Control de Producción en Fábrica: proceso clave para cumplir el Marcado CE

Este es el último de los productos del sector de la madera con norma armonizada para el Marcado CE que llega a la fecha de entrada en vigor de manera obligatoria. Anteriormente ya han visto cumplido dicho plazo y por tanto cumplen escrupulosamente la normativa de Marcado CE productos como los tableros de madera, la madera microlaminada, las persianas y celosías exteriores, los suelos de madera, las estructuras de madera prefabricadas, los frisos y entablados, las ventanas y puertas peatonales exteriores y, muy recientemente, la madera laminada encolada estructural.

A tan solo dos meses vista de la entrada en vigor de la normativa del Marcado CE para el segmento de la madera aserrada estructural, y teniendo en cuenta que uno de los elementos imprescindibles para poder acogerse a dicha norma es el cumplimiento estricto de un sistema de Control de Producción en Fábrica (CPF), no está de más recordar cuales son los puntos clave en los que debe sostenerse dicho Control

El Control de Producción en Fábrica (CPF) es un conjunto de procedimientos, inspecciones y ensayos regulares y/o evaluaciones, controles de materias primas, etc. llevados a cabo por el fabricante para garantizar que los productos puestos en el mercado son conformes con las características de prestación declaradas. El CPF debe quedar documentado de manera que pueda ser comprobada su correcta ejecución en caso de una inspección. A su vez, el fabricante debe asignar una persona responsable del CPF y establecer los medios necesarios para que se realice de manera adecuada.

Los puntos en los que debe incidir obligatoriamente el control de producción en fábrica son los siguientes: equipamiento, materias primas y componentes, proceso de producción, ensayo y/o evaluación del producto y productos no conformes y reclamaciones.

En este punto se especifican los controles que hay que realizar sobre los equipos de fabricación utilizados en la fábrica. Los equipos utilizados en el proceso de fabricación deben ser inspeccionados y sometidos a mantenimiento regular para asegurar que el uso, desgaste o fallo no cause mal conformidades en el proceso de producción. En este punto sería suficiente con realizar y documentar el mantenimiento que viene indicado en el manual de cada una de las máquinas.

Se deben documentar las especificaciones de las materias primas así como su esquema de inspección para garantizar la conformidad de las mismas. De esta forma se garantizará que no se generarán mal conformidades a lo largo del proceso de producción.

En la norma se especifica que se han de documentar las diferentes etapas que conforman el proceso de producción, identificando en estos pasos los controles a realizar y las personas que llevan a cabo estos controles. Se ha de mantener un registro escrito de todos los controles y de sus resultados, las no conformidades detectadas y las acciones correctoras llevadas a cabo. La documentación del proceso de producción ha de ser lo suficientemente preciso para demostrar que todas las etapas del proceso de producción y sus controles se han llevado a cabo correctamente.

Se deben establecer procedimientos documentados para asegurar que los valores establecidos de todas las características se mantienen. Estos ensayos y/o inspecciones se han de llevar a cabo en dos momentos. Ensayos y/o inspecciones de los productos no acabados o partes de ellos durante el proceso de producción. Ensayos y/o inspecciones de los productos terminados. Estos ensayos y/o evaluaciones han de llevarse a cabo conforme a un plan previamente establecido.

Con el objetivo de llevar una gestión de las reclamaciones y un control de los productos no conformes es necesario tener un procedimiento escrito que indique como tratar los productos no conformes. Debe llevarse una documentación escrita de estos eventos que indique la no conformidad o reclamación ocurrida así como las acciones tomadas para corregirlas. Se ha de mantener un registro escrito durante un periodo determinado de tiempo. Este tiempo queda a elección del fabricante.

En unos momentos en el que la conquista el mercado de la exportación es clave para contrarrestar los efectos negativos de la crisis es imprescindible que las empresas españolas del sector de la madera aserrada estructural se actualicen en normativa mediante la implantación del Marcado CE, con el fin de que sus productos puedan entrar a obra con igualdad de garantías y mismo grado de exigencia que el resto de materiales y competir con el resto de fabricantes a nivel internacional. La aplicación de un riguroso sistema de Control de Producción en Fábrica (CPF) es el camino a seguir para todos aquellos que aún no han dado el paso.

Puntos clave del Control de Producción en Fábrica (CPF)

1.- Ensayos y/o revisión documental de garantías de calidad de las materias primas empleadas para fabricar el producto.

2.- Definición de las inspecciones visuales, ensayos, medidas o controles durante las etapas de fabricación.

3.- Plan de ensayos de los productos terminados.

4.- Establecimiento de los requisitos de verificación, calibración y mantenimiento de las instalaciones de fabricación

5.- Sistema de calidad documentado que permita demostrar la conformidad del producto.

¿Qué certifica el marcado CE?

El marcado CE certifica que los productos cumplen alguna de las condiciones siguientes:

• Son conformes con normas armonizadas.

• Son conformes con un documento de idoneidad técnico europeo (DITE).

• Son conformes con las especificaciones técnicas nacionales reconocidas, en la medida que no existan las especificaciones técnicas armonizadas.

• Que en los casos excepcionales contemplados en la normativa, permiten satisfacer los requisitos esenciales de las obras, utilizando como referencia los documentos interpretativos que los desarrollan.

El fabricante o su representante es el responsable de la certificación de los productos que fabrica, importa o comercializa, así como de que dichos productos son conformes con la normativa y con las especificaciones técnicas en vigor.