Gracias a la tecnología, el sector ha encontrado el camino para diferenciarse, consolidándose como un actor competitivo que genera empleo y riqueza. En los últimos años, especialmente impulsado por la pandemia y la implementación del Programa Estratégico de Reparto de la Tecnología Espacial Naval (Perte Naval), se ha evidenciado un compromiso total hacia el desarrollo de dispositivos innovadores y eficientes, capaces de abordar una amplia gama de actividades dentro del sector. Paralelamente, se vislumbra un escenario donde la digitalización, la conectividad y la instantaneidad son elementos esenciales en la cotidianidad de esta industria en constante evolución. Actualmente, el sector se encuentra inmerso en diversos proyectos innovadores con gran potencial, dirigidos hacia los océanos y mares, anticipándose a un impacto significativo en los años venideros. De acuerdo con el informe sobre la economía azul de la Comisión Europea, el sector está experimentando un rápido avance tecnológico en cuatro áreas principales: detección e imágenes oceánicas, expansión de la cobertura espacial de plataformas de observación, autonomía de plataformas móviles y esquemas de integración de sistemas complejos. La robótica marina se presenta como un componente crucial en esta evolución. A pesar de su utilidad creciente en actividades relacionadas con la economía azul, su elevado coste ha representado una barrera para la investigación y desarrollo en este campo. Sin embargo, su aplicación abarca diversas áreas, desde la investigación científica hasta la vigilancia de fronteras y la exploración de recursos submarinos. La Comisión Europea señala que los robots submarinos se están utilizando cada vez más en aplicaciones militares, industriales y comerciales, siendo indispensables para la exploración y vigilancia en entornos marinos desafiantes. Este aumento en la utilización de tecnología marina responde tanto a la necesidad de seguridad como a la mejora estratégica de las operaciones. No obstante, se requiere una mayor inversión en investigación e innovación para seguir avanzando en este ámbito. En términos de mercado, se estima que el valor de la robótica subacuática alcanzará cifras significativas en los próximos años, especialmente impulsado por la exploración comercial de recursos submarinos. Dentro de la categoría de vehículos no tripulados acuáticos, destacan los ROV (Vehículo Controlado a Distancia, por sus siglas en inglés) y AUV (Vehículo Submarino Autónomo, por sus siglas en inglés). Mientras que los ROV son 172 ANUARIO MARÍTIMO ESPAÑOL ⎮ IFORMACIÓN E INVESTIGACIÓN
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