Azzi desarrolla un enfoque interdisciplinario que se basa en un popurrí de perspectivas y disciplinas

En cada edición, Maison & Objet nombra un Diseñador del año, celebrando el trabajo de los talentos más destacados en la escena internacional del diseño y la decoración. Al no haber podido presentar su instalación después de recibir el galardón en septiembre de 2020, Franklin Azzi ahora ocupará un lugar central en la edición de enero de 2022 con RETRO FUTUR, una exploración inmersiva de su proceso creativo.

Trabajando desde su agencia parisina, creada en 2006, Azzi desarrolla un enfoque interdisciplinario que se basa en un popurrí de perspectivas y disciplinas. Al generar un diálogo implacable entre la arquitectura, el Interiorismo, el diseño y el arte moderno, y con el respaldo de su fondo de dotación dedicado, perfecciona un talento para el diseño y la creación que abarca todas las escalas y espacios.

Desde el tipo de microarquitectura urbana encarnada por el quiosco Eiffel y su estructura prefabricada, hasta torres en Dubai y París, y sin olvidar la remodelación de estructuras existentes como los almacenes Alstom en Nantes, su trabajo se sustenta en una búsqueda de sostenibilidad adaptada a satisfacer las necesidades de los usuarios. Dando la espalda al estilo formal, Azzi desarrolla una arquitectura que es a la vez minimalista en su estética y maximalista en su funcionalidad multifacética y calidad ambiental, abogando resueltamente por un retorno al “sentido común”. Sigue con firmeza los pasos del filósofo y urbanista Paul Virilio, pensador explorador y creador del que una vez fue alumno.

La agencia de Franklin Azzi cuenta con más de sesenta talentosos miembros entre el personal y, al combinar su experiencia con un laboratorio de investigación e innovación, afirma un deseo profundamente arraigado de abrir un nuevo camino. Centrándose de cerca en las personas y su entorno, indaga, examina, analiza y explora contextos, métodos de producción y materiales antes de dar vida a cada espacio. El proceso creativo de la agencia comienza enfocándose en el uso flexible de un espacio y transformando lo que “ya está allí” con el fin de abordar el objetivo actual de crear ciudades preparadas para el futuro. Además de estar a la altura del desafío de ser de alta calidad ambiental, el edificio Daumesnil, que actualmente está desarrollando en un nuevo vecindario en el distrito 12 de París, enarbola la bandera de la flexibilidad, ya que ha sido diseñado específicamente para que sus oficinas puedan ser convertidas en espacios residenciales.

El compromiso de Azzi como diseñador-creador se infiltra en todos los aspectos de su trabajo, desde los proyectos a mayor escala hasta los detalles de fabricación más pequeños, impregnando comisiones públicas y privadas por igual, tanto en Francia como en el extranjero. Da nueva vida al patrimonio construido, inventa los espacios de vida y trabajo del futuro (The Bureau, Be In para LVMH), diseña entornos urbanos que se sientan con simpatía en su entorno (Beaupassage para Emerige) y diseña estructuras desmontables y removibles (el pabellón en el techo de los grandes almacenes Galeries Lafayette).

Emblemática en su capacidad de crear e innovar a través de la reutilización, la nueva Torre Montparnasse, prevista para 2024, busca resumir su visión de la ciudad vertical: baja en uso energético, abierta y resiliente. Convencido de la fuerza de la inteligencia colectiva para enfrentar los desafíos de nuestro tiempo, Franklin Azzi ha estado trabajando en este gran proyecto desde 2017 con Nouvelle AOM, un colectivo que inició para la competencia internacional Demain Montparnasse, asociándose con las prácticas Chartier Dalix Architectes y Hardel Le Bihan Architectes.

Todos estos espacios configuran un nuevo panorama de posibilidades, ofreciendo soluciones sostenibles y contemporáneas diseñadas para beneficiar a sus usuarios.

‘Retro Futur’ es una instalación artística que explora los procesos creativos del futuro utilizando herramientas del pasado, haciéndose eco de la forma en que Franklin Azzi aborda su trabajo como arquitecto.

La instalación inmersiva ‘Retro Futur’ escenifica el día a día del arquitecto a través de una mesa digital, modular y minimalista en metal lacado negro: difunde, a través de una serie de pantallas, una selección de herramientas básicas y tradicionales específicas del oficio (escuadra, bolígrafo rotatorio, papel de calco, mesa de luz, etc.) así como los diversos elementos que se requieren cada día a la hora de desarrollar un proyecto: maquetas arquitectónicas, materiales, bocetos, etc.

Imágenes estáticas y en movimiento aparecen sucesivamente, mostrando las técnicas manuales que el arquitecto emplea junto con sus últimas creaciones.

Los flejes hechos de tiras de fieltro industrial reciclado separan el objeto del resto del salón. Como Joseph Beuys (1921-1986) deseaba transmitir, el fieltro es un material natural excepcional que puede ayudar a retener el calor, una fuente de energía que sirvió como un verdadero motor creativo para la obra del artista alemán.

El espacio en sí está completamente tapizado con fieltro, incluido el techo, creando una burbuja acústica que fomenta la concentración. La cortina de lamas, por su parte, invita al visitante a entrar y salir de la instalación a su antojo. El fieltro duradero y natural, fabricado en Francia por Le Feutre, infunde al espacio un ambiente íntimo y relajante. La instalación adopta decididamente la tendencia retro futurismo que se está extendiendo por las artes creativas (diseño, arquitectura, cine, literatura, moda, etc.) y es una de las fuentes de inspiración que sustentan el enfoque general de la agencia. Se caracteriza por una fusión de imágenes que ve el progreso y la ciencia ficción representados en el pasado con miras a ver todos los aspectos futuristas del presente volverse retro-futuristas con el tiempo.

La arquitectura de Azzi nunca es intencionalmente decorativa, haciéndose eco de la icónica película Blade Runner (Ridley Scott, 1982), cuyo tema central gira en torno a los problemas que rodean la identidad, convirtiéndose finalmente en una búsqueda metafísica y desafiando la noción misma de humanidad.

La bolsa tote que Franklin Azzi ha diseñado para Maison & Objet 2022 arroja luz sobre su enfoque multifacético y su metodología de estilo de proyecto. Junto a sus análisis históricos, su escrutinio de materiales y su examen de la matriz original, el arquitecto se inspira en la acumulación iconográfica. Este proceso creativo casi compulsivo ve todos los sentidos y temas explorados libremente, lo que le permite romper el molde y comprender mejor los desafíos del aquí y ahora.

Habiendo crecido como parte de la generación del ‘muestreo’ alimentada con una dieta multidisciplinar de referencias, Franklin Azzi ha aprendido a digerir, ensamblar y reensamblar una y otra vez para adaptarse a cada contexto. Reinventando implacablemente su enfoque, el arquitecto busca continuamente fusionar sus influencias. El diseño elegido rinde homenaje a algunas de sus fuentes de inspiración preferidas, entre ellas el funcionalismo militar que se manifiesta en determinados objetos y muebles que lleva años coleccionando y que nunca se alejan de su lado. Su investigación cromática y tipológica dio como resultado la elección de un símbolo atemporal, el objetivo, que se asienta sobre un fondo del icónico Pantone 485 C rojo de la feria M&O.

Su versión de la bolsa tote ofrece un manifiesto simple, efectivo y universal arraigado en un diseño divertido e incisivo.