Universidades valencianas lideran la investigación española en comunicación cuántica segura
Una red cuántica para proteger la información crítica
La distribución de información confidencial a través de Internet ha convertido la seguridad de las comunicaciones en un objetivo prioritario. En este contexto, las universidades valencianas están desarrollando una infraestructura de comunicación cuántica que promete una protección sin precedentes frente a ciberataques. El proyecto se enmarca en el Plan Complementario de Comunicaciones Cuánticas, promovido por el Gobierno de España y la Generalitat Valenciana, con el propósito de proteger los datos sensibles y reforzar la competitividad tecnológica nacional.
La Comunitat Valenciana participa en este plan junto con Madrid, Cataluña, País Vasco, Galicia y Castilla y León. Su contribución se articula en once proyectos liderados por la Universidad Politécnica de Valencia, la Universitat de València, la Universidad de Alicante y la Universidad CEU Cardenal Herrera. El presupuesto autonómico asciende a 1,8 millones de euros, financiados en un 65% por el Ministerio de Ciencia e Innovación y en un 35% por la Conselleria de Educación, Cultura, Universidades y Empleo.
La física cuántica aplicada a la seguridad de las comunicaciones
El coordinador del Plan Valenciano de Comunicación Cuántica, José Capmany, explica que los sistemas tradicionales codifican la información en bits, cuya vulnerabilidad permite ataques de alto nivel. La comunicación cuántica, en cambio, utiliza fotones que pueden entrelazarse entre sí. Si un intruso intenta acceder al mensaje, el entrelazamiento se rompe, la información se destruye y el sistema detecta la intrusión de forma inmediata.
Esta capacidad convierte a la comunicación cuántica en una herramienta decisiva para sectores sensibles como la sanidad, el suministro eléctrico o los servicios públicos. Las universidades valencianas, pioneras en este ámbito, trabajan en el desarrollo de hardware avanzado y algoritmos capaces de incrementar la fiabilidad y la velocidad de transmisión, garantizando la integridad de los datos incluso en entornos de alto riesgo tecnológico.
De los aerogeneradores a las misiones espaciales
El conjunto de proyectos impulsados en la Comunitat Valenciana abarca ámbitos muy diversos, desde la energía renovable hasta la exploración espacial. La Universidad CEU Cardenal Herrera lidera el proyecto QUANTWIN, que aplica un gemelo digital para analizar cómo la erosión afecta al rendimiento de los aerogeneradores. Este modelo combina simulaciones matemáticas y algoritmos cuánticos para optimizar procesos industriales complejos.
La Universidad de Alicante participa con el proyecto NCC, centrado en códigos de corrección de errores que mejoran la eficiencia de las comunicaciones cuánticas. La Universitat de València desarrolla EPICO, QMOL y Q-DIMENSION, orientados a optimizar la velocidad, la fiabilidad y la seguridad de la transmisión cuántica. Estas líneas de investigación incluyen la creación de hardware especializado y la experimentación en misiones satelitales para validar la comunicación entre sistemas distribuidos.
Por su parte, la Universidad Politécnica de Valencia coordina FinP-MTP-Q, PLATSinNx-Q, CUPIDO, Q-FACE y QUANTUMABLE, todos ellos dirigidos a desarrollar dispositivos más eficientes y tecnologías láser avanzadas. Entre sus objetivos figura la mejora de la interconexión en redes 5G y la integración con sistemas de inteligencia artificial, configurando una infraestructura de comunicación de nueva generación.
Un plan alineado con la estrategia cuántica europea
El Plan Complementario de Comunicaciones Cuánticas está plenamente alineado con las iniciativas europeas Quantum Flagship y EuroQCI (European Quantum Communications Infrastructure), destinadas a establecer una red continental de comunicación cuántica segura. La finalidad es construir un escudo de protección de datos que blinde a la economía y las instituciones frente a ataques cibernéticos, al tiempo que impulsa la competitividad de la industria tecnológica europea.
Esta red permitirá, además, desarrollar servicios complementarios como transmisiones de señales de tiempo ultraprecisas y sistemas de sensado cuántico, con aplicaciones que podrían extenderse a la sincronización de redes eléctricas, la monitorización científica o la comunicación entre ordenadores cuánticos en el futuro.
El plan forma parte del Plan de Recuperación y Resiliencia de la Unión Europea, con una dotación total de 76 millones de euros. En el caso valenciano, la participación consolidada desde 2022 refleja la voluntad de las universidades y las administraciones públicas de situar a España entre los países que lideran el desarrollo de la comunicación cuántica segura en Europa.



