Entrevista con Victoria Olaya Magadán, técnico auxiliar de Jardinería del Vivero de Estufas de El Retiro

¿Qué superficie tiene y cuántos invernaderos integra en la actualidad el vivero Estufas del Retiro?

El Vivero de Estufas, es uno de los 3 viveros municipales que existen actualmente, creado alrededor de 1880 y ubicado en el extremo sur del Parque del Retiro, cerca del antiguo observatorio astronómico. Tiene una superficie aproximada de 3.5 hectáreas y una superficie de algo más de 3500 m² dedicada a invernaderos.

Hay 24 invernaderos, la mayoría de ellos de finales del siglo XIX, realizados en hierro y cristal, son los llamados históricos y otros denominados los invernaderos modernos, cuya estructura es de aluminio y policarbonato y que cuentan con automatismos para la aireación, el sombreo y el riego. Todos ellos están en uso y tienen diferentes funciones.

Destacar el Invernadero -1, denominado “el Barco” que actualmente alberga un modesto museo de jardinería tradicional, el invernadero-7, procedente del Palacio de Liria, dedicado a la colección de plantas tropicales y subtropicales y el invernadero-24, donado por los hijos de Juan Bourguignon, una prolongación del museo de jardinería del invernadero -1 y dedicado a usos didácticos, ambos con una colección de grasas y cactáceas muy interesante y de gran belleza.

¿Qué otras instalaciones o elementos, aperos, instrumentos… se pueden encontrar en el vivero?El Vivero además de estas instalaciones cuenta con otras estructuras y equipamientos que complementan el recinto para la realización de sus funciones, como son platabandas, sombreados (actualmente cuenta con unos modernos sombreados de construcción reciente con automatismo y riego automatizado), umbráculos, túneles pequeños que se establecen entre los invernaderos decimonónicos pequeños, que se montan y se desmontan según las necesidades, cajoneras, talleres, almacenes y oficinas. También se cuenta con un aula multiusos, actualmente dedicada al archivo de documentación y al estudio de todo este material histórico.

¿Cómo son las tareas de mantenimiento y a cuántas personas se emplea? ¿Cuáles son las distintas líneas de trabajo en las que se especializa el vivero?

El Vivero de Estufas del Retiro, es un vivero peculiar pues no sólo se dedica a la producción de cultivos, principalmente plantas de temporada, vivaces, plantas de interior y exterior destinados a adornos municipales, sino que además realiza ensayos para la introducción de especies y variedades de plantas nuevas, así como ensayos para la mejora de la sanidad vegetal, con utilización de métodos de manejo integrado para el control de las plagas y enfermedades , incluso llegando a descartar prácticamente en su totalidad el uso de productos químicos de síntesis.

Otras funciones a destacar son la producción de planta hortícola para huertos urbanos, escuelas, centros de día municipales…; los adornos florales (hay una brigada, llamada la volante destinada a tal fin); la elaboración de los SIFU y pirámides (sistema intercambiable de jardinería urbana, montadas en estructuras colgantes o en diferentes formatos); visitas guiadas al recinto; colaboraciones con instituciones como los reales jardines botánicos de Madrid, el Jardín de la Arganzuela, universidades, centros de formación, asociaciones…, y la realización de cursos de formación, talleres y conferencias. Toda una serie de tareas y actividades que le dotan a este vivero de una gran peculiaridad y personalidad.

Para el desarrollo de todo este elenco de tareas se cuenta con personal municipal, distribuido en diferentes categorías (aproximadamente hay unas 41 personas, contando con un técnico, encargados, personal administrativo, técnicos auxiliares y oficiales de jardinería). A su vez se cuenta con el apoyo de una empresa de jardinería externa que ayuda y cumplimenta ciertas labores.

¿Qué metodología aplican para el control de las hierbas adventicias y de las enfermedades?

Para el Control de Plagas y Enfermedades en el Vivero de estufas se siguen los preceptos del Manejo Integrado como metodología de trabajo, pero incluso se va más allá pues está prácticamente descartado el utilizar productos químicos de síntesis.

Esta metodología de trabajo se empezó a utilizar en 2006 para plagas en invernaderos y se fue extendiendo a todo el recinto y también para las enfermedades, hace ya tiempo que es la estrategia instaurada y para que sea efectiva se recurre a la ayuda de un asesor externo, así como a todo el personal de Vivero.

Este método de trabajo requiere mucha implicación con monitorizaciones constantes, atención a las plagas y enfermedades recurrentes, a las experiencias acumuladas en los ataques a determinados cultivos o plantas, a los trabajos culturales (de gran importancia en este tipo de técnicas), a la suelta de organismos auxiliares beneficiosos (control biológico) que nos ayudan a dominar a los detractores de nuestras plantas; al uso de los denominados productos blandos aptos en agricultura ecológica y para los cultivos que nosotros manejamos; utilización de plantas refugio, reservorios donde alimentarse los insectos beneficiosos auxiliares; plantas banker donde criar organismos de los que luego se alimentaran o que serán parasitados por los auxiliares que nosotros soltemos para que nos ayuden en la batalla contra los enemigos de nuestros cultivos.

Al fin, una metodología que requiere estar muy presente y constante en el manejo de los cultivos, pero que pone de manifiesto que otra forma de cultivar y otra jardinería es posible y viable.

Esta metodología de trabajo tiene sus ventajas y sus desventajas pues se requiere de formación específica, de conocimientos de los ciclos biológicos de plantas y organismos auxiliares, de los organismos que hay hoy día disponible en el mercado, de para qué sirven y cuando utilizarlos, saberse la normativa y legislación vigente con respecto a los productos que se pueden utilizar dependiendo de los cultivos que se manejen, tener en cuenta también que los organismos biológicos para la suelta vienen vivos y hay que tener un calendario de actuación que acompase y correlacione ese pedido que haces de organismos vivos, con un nivel de plaga en los cultivos. Y también hay que tener un cambio de mentalidad a todos los niveles, incluso también a nivel social, pues no se trata de aniquilar toda plaga o enfermedad existente, sino de convivir con un nivel tal (se establece un umbral) que permita que nuestro cultivo siga adelante con una calidad y un valor aceptable.

MANEJO DE LAS PRINCIPALES PLAGAS Y ENFERMEDADES EN EL VIVERO DE ESTUFAS

¿Cómo se pueden aprovechar las plantas silvestres en este?

Es muy importante la presencia de ciertas plantas que nos sirven como reservorios, con suficiente población parásita (por ejemplo, pulgones) que nos sirven como base para el desarrollo de la población de auxiliares que soltamos. Un ejemplo de ello son los banker de cebada, que infectamos nosotros mismos con el pulgón Rhopalosiphum padi, pulgón específico de la planta de cebada y que no tiene interés en otros cultivos y que sin embargo nos sirve para que la suelta que hacemos de Aphidius (avispilla parasitoide de pulgón) progrese en esos banker y también en el resto de los pulgones que pueda haber en los otros cultivos del Vivero.

De modo parecido usamos las plantas de la Haba (Vicia faba), la Alcachofa (Cynara scolymus), Artemisa (Artemisa sp), Lobularia (Lobularia marítima) que se infectan de pulgón y que nos permiten ampliar nuestras tropas de Aphidius, parasitando y alimentándose del interior de los jugos de estos y convirtiéndolos en momias de las que saldrá un afidio en forma adulta.

Otro caso es el del Ricino (Ricinus communis), planta que cultivamos por el polen de sus flores para que los depredadores (tipo Ambliseius) de araña roja, tengan de que alimentarse en el caso de que la población de araña no sea muy abundante.

También usamos plantas indicadoras que nos alertan del inicio de plagas o del incremento de estas y que nos ponen en órbita para actuar lo antes posible, como son la Calendula (Calendula officinalis), el Hinojo (Foeniculum vulgare), el Madroño (Arbutus unedo), etc.

O el uso de plantas que liberan ciertas toxinas y en las que también encontramos ayuda, es un todo suma. Como ejemplo, las plantaciones del clavel damasquina (Tagetes patula) plantado por su acción nematicida.

Desde el CIEA El Huerto del Retiro se organizan visitas guiadas para dar a conocer el Vivero de Estufas. ¿Qué acogida vienen teniendo?

La CIFA del huerto del Retiro, no pertenece al Vivero de Estufas, pero tenemos con ellos una colaboración estrecha, ya que es en el Vivero donde se hace la plántula hortícola que luego se reparte a los huertos urbanos.

Organiza visitas guiadas al Vivero de Estufas y también al parque del Retiro en sus diferentes temáticas (flora y fauna, el Retiro histórico, el Retiro literario…) es un centro de divulgación ambiental, que organiza además muchos cursos y talleres relacionados con la naturaleza y el medio ambiente. Tiene una aceptación muy grande, con gran participación en estas actividades y gran interés del público en general (adultos, niños, familias).

Dentro del recinto del Centro tienen un huerto que mantienen en producción ecológica y en el que trabajan diferentes colectivos, muy interesante es la labor que realizan con personas con alguna discapacidad.

Como consecuencia de la pandemia por la COVID-19, al igual que en el Vivero, este último año han visto muy mermadas sus actividades, llegando incluso a su paralización. Con el conocimiento de cómo va funcionando esta nueva enfermedad, las medidas anticovid y las vacunas, poco a poco se van recuperando de nuevo estas actividades, aunque todavía no se está al 100% del funcionamiento.

Ha sido un año duro, en el que a pesar de hacer muchas de las actividades al aire libre, el desconocimiento del funcionamiento de esta letal enfermedad, ha llevado a tomar la decisión de prevenir mejor que curar y se ha preferido pecar de cautos, anulando actividades y visitas y realizando las labores que eran necesarias para no perder los cultivos, las colecciones de plantas, los ensayos y el mantenimiento del Vivero en general, pero extremando las precauciones.

Los jardines y viveros pues, también han sufrido la pandemia, aunque poco a poco se va recuperando la normalidad.

¿Cómo es el momento de la formación de jardinería en España hoy en día?

La jardinería hoy día, está en un “impasse” mercantilista y lo que antaño fue un oficio, honorable, artesano y que requería de estudios y experiencia, hoy día se reduce a la conservación de las zonas verdes por parte de grandes empresas cuyo último y único fin es ganar dinero.

Las zonas verdes han crecido mucho en las últimas décadas, pero los servicios que han venido dando estas empresas han ido empeorando en calidad, llegando a ser insuficientes, con escasos recursos y muy poco personal, dejando en muchas ocasiones las zonas verdes en un estado de deterioro importante.

Lo que antaño era un oficio de reconocido prestigio, con ferias y concursos internacionales, hoy es un trabajo más, muchas veces reducido a la recogida de papeles con un saco y un pincho.

Respecto a la formación, cabe decir que se adolece de centros de formación profesional propios de jardinería, silvicultura, agricultura, a pesar de haber demanda desde el colectivo juvenil. En Madrid hay pocos centros de formación profesional que se dediquen a estos ciclos formativos (tanto de ciclo medio, como superior) y a veces hay que desplazarse a muchos kilómetros de la capital para poder realizarlos, lo que en ocasiones lleva a los interesados a elegir otras opciones.

Por otro lado, decir que los centros de formación online pueden estar bien para impartir ciertas materias o conocimientos, pero son disciplinas eminentemente prácticas que requieren de pericia y destreza que se sólo se gana con la praxis (desde saber medir la altura de un árbol, hasta saber cambiar la cadena de una motosierra). No todo vale en el mundo de la jardinería.

Desde el colectivo de jardineros municipales siempre hemos reivindicado una escuela de jardinería municipal, pero nunca ha llegado a materializarse, aunque en ciertos momentos ha habido interés por parte de las autoridades municipales, una pena porque, como en todo, la jardinería es un mundo cambiante que requiere de ampliación de conocimientos y técnicas nuevas.