La expansión de los bioplásticos responde al aumento global del consumo de plástico y a la necesidad de reducir su impacto ambiental
El mercado mundial de bioplásticos podría alcanzar los 12.000 millones de dólares en 2034, según un estudio de Ceresana
El consumo mundial de plásticos continúa creciendo a gran velocidad y se duplica aproximadamente cada veinte años. En los mercados emergentes de África y Asia incluso podría triplicarse. En este contexto, los bioplásticos ganan peso como alternativa a los materiales convencionales derivados del petróleo y el gas natural. El último estudio de Ceresana, en su novena edición, estima que el mercado global de plásticos de origen biológico y biodegradables alcanzará un valor cercano a los 12.000 millones de dólares en 2034.
El impacto ambiental del plástico sigue siendo uno de los principales retos. Incluso en Europa, considerada una de las regiones con mayor conciencia ambiental, la mayor parte de los 42,5 millones de toneladas de residuos plásticos que se generan cada año siguen destinándose a incineración o vertedero y solo alrededor del 20% se recicla. Según un nuevo informe del centro conjunto de investigación de la Unión Europea (JRC), cerca de 3,7 millones de toneladas de residuos plásticos se ‘pierden en el medio ambiente’ cada año en Europa, principalmente por el abandono de residuos, una mala gestión y el lavado de textiles. Casi el 6% de todo el plástico consumido en Europa acaba en el suelo o en el agua.
Para hacer frente a esta situación, los investigadores recomiendan incrementar el reciclaje, pero también fomentar el uso de bioplásticos. La nueva normativa europea de envases y residuos de envases (PPWR) establece por primera vez que todos los envases deberán ser reutilizables o reciclables y, en determinados casos, también compostables. La Comisión Europea trabaja además en cuotas obligatorias para el uso de materias primas de origen biológico. El sector permanece a la espera de la nueva estrategia europea de bioeconomía, prevista para finales de 2025, y de la futura ley de economía circular, programada para 2026.
En la actualidad, sin embargo, la mayor parte de los biopolímeros no se produce en Europa, sino en la región de Asia-Pacífico. Ceresana prevé que esta zona, que dispone de materias primas de biomasa de bajo coste como la caña de azúcar, registre el mayor crecimiento en los próximos años. Además de datos de mercado y previsiones, el estudio incluye información sobre el marco regulador, el entorno económico general y la situación de la industria del envasado en cada país, con datos sobre empresas clave, tamaño del mercado y tasas de reciclaje.
Innovaciones para aplicaciones sostenibles
La industria del envase es actualmente la mayor consumidora de plásticos. Las ventajas de los bioplásticos más vendidos se aprecian especialmente en el envase flexible. El ácido poliláctico (PLA) y los polímeros de almidón, en especial los TPS, ofrecen una mayor permeabilidad, biodegradabilidad y una imagen ambiental más favorable entre los consumidores. Para los bioplásticos a base de almidón y el PLA, el estudio de Ceresana prevé un crecimiento anual del volumen del 7,7 % hasta 2034.
En el caso de los plásticos de origen biológico pero no biodegradables, como el bio-polietileno, el bio-PET o las bio-poliamidas, el crecimiento esperado es más moderado, con una media anual del 5,3%. Al igual que ocurre con los plásticos petroquímicos convencionales, los polímeros de origen biológico presentan ventajas específicas según su campo de aplicación. La biocompatibilidad, por ejemplo, resulta determinante en los implantes médicos. La compostabilidad es un requisito clave para los filmes agrícolas y las macetas. En la impresión 3D, los biofilamentos son valorados, entre otros motivos, porque no desprenden olor a plástico quemado. En la actualidad, los mayores ritmos de crecimiento de los bioplásticos innovadores se registran en los sectores de la automoción y la electrónica.
Contenido del estudio de mercado
El primer capítulo del informe ofrece un análisis detallado del mercado mundial de bioplásticos, con previsiones hasta 2034. Se recogen la evolución de la demanda en toneladas, los ingresos en dólares y euros, y la producción por regiones.
Las aplicaciones se analizan de forma específica en los siguientes ámbitos:
- envases rígidos
- envases flexibles (bolsas, sacos y pouches)
- otros envases flexibles
- bienes de consumo
- automoción y electrónica
- otras aplicaciones
La producción se desglosa por grupos de producto:
- ácido poliláctico (PLA)
- plásticos a base de almidón
- otros plásticos biodegradables
- plásticos no biodegradables de origen biológico
La demanda también se analiza por regiones para diferentes tipos de plásticos, entre ellos los polihidroxialcanoatos (PHA), el polibutileno adipato tereftalato (PBAT) y el bio-polietileno (bio-PE).
El segundo capítulo examina de forma individual los once mercados más relevantes de bioplásticos: Francia, Alemania, Italia, España, Países Bajos, Reino Unido, Estados Unidos, China, Japón, Corea del Sur y Taiwán. Para cada uno se presentan datos de demanda e ingresos, consumo por sectores de aplicación y demanda por tipo de polímero.
El tercer capítulo ofrece una visión general del sector mediante perfiles de los principales fabricantes de bioplásticos, organizados por datos de contacto, volumen de negocio, resultado neto, gama de productos, centros de producción y resumen corporativo. El estudio incluye perfiles detallados de 60 productores, entre los que figuran BASF, Evonik, Cargill, Eastman, FENC, Hengli, Mitsubishi Chemical, PTT GC y TotalEnergies.
















