido al menos parte de sus ingresos trabajando para una plataforma digital (como Upwork, Freelancer, Clickworker, PeoplePerHour, Uber, Deliveroo, Handy, TaskRabbit y otras) en los últimos 12 meses. A nivel de país, la proporción de trabajadores que obtuvieron al menos parte de sus ingresos trabajando para una plataforma digital varía entre el 1% en Francia y el 18% en Malta.
Respecto a la localización del lugar de trabajo principal, en remoto, híbrido o presencial, el 68% de los trabajadores europeos trabajaron la mayor parte del tiempo en las instalaciones de su empleador/propio negocio (oficina, fábrica, tienda, escuela, etc.), un 3% respecto a la anterior encuesta OSH Pulse 2022. En su propio hogar, el 13%; en las instalaciones de clientes el 7%; en un emplazamiento exterior (por ejemplo, obra, campo agrícola, calles de una ciudad), el 5%; en un coche u otro vehículo (por ejemplo, tren, autobús), el 5% (4%) o en espacios públicos como cafeterías y un 2% en aeropuertos y otros emplazamientos.
Los resultados de OSH Pulse 2025, relacionados con riesgos para la seguridad y salud en el trabajo relacionados con el uso de tecnologías digitales, determinan que para:
- El 48% de los trabajadores europeos, el uso de tecnologías digitales en su centro de trabajo determina la velocidad o el ritmo de su trabajo.
- El 30% estas tecnologías provocan que trabajen de forma aislada.
- El 28% provoca un aumento de su carga de trabajo.
- El 19 % las tecnologías digitales en su lugar de trabajo reducen las oportunidades para usar sus conocimientos y habilidades.
- El 16% reducen su capacidad para tomar decisiones sobre los métodos que emplean o la manera de realizar su trabajo.
- El 9% las tecnologías digitales hacen que sus tareas laborales parezcan triviales o inútiles.
En 17 de los 30 países encuestados, la mayoría de los trabajadores afirma que el uso de tecnologías digitales en su lugar de trabajo determina la velocidad de su trabajo. La proporción de trabajadores que comparten esta opinión varía entre el 32% en Islandia y el 70% en Grecia. Alrededor de la mitad de los trabajadores en Italia (49%), Irlanda (48%) y Malta (48%) indican que el uso de tecnologías digitales hace que trabajen de forma aislada. En contraste, esto se aplica al 5% de los trabajadores en Islandia. En diez países, al menos el 30% de los trabajadores indican que el uso de tecnologías digitales aumenta su carga de trabajo. Las mayores tasas de trabajadores que informan esto se observan en Austria (37%) e Irlanda (36%), mientras que la más baja se observa de nuevo en Islandia (11%), seguida por Estonia (12%) y Chequia (14%).
En relación con la gestión algorítmica, el porcentaje de trabajadores que reportan uso de algoritmos para diferentes funciones es el siguiente:
- 27% para asignación automática de tareas/turnos.
- 26-31% para la evaluación de rendimiento por terceros.
- 26-30% para instrucciones automatizadas para completar el trabajo.
- 25-30% supervisión o control personal del trabajo y comportamiento.
Con respecto a la monitorización mediante tecnologías digitales, su uso se extiende a la supervisión del entorno laboral, como ruido, productos químicos, polvo y gases; también parámetros biométricos, como frecuencia cardíaca, presión arterial y postural; además de en porcentajes menores para monitorización ambiental con el 18% y el 7% para biometría.
Riesgos psicosociales y salud mental en el lugar de trabajo e iniciativas preventivas
Los resultados de OSH Pulse 2025 respecto a los factores de riesgo psicosocial muestran que:
- El 44% de los trabajadores afirman estar expuestos a una fuerte presión de tiempo o sobrecarga de trabajo.
- El 34% señala una falta de recompensas, en salario, oportunidades de carrera o reconocimiento, por el esfuerzo que dedica a su trabajo.
- El 29% afirma que está expuesto a una mala comunicación o cooperación dentro de su organización.
- El 17% informan estar expuestos a una falta de autonomía o de influencia sobre el ritmo o los procesos de trabajo.
- El 16% está sometido a violencia o abuso verbal por parte de clientes, pacientes, alumnos, etc. (16%).
- El 8 % declara estar expuesto a acoso o intimidación en el trabajo.
Son relevantes los datos relacionados con los trabajadores de los servicios de salud o la atención social, ya que son los que más riesgo corren de exponerse a riesgos psicosociales relacionados con el trabajo. En este sector, el 50% de los trabajadores declara enfrentarse a una fuerte presión de tiempo y sobrecarga de trabajo, frente al 45% de media en todos los sectores. Además, el 41% señala que sufre una falta de recompensas por el esfuerzo que realiza en su trabajo, frente al 33% de media en todos los sectores. Del mismo modo, el 25% de los trabajadores de salud y atención social informa estar expuesto a violencia o abuso verbal por parte de clientes, pacientes, alumnos, etc., porcentaje significativamente superior al 15% de media en todos los sectores.
Al preguntar sobre la inseguridad laboral, otro importante factor de riesgo psicosocial, el 16% de los trabajadores en la UE afirma que podría perder su empleo en los próximos seis meses. Sin embargo, el 82%, la gran mayoría de los trabajadores europeos, no comparte esta preocupación por una posible pérdida de empleo en el futuro inmediato. Las mayores proporciones de trabajadores que creen que podrían perder su empleo en los próximos seis meses se observan en Irlanda y España, con el 23%, Grecia y Polonia con el 22% y Luxemburgo con el 21%. En contraste, los trabajadores de Chequia, Dinamarca, Islandia, Países Bajos, Noruega y Eslovenia se sienten más seguros, con solo un 8-9%, que expresan su preocupación por una posible pérdida de empleo.
Sobre la revelación de la salud mental, los trabajadores europeos están divididos sobre el impacto negativo en su carrera: el 15% está totalmente de acuerdo y el 33% de acuerdo con esta afirmación, mientras que el 14% está totalmente en desacuerdo y el 34% en desacuerdo. En 14 países, la mayoría de los trabajadores está en desacuerdo con que revelar una condición de salud mental afectaría negativamente su carrera. El nivel total de desacuerdo más alto es en Islandia, con el 82%, Hungría, con el 71% y en Suecia, con el 70%. En el lado contrario, una gran mayoría de trabajadores en Chequia, con el 60%, Francia e Italia, ambos con el 63%, Chipre con el 67% y Grecia con el 69%, está totalmente de acuerdo o de acuerdo en que revelar una condición de salud mental tendría un impacto negativo en su carrera.
Respecto a las iniciativas para abordar el estrés y los problemas de salud mental en el lugar de trabajo:
- Un 53% de los trabajadores europeos señala que en su lugar de trabajo existen actividades de sensibilización, información o formación sobre bienestar y gestión del estrés.
- El 45% menciona la consulta a los trabajadores sobre aspectos estresantes del trabajo.
- El 40% indica que tiene acceso a asesoramiento o apoyo psicológico.
- Un 35% menciona otras medidas para abordar el estrés laboral, como cambios en la organización del trabajo, establecimiento de prioridades y mejora de la comunicación.
Los trabajadores en ocupaciones profesionales, técnicas o administrativas superiores, así como en funciones administrativas, comerciales o de atención al cliente, son más propensos a informar sobre la disponibilidad de iniciativas preventivas en sus lugares de trabajo en comparación con los trabajadores cualificados, semicualificados o no cualificados. Y cuanto mayor es la empresa, más probable es que los trabajadores
Cambio climático y seguridad y salud en el trabajo. Medidas preventivas
Los resultados de OSH Pulse 2025, de la exposición a factores de riesgo relacionados con el cambio climático, señalan que:
- El 33% de los trabajadores declara haber estado expuesto en el trabajo a al menos un factor de riesgo relacionado con el cambio climático en los últimos 12 meses. En concreto: el 20% informa haber estado expuesto a calor extremo en interiores o exteriores; el 19% a problemas de calidad del aire como polen, polvo o humo (también en interiores o exteriores); el 12% indica haber sido afectados por exposición intensa al sol; y el 9% por fenómenos meteorológicos extremos (como inundaciones, incendios forestales, sequías o huracanes).
- Grecia con el 35%, presenta la mayor proporción de trabajadores expuestos a calor extremo en el último año, seguida de Chipre con el 30%, Croacia con el 28%, Eslovaquia y Malta con el 27%. En el extremo opuesto, Noruega con el 7% y Suecia con el 12%, registran los niveles más bajos de exposición al calor extremo en el lugar de trabajo.
- Las tasas más altas de exposición a problemas de calidad del aire en el trabajo, tanto interior como exterior, se observan en Austria con el 32%, Finlandia con el 31% y Grecia con el 30%, seguidas por Chipre con el 28% y Polonia y Malta con el 27%. En contraste, los trabajadores en Alemania con el 13%, Irlanda y Hungría con el 14% son los menos propensos a estar expuestos a problemas de calidad del aire en el trabajo.
- La mayoría de los trabajadores cualificados, semicualificados o no cualificados han estado expuestos a calor extremo (ya sea en interiores o exteriores) (55%) o a problemas de calidad del aire (por ejemplo, polen, polvo, humo) (53%), mientras que esto solo afecta al 10% de quienes desempeñan funciones profesionales o administrativas. De manera similar, el 35% de los trabajadores cualificados, semicualificados o no cualificados reporta exposición a una intensa radiación solar, frente al 5% entre ocupaciones profesionales, técnicas, administrativas superiores, comerciales o de atención al cliente.
La exposición a factores de riesgo relacionados con el cambio climático también varía según el sector. Los trabajadores en agricultura, horticultura, silvicultura o pesca son los que más reportan exposición al calor extremo, ya sea en interiores o exteriores, con el 35%, por los del sector de la construcción con el 26% y los de suministro de gas, electricidad o agua, minería o extracción con el 24%. Otros sectores presentan niveles de exposición más bajos, entre el 17% y el 21%. Se observa un patrón similar en relación con los problemas de calidad del aire, tanto en interiores como en exteriores, como polen, polvo o humo.
Sobre la preocupación por el cambio climático, al 31% de los trabajadores europeos les preocupa que cuestiones relacionadas con el cambio climático, como el calor extremo o fenómenos meteorológicos extremos, puedan afectar su seguridad y salud en el trabajo; en contraste, el 68% no está de acuerdo. También un 18% teme que su empleo y tareas actuales cambien, como resultado de medidas introducidas para prevenir riesgos relacionados con el cambio climático. Grecia, con el 51% y en España con el 50%, encabezan la preocupación sobre cambio climático y en Portugal con el 47%, les siguen Italia con el 42%, Chipre y Malta con el 41%. Por el contrario, en Dinamarca e Islandia solo se alcanza el 9%, en Noruega el 10%, y en Estonia el 15%.
Al 37% de los trabajadores en Luxemburgo, seguidos por los de Portugal con el 31%, les preocupa que su empleo y tareas actuales cambien como resultado de medidas introducidas para prevenir riesgos relacionados con el cambio climático. En contraste, Estonia con el 9%, Dinamarca, Finlandia y Suecia con el 8%, Islandia con el 6% y Países Bajos con el 5%.
Los trabajadores del sector de la agricultura, horticultura, silvicultura o pesca son más propensos a estar de acuerdo en que los problemas relacionados con el cambio climático pueden afectar su seguridad y salud en el trabajo, con el 40% frente al 26%-33% en otros sectores. De manera similar, los trabajadores de estos sectores también son más propensos a estar de acuerdo en que su empleo y tareas actuales podrían cambiar debido a las medidas introducidas para prevenir riesgos relacionados con el cambio climático, 29% frente al 16%-21% en otros sectores.
Entre las medidas preventivas para abordar los efectos del cambio climático en la salud, los resultados de OSH Pulse 2025 recogen que:
- Para el 58% de los trabajadores europeos, los ajustes en la organización del trabajo, como por ejemplo horarios flexibles, pausas regulares, rotación de tareas, son la medida más común para prevenir el estrés térmico y los riesgos relacionados con el cambio climático en el trabajo, con una mayoría de trabajadores.
- El 30% mencionan la existencia de información y formación sobre cómo afrontar el calor y otros riesgos relacionados con el cambio climático en su puesto.
- El 25% señala que consultar a los trabajadores sobre preocupaciones relacionadas con el cambio climático es la medida menos común que está disponible en su lugar de trabajo.
- El 54% informa que existen otras medidas para protegerse del calor y de los riesgos relacionados con el cambio climático, como, por ejemplo, aislamiento térmico, sistemas de refrigeración, equipos de protección personal adecuados al clima, en su entorno laboral.
En 26 de los 30 países encuestados por el OSH Pulse, la mayoría de los trabajadores declara que los ajustes en la organización del trabajo (como horarios flexibles, pausas regulares o rotación de tareas) están disponibles en su lugar de trabajo para prevenir el estrés térmico y los riesgos relacionados con el cambio climático. Más de dos tercios de los trabajadores informan de la disponibilidad de estas medidas en Letonia con el 67%, Luxemburgo con 68%, Países Bajos con 72%, Austria con 73% y Malta con 76%. En marcado contraste, en Islandia solo 26%, indica que estas medidas están disponibles.
Estado de salud de los trabajadores
A los participantes del OSH Pulse se les preguntó si habían experimentado problemas de salud provocados o agravados por su trabajo. De los nueve problemas de salud incluidos en la encuesta, el cansancio general, con el 37%, fue el más mencionado, seguido de dolores de cabeza y fatiga visual con el 35%, seguido del estrés, depresión o ansiedad con el 29%, con 2 puntos porcentuales más respecto a OSH Pulse 2022 y con el 28% 2 puntos porcentuales menos; le siguen los problemas o dolores en huesos, articulaciones o músculos.
Las enfermedades infecciosas, incluido el covid-19, fueron señaladas por el 15% de los trabajadores como un problema de salud sufrido en los últimos 12 meses y causado o agravado por su trabajo, un 5% menos que en OSH Pulse 2022. Menos de uno de cada diez trabajadores declaró haber experimentado síntomas o Las enfermedades relacionadas con el calor, como mareos, calambres, agotamiento o golpes de calor con 7%, los accidentes o lesiones con el 6% y las quemaduras solares con el 3%, fueron las menos reportadas por los trabajadores.
Conclusiones clave de OSH Pulse 2025
Las principales conclusiones clave del informe OSH Pulse 2025, a la vista de los resultados de la encuesta a 28.220 trabajadores europeos encuestados, son los siguientes.
- Alta digitalización: el 90% usan al menos una tecnología digital; los más comunes los dispositivos portátiles 78%. IA y robótica son minoritarias, pero en aumento. El uso de tecnologías avanzadas como inteligencia artificial y robótica es menor pero creciente. En España, el uso de estas tecnologías es ligeramente inferior a la media europea, aunque destaca la interacción con robots y dispositivos ponibles
- Efectos de la digitalización: el 48% señala que la tecnología marca el ritmo de trabajo; 30% trabaja de forma más aislada; el 28% aumenta la carga laboral y en proporciones importantes, reportan menor autonomía y menos oportunidades para aplicar sus habilidades.
- Gestión algorítmica y monitorización: entre el 25% y 30% reporta algoritmos para asignación de tareas, evaluación e instrucciones automatizadas; monitorización ambiental y biométrica, presentes en niveles menores.
- Riesgos psicosociales: el 44% de los encuestados sufre presión de tiempo/sobrecarga; 34% percibe falta de recompensas; problemas de comunicación, violencia verbal y acoso relevantes, especialmente en salud y atención social.
- Inseguridad y salud mental: el 16% teme por la pérdida de empleo; división en percepciones sobre el efecto negativo de revelar problemas de salud mental en la carrera profesional.
- Prevención psicosocial: más de la mitad de los lugares de trabajo ofrecen sensibilización; según el 45% consultan a la plantilla; y el 40% señala que ofrecen apoyo psicológico; estas medidas son más comunes en empresas grandes y en ocupaciones profesionales.
- Exposición climática: el 31% de los trabajadores señala haber estado expuesto al menos a un riesgo climático en los últimos 12 meses: el 20% a calor extremo, el 19% a mala calidad del aire, el 12% radiación solar intensa, y el 9% a fenómenos extremos.
- Desigualdad en las exposiciones al riesgo climático: mayor exposición al calor y a mala calidad del aire en trabajadores no cualificados y en sectores como agricultura, construcción y energía/minería; variaciones nacionales notables (Grecia, Chipre, Croacia con altos porcentajes y países nórdicos con bajos.
- Medidas frente al clima: predominan ajustes organizativos (58%), medidas técnicas (54%), formación (30%) y, menos, consulta a trabajadores (25%).
Como conclusión clave final del informe OSH Pulse 2025 se podría establecer que tanto la digitalización como el cambio climático están transformando condiciones de trabajo y generando riesgos combinados para la salud física y mental, y se requieren medidas integradas (organizativas, técnicas, formativas y de gobernanza algorítmica) adaptadas por sector, tamaño de empresa y ocupación. Puntos clave para implementación inmediata: se deberían: priorizar intervenciones en sectores y ocupaciones más expuestos: agricultura, construcción, salud y atención social. Combinar soluciones organizativas y técnicas: medidas rápidas (horarios, pausas) y medidas estructurales (infraestructura climática, revisión algorítmica); y monitorizar los efectos de nuevas tecnologías y medidas climáticas en indicadores de seguridad y salud laboral y satisfacción laboral, con revisiones periódicas y participación de la plantilla laboral.
Referencias:
OSH Pulse 2025. Occupational safety and health in the era of climate and digital change. Sharon Belli y Femke De Keulenaer, Ipsos - European Public Affairs. Project management: Maurizio Curtarelli y Pierre Bérastégui, European Agency for Safety and Health at Work (EU-OSHA). https://osha.europa.eu/en/publications/osh-pulse-2025-occupational-safety-and-health-era-climate-and-digital-change























