FEVEMP: “Es importante respetar el principio de neutralidad tecnológica de la UE”

Hablamos con una de las tres entidades que firmó la carta de la LEVA-EU. La federación española de vehículos de movilidad personal explica a Tradebike por qué se suma a las 196 entidades que piden retirar las limitaciones planteadas por ZIV, al considerar que dificultarían la innovación y reducirían la accesibilidad a la movilidad eléctrica ligera.

El debate europeo sobre el futuro regulatorio de las e-bikes continúa ganando intensidad. La publicación del documento de ZIV, que propone poner limitaciones a bicis eléctricas, ha generado una respuesta inmediata dentro del sector de la movilidad eléctrica ligera, tal y como os informamos recientemente. La asociación LEVA-EU lideró esta reacción con una carta abierta dirigida a ZIV, CONEBI y a la Comisión Europea, respaldada por 196 firmantes de 22 países, entre ellos la FEVEMP (Federación Española de Vehículos de Movilidad Personal y patinetes eléctricos), que aporta ahora su valoración exclusiva a Tradebike.

Según Antonio Gómez Muriana, Responsable Relaciones Internacionales de la FEVEMP, las objeciones planteadas por LEVA-EU apuntan a que las restricciones propuestas limitarían el desarrollo tecnológico. En conversación con Tradebike, la federación sostiene que el actual marco normativo europeo ya provoca situaciones que considera incoherentes. Según explican, “es importante respetar el principio de neutralidad tecnológica de la UE”, lo que deriva en que “vehículos con el mismo perfil de riesgo reciben normativas distintas por detalles técnicos arbitrarios”. La federación recuerda que esta situación ya afecta a productos cotidianos del mercado: “un patinete eléctrico que incorpora un asiento pasa automáticamente a un marco regulatorio desproporcionado e inadecuado, que impide su puesta en el mercado y termina perjudicando al ciudadano al negarle el acceso a soluciones innovadoras sin una justificación real”. Desde la FEVEMP insisten en que cuando la regulación vincula la movilidad sostenible únicamente al ejercicio físico “se penaliza a quienes necesitan asistencia motorizada y se reduce la oferta de alternativas al coche”, limitando opciones que podrían disminuir la dependencia de vehículos pesados y contaminantes.

Respecto a las soluciones, la federación reclama que la Unión Europea avance hacia una estructura normativa común para todos los vehículos ligeros basada en criterios objetivos de seguridad. Según trasladan a este medio, “es imprescindible adoptar un marco coherente guiado por la neutralidad tecnológica, donde la clasificación se fundamente en parámetros como la masa, la velocidad o la aceleración”. La FEVEMP sostiene que el sistema actual contiene “criterios arbitrarios que penalizan a determinados vehículos por detalles como la presencia de pedales, la existencia de un asiento, la altura del manillar, el tipo de transmisión o la potencia del motor”, lo que distorsiona la innovación y dificulta la convivencia de soluciones eléctricas ligeras en el mercado. En su opinión, este enfoque permitiría ofrecer alternativas reales al coche, manteniendo la seguridad sin limitar el acceso a nuevos desarrollos industriales que hoy quedan fuera por trabas regulatorias.