Ya está en marcha el ‘supersalone’, el evento especial de 2021 del Salone del Mobile.Milano

Comisariada por el arquitecto Stefano Boeri, junto a su sensacional equipo de coproyectistas. Le ponen el alma 425 marcas, 170 creadores jóvenes y 39 diseñadores autoproductores. Con un total de más de 1.900 diseños expuestos , el ‘supersalone’ posee tres claves de lectura: volver a empezar, seguridad y sostenibilidad. Con una oportunidad inédita: sus nuevas dimensiones y la experiencia digital.

Del 5 al 10 de septiembre, en los primeros cuatro pabellones de Fiera Milano de Rho, se exhiben en una superficie de 68.520 metros cuadrados en total más de 1.900 diseños (de marcas expositoras, diseñadores autoproductores y jóvenes que terminaron la carrera en 2020/2021).

En qué consiste

Un nutrido programa público reúne a más de 40 voces ilustres (entre las que figuran arquitectos, innovadores, visionarios, empresarios, artistas y políticos), un festival cinematográfico en colaboración con el Milano Diseño Film Festival, cuatro Food Courts, en base a la idea de Identità Golose, con nueve de los más destacados intérpretes de la cocina italiana y una gran exposición del ADI/Compás de Oro. Persiguen el objetivo de capitalizar los puntos de contacto entre sectores diferentes, experimentar con nuevos
formatos expositivos e involucrar y motivar a los visitantes. Y, sobre todo, dicho sea metafóricamente, para volver a encender los motores de la ciudad del diseño por antonomasia: Milán.

Este es, en resumen, el ‘supersalone’, el evento más deseado por el Salone del Mobile.Milano, que se ha puesto en manos de Stefano Boeri, en calidad de creador, junto a un grupo internacional de coproyectistas: Andrea Caputo, Maria Cristina Didero, Anniina Koivu, Lukas Wegwerth, Marco Ferrari y Elisa Pasqual de Studio Folder y Giorgio Donà, cofundador y director de Stefano Boeri Interiors.

“La fuerza del Salone del Mobile.Milano consiste desde siempre en su querer trabajar en equipo, en experimentar e, incluso, en correr riesgos, pero sin perder de vista jamás el objetivo final: el bien de nuestras empresas y nuestros expositores. Soy testigo de un Salone que, desde siempre, en cada entrega, fue capaz de autocuestionarse, de tomar nota de las transformaciones de la sociedad, de analizar los retos y aprovechar los oportunidades. De cambiar de punto de vista. Y eso es lo que hicimos eligiendo el camino de un ‘supersalone'», afirma Maria Porro, presidenta del Salone del Mobile.Milano. Y añade: «Rompimos los esquemas para no quedarnos empantanados en una situación que habría podido pauperizar el sistema y comprometer el liderazgo de Milán. No ha sido fácil, pero escoger un camino nuevo y aprovechar la ocasión de ofrecer las nuevas visiones de las marcas y los productos es la prueba de cuán grande es la fuerza de nuestro diseño que, al conjugar las tradiciones culturales, con la creatividad de los protagonistas y la capacidad innovadora de la industria y de nuestras regiones, nos permite mirar hacia el futuro positivamente con confianza”.

Recuperación del sector

Es un ‘supersalone’ que reúne y exhibe las mejores investigaciones, producciones y experimentaciones que ha realizado todo un sector a lo largo de estos últimos 18 meses y que, a la vez, se proyecta hacia el futuro. Porque es un momento clave de visibilidad coral y un impulso formidable para la recuperación del ramo del interiorismo y el diseño. Qué tal importancia se le reconoce, al igual que su valor simbólico, lo confirma la presencia de las más importantes autoridades gubernamentales e institucionales. A partir del primero de todos: el presidente de la República, Sergio Mattarella. Desde siempre, todos ellos dan fe de que el sector es una de las locomotoras de la economía italiana, gracias a las fecundas relaciones que logra crear entre las empresas, la ciudad y los territorios. Al Presidente, el Salone del Mobile.Milano le obsequiará una reproducción del cartel del ‘supersalone’ en un marco singular, que concibió el tándem de diseñadores Formafantasma y que realizaron el joven arquitecto-artesano Giacomo Moor y los ebanistas Gigi Marelli y Giordano Viganó, con la madera de los abetos que derribó la tormenta Vaia en el valle de Fiemme.

“Tras dos años y medio, el diseño italiano vuelve a encontrarse con su cita más importante, locomotora indispensable de un sector que, a pesar de las dificultades de la pandemia, en este último año ha conseguido engancharse a la recuperación. La producción total de la cadena de producción de la madera y el mueble asciende a 39.000 millones de euros, el macrosistema del interiorismo ostenta un valor de 21.000 millones de euros, de los cuales 11.000 millones se destinaron a la exportación. Y, en el primer semestre del año, creció un 14,3% frente a 2019, alcanzando la recuperación, en particular, en el mercado italiano», apostilla el presidente de FederlegnoArredo, Claudio Feltrin. Y añade: «Hicimos el bien de la cadena de producción y reafirmamos el liderazgo de nuestro sector, de la ciudad de Milán y el sistema italiano. Para FederlegnoArredo el ‘supersalone’ es como una señal de que seguimos al pie del cañón y de que volvemos a ponernos en marcha. A la espera del Salone del Mobile 2022, respaldará los procesos de internacionalización y visibilidad del Made in Italy en los mercados globales”.

“Junto a la Bienal Cinematográfica de Venecia, el ‘supersalone’ de Milán ha llamado la atención de todo el mundo, poniendo de relieve el coraje y la gran fuerza de la creatividad y de las empresas italianas», afirma Stefano Boeri, encargado del evento. Y añade: «En un momento de nuestra historia que sigue siendo difícil, el ‘supersalone’ presenta un avance del futuro de las ferias y grandes exposiciones, proponiendo un evento abierto tanto a las empresas como al público, con productos presenciales pero que se pueden reservar para comprarlos en línea. Por su parte, el montaje se puede reutilizar totalmente y es un lujo de contribuciones artísticas y culturales en abundancia. Después del largo invierno de la epidemia, aquí por fin brilla un rayo del futuro”.

Medidas de seguridad

En este ‘supersalone’ se ha estado trabajando con un gran sentido de responsabilidad. Desde la organización son conscientes de la importancia de proteger la salud y la seguridad de los expositores, los visitantes profesionales y el público. Se han volcado el máximo de los esfuerzos y
atención en las cuestiones organizativas, encaminadas a prevenir la difusión de la pandemia de la COVID-19. Y, en especial, en la organización de los espacios del recinto ferial, en las directrices para orientar a los visitantes hacia un comportamiento correcto (es obligatorio usar constantemente las mascarillas y aplicar el distanciamiento social) y en la
reglamentación de los accesos y los flujos.

De hecho, para visitar el ‘supersalone’, en la entrada del recinto se controla previamente la temperatura del visitante y es necesario enseñar el pasaporte verde o EU Digital COVID Certificate, en inglés. Ambos son herramientas indispensables para crear condiciones de seguridad en un entorno protegido. También se considerarán válidos los certificados que permitan comprobar que la persona se ha vacunado (incluso a contar desde los 15 días siguientes a la primera dosis de la vacuna), o que se le ha dado de alta completamente después del contagio (en un plazo de 6 meses antes), o bien que acredite un resultado negativo de un hisopado (ya sea
molecular o de antígeno/rápido), con una validez de 48 horas a partir de la toma de la muestra.

Sostenibilidad, reutilización, reciclaje y circularidad

Otros grandes temas que atraviesan todo el ‘supersalone’ son la sostenibilidad, la reutilización, el reciclaje y la circularidad. Es un enfoque necesario para volver a conseguir, después de los recientes momentos de crisis, no sólo el mismo nivel de desarrollo económico, sino también un desarrollo mejor y más responsable. En la estrategia que se planteó para construir el certamen, se dio la prioridad al alquiler y a la reutilización con el objeto de evitar desperdiciar materiales lo máximo posible. Los espacios que están a disposición de las empresas se idearon para realzar el producto y disminuir a lo esencial el uso de las estructuras de apoyo. Todos los materiales y los componentes del montaje que idearon Andrea Caputo (largos tabiques paralelos, que se estudiaron específicamente para las clases de mercancías específicas) y Stefano Boeri Interiors (las zonas comunes: Food Courts, arenas, lounges) requieren una cantidad mínima de paneles
de madera aglomerada (1.230 m3), que se realizaron en un 100% con madera reciclada. Y, cuando baje el telón, se volverán a introducir en el ciclo de producción en base a una filosofía circular: gracias a su recuperación, no se emitirán a la atmósfera 553.500 kilos de CO2.

Todo se pensó para que después se pueda desmontar y volver a usar: los sistemas de montaje, que carecen de componentes sueltos, se recuperarán completamente. Las zonas destinadas a lounges, los bancos y los asientos se pueden desmontar y usar nuevamente en momentos y contextos diferentes. Para las estructuras más grandes se optó por sistemas de andamios de alquiler, reconfigurados para adaptarlos a las necesidades de la exposición.

La importancia del digital

En un escenario complejo, como el presente, en el que se inaugura el ‘supersalone’, un papel clave es el que desempeña la nueva plataforma digital del Salone del Mobile.Milano, que replica el ADN único de este evento y pone en línea su experiencia. Así, será posible ver los productos expuestos (mediante el código QR que se encuentra en la feria) y
reservarlos para comprarlos a continuación. Se podrá visitar virtualmente las exposiciones y acudir a las charlas y debates en vivo en streaming.
Los servicios y las funciones de la plataforma permiten habilitar oportunidades de contacto, diálogo y retroacción entre el expositor y el visitante. Y sabrán conciliar los negocios y las emociones en un contexto virtual peculiar.

En resumidas cuentas: la innovación, la atención que se presta al impacto medioambiental, la creatividad a 360 grados, el intercambio cultural y las experiencias digitales constituyen el léxico del ‘supersalone’, un evento que se arraiga en la fuerza del imaginario colectivo del diseño, para convertirse en laboratorio experimental.