Implantación de un proceso de Commissioning en un Data Center
Por Carlos Muñiz, director de Operaciones Área Data Center en Commtech Commissioning Services-Grupo Aire Limpio
04/06/2025
Cuando se trata de implantar un Proceso Cx a un Centro de Procesamiento de Datos (CPD), debemos tener en cuenta la criticidad del entorno construido; la redundancia de equipos y sistemas, y la necesidad de realizar pruebas en diversos escenarios de funcionamiento, mantenimiento y fallo, que aseguren una operación eficiente acorde al diseño.
Por ello, su implantación se realiza gradualmente, desde la fase de diseño hasta la de recepción, y requiere un apoyo total de la propiedad u operador, así como la colaboración completa de todos los participantes en la obra: desde la ingeniería de diseño y dirección facultativa, hasta los contratistas, fabricantes y el equipo de gerencia del proyecto.
Conocimiento, experiencia, autoridad y proactividad, claves en un Proceso Cx
Un Proceso Cx requiere además un equipo humano con conocimiento, experiencia, autoridad y proactividad en la gestión y coordinación del proceso; un Plan Cx; instrumentación y equipos de medida, y un registro actualizado de documentos.
Existen dos maneras de implantar el Proceso, bien combinando un CxA - el Equipo Cx que reporta directamente a la propiedad u operador- y un CxM -el Equipo Cx que reporta al Contratista General-, o bien usando un CxP, que es el Equipo de Servicios de Cx que, reporta a la propiedad u operador y también gestiona y coordina a los equipos de puesta en marcha de los contratistas y fabricantes subcontratados por el contratista general.
Inicialmente, se deben fijar los criterios y alcance del Proceso a través un Plan Cx, con un perfil dinámico, cuyos objetivos son: establecer el alcance de todas las actividades Cx; definir quién interviene en el proceso y sus responsabilidades; proponer una estructura organizativa para el Proceso; proporcionar mecanismos de supervisión y validación, e indicar las herramientas de seguimiento para monitorizar el proceso.
El fin último es demostrar al cliente final, mediante todas las verificaciones, pruebas y controles que sean necesarias, que los sistemas y equipos cumplen con los requisitos de diseño y operación establecidos -en todo tipo de escenarios- y que el contratista general respeta el programa y las especificaciones descritas en el contrato.

Actuaciones en cinco niveles, que garantizan el proceso Cx
El proceso se realiza en cinco niveles que incluyen la revisión Cx de diseño, los ensayos presenciales en fábrica, la recepción y montaje de equipos e instalaciones, la puesta en marcha y, finalmente, las pruebas de rendimiento funcional.
En el nivel 0 se desarrolla un primer informe de progreso con comentarios, sugerencias, observaciones, etc., según normativa, incluyendo aspectos sobre la puesta en marcha y mantenimiento de los sistemas previstos en el diseño. Se revisan también los valores y condiciones de diseño por equipos y sistemas; la estrategia de operación de sistemas mecánicos, eléctricos de Media y Baja Tensión, Sistema de Alimentación Ininterrumpida y generadores; la ubicación de puntos de medida, equipos de medición y sensores; la estrategia de medición del consumo de energía; la secuencia de operación, y el alcance de pruebas en fábrica, prefuncional y funcional, así como los Ensayos de Integración.
En el nivel 1, se verifica el funcionamiento y la capacidad de los componentes que se instalarán en el CPD, utilizando un procedimiento denominado FWT/FAT que se lleva a cabo en las instalaciones o laboratorios de los propios fabricantes, o bien en laboratorios externos. Esta etapa implica al menos a un representante del Equipo Cx, y pueden presenciarlas representantes del equipo de gerencia del proyecto y de la propiedad/operador.
A continuación, en el nivel 2, las labores se centran en comprobar, durante la recepción y montaje de los equipos en la obra, si éstos se corresponden con los modelos probados en fábrica, no están dañados, y que el montaje se realice de acuerdo con los requisitos del proyecto y las instrucciones del fabricante. Esta etapa implica al equipo de Control de Calidad del contratista.
Además, se realizarán pruebas estáticas: pruebas de presión, limpieza, pruebas de estanquidad, continuidad de cables, conexiones internas en cuadros eléctricos, etc.
En el nivel 3, Puesta en Marcha / Functional Componente Testing (FCT), se comprueba que los ajustes y secuencias operativas estén desarrolladas y acordadas por todas las partes. Las pruebas funcionales certifican que el equipo/componente instalado es operable a un nivel básico. Esto incluye listas de verificación funcionales para la puesta en marcha de equipos mecánicos y eléctricos. Las pruebas funcionales a menudo también incluyen la verificación inicial del rendimiento por parte del fabricante o proveedor.
Una vez realizadas todas las comprobaciones y ajustes de la fase anterior, se pasa al nivel 4, Pruebas Funcionales del Sistema / Functional System Testing (FST), donde se realizan las pruebas de rendimiento funcional, que aseguran que cada sistema está listo para integrarse con otros sistemas que soportan el Centro de Procesamiento de Datos. Asimismo, se comprueba y certifica que el rendimiento de los equipos y sistemas es el adecuado, asegurando las condiciones de diseño y operación de forma eficiente y segura.
Finalmente, en el nivel 5, Pruebas de Sistema Integrados / Integrated System Testing (IST), se realizan pruebas para verificar que todos los sistemas del Data Center operan de forma sincronizada y responden según diseño ante distintas condiciones de carga, mantenimiento y fallo.
Beneficios del proceso Cx en los Data Center
Implantar, de forma rigurosa, un proceso Cx en un Data Center, conlleva múltiples beneficios que toda propiedad debe valorar.
En este sentido, destacamos la mayor fiabilidad de las instalaciones del CPD; la reducción de los consumos energéticos y costes de explotación -clave en estas infraestructuras-; la disponibilidad de las condiciones ambientales objetivas; la mejora de las condiciones de operación y mantenimiento; la extensión de la vida útil de los equipos; la formación adecuada del personal de explotación, y la disponibilidad de una documentación completa.