La IA da forma a la ciberseguridad del futuro
Gema Ruiz, responsable de innovación en Softtek
22/04/2025La digitalización ha llegado para transformar los procesos de las empresas, incluidos los sectores que tradicionalmente han operado en un entorno más físico, como la manufactura, la energía o la automoción. Sin embargo, este avance trae consigo riesgos importantes, especialmente cuando se maneja información confidencial y crítica. Las compañías industriales, al adoptar tecnologías digitales, se exponen a nuevas amenazas cibernéticas que, si no se gestionan adecuadamente, pueden tener consecuencias devastadoras no sólo para la operativa, sino para la seguridad y reputación de la empresa.
El último informe del Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) ha revelado que durante 2024 se gestionaron más de 97.000 incidentes de ciberseguridad, lo que representa un aumento del 16,6% respecto al año anterior. Este dato refleja, por un lado, el incremento de las amenazas digitales y, por otro, la urgencia de reforzar nuestras medidas de protección.
Muchas de estas empresas dependen de sistemas de control industrial (ICS), redes de suministro de energía o maquinaria automatizada, que son objetivos atractivos para los ciberdelincuentes. El acceso a estos sistemas podría permitir desde el robo de datos confidenciales hasta la paralización total de la producción, lo que podría acarrear graves pérdidas en términos económicos y reputacionales.
Las soluciones de ciberseguridad se han convertido en una prioridad esencial para las compañías industriales. La protección de los sistemas críticos debe ser una estrategia integral que abarque desde la seguridad de los dispositivos de la red hasta las comunicaciones y los datos almacenados. En este sentido, la ciberseguridad no sólo previene los ataques, sino que también ayuda a detectar y mitigar riesgos antes de que se conviertan en amenazas reales. La autenticación multifactor, el cifrado de datos y los sistemas de detección de intrusos son sólo algunas de las herramientas que permiten fortalecer la infraestructura industrial ante estos peligros.
La IA permite detectar anomalías antes de que sea demasiado tarde
Las soluciones de inteligencia artificial juegan un papel crucial en este proceso. Gracias a su capacidad para analizar grandes volúmenes de datos en tiempo real e interpretar patrones de comportamiento, la IA puede identificar anomalías o actividades sospechosas que podrían pasar desapercibidas por los sistemas tradicionales. Por ejemplo, la IA es capaz de detectar comportamientos inusuales en las redes industriales, identificar accesos no autorizados a sistemas críticos e incluso prever ataques antes de que se materialicen. Esto se debe a su capacidad para mejorar la respuesta ante amenazas a medida que aprende y evoluciona constantemente.
Dentro del ámbito industrial, ciertos sectores son especialmente susceptibles a ciberataques. La industria energética, las fábricas automatizadas y las infraestructuras críticas son algunos de los objetivos preferidos de los atacantes. En estos, la presencia de sistemas de control industrial conectados a redes externas aumenta significativamente el riesgo. Además, el valor de los datos manejados, como planos de infraestructura, procesos de producción y estrategias empresariales, hace que los cibercriminales los vean como un botín muy atractivo para sacar provecho.
El sector energético, por ejemplo, es particularmente vulnerable por la dependencia de las infraestructuras digitales para la gestión de la red eléctrica y la monitorización de las operaciones. Los ataques a estas infraestructuras pueden causar no sólo grandes pérdidas económicas, sino también poner en riesgo la seguridad nacional. De manera similar, las empresas del sector manufacturero y la automoción enfrentan amenazas relacionadas con la manipulación de procesos automatizados, lo que puede tener consecuencias operativas muy graves.
Es evidente que la digitalización y la globalización también traen consigo una creciente complejidad. Las empresas ya no operan en un entorno local o aislado, sino que interactúan con proveedores, clientes y socios a nivel global, lo que amplifica el riesgo de ciberataques. Las redes de comunicación extendidas, las operaciones en la nube y la interconexión de sistemas industriales crean un entorno donde las amenazas pueden surgir desde cualquier parte del mundo. Si no se gestionan adecuadamente, los sistemas de protección pueden volverse un punto débil en esta compleja red global.
En este contexto, es necesario que las empresas industriales cuenten con una ciberseguridad proactiva, que no solo se limite a reaccionar ante un ataque, sino que también se enfoque en la anticipación y prevención. Las soluciones de IA ayudan a identificar y bloquear amenazas de forma automática, sin necesidad de una intervención humana constante. Esto es especialmente importante en un entorno industrial globalizado, donde las amenazas pueden evolucionar rápidamente.
Una cuestión de preparación
A pesar de los avances en ciberseguridad, la realidad es que muchas empresas españolas, especialmente en el ámbito industrial, aún no están completamente preparadas para afrontar los ciberataques de manera efectiva. Aunque hay conciencia de la amenaza, la inversión en soluciones avanzadas de seguridad sigue siendo insuficiente en muchas de ellas. Esto se debe en parte a la falta de personal especializado y, en algunos casos, a la percepción errónea de que las pequeñas y medianas empresas no son objetivos atractivos para los atacantes. Sin embargo, la tendencia actual muestra que los ciberdelincuentes no hacen distinciones por el tamaño de la compañía, sino por la vulnerabilidad de sus sistemas.
Las soluciones basadas en inteligencia artificial son un paso importante hacia la mejora de la ciberseguridad en las empresas españolas. La IA permite una respuesta más rápida y precisa ante incidentes, además de ofrecer una mayor capacidad de adaptación a nuevas amenazas. Si las compañías industriales españolas implementan de manera efectiva estas tecnologías, podrán fortalecer significativamente sus defensas ante la creciente ola de ciberataques.
En definitiva, la digitalización trae consigo tanto oportunidades como desafíos para las empresas industriales. La ciberseguridad es un aspecto crucial para garantizar que estas puedan operar de manera segura y eficiente en un entorno globalizado y digital. Por ello, la implementación de soluciones avanzadas, como las basadas en inteligencia artificial, y la adopción de buenas prácticas de seguridad son pasos fundamentales para proteger los sistemas críticos, los datos confidenciales y la continuidad operativa. Las empresas deben estar preparadas para la amenaza digital que enfrentan, y la tecnología emerge como la mejor aliada en este proceso.



