Telepeajes: Levantando las barreras

Mover mercancías por Europa implica atravesar toda una red de carreteras altamente desarrollada, aunque también sujeta a múltiples sistemas de peaje. Desde viñetas electrónicas hasta dispositivos a bordo de los vehículos que calculan los kilómetros recorridos. En resumen, cada país aplica su propio modelo de tarificación para el uso de sus infraestructuras. Esta fragmentación normativa y tecnológica obliga a las empresas de transporte por carretera a afrontar una gestión compleja y dinámica si quieren mantenerse en el negocio y que éste sea eficaz y rentable.

En Europa no existe un sistema único de peaje. Cada país ha desarrollado su propio mecanismo de cobro que se clasifican en dos grandes categorías; sistemas abiertos o cerrados. Los primeros se utilizan en países del centro y este de Europa como Austria, Hungría, Rumanía, Eslovaquia, Eslovenia o Bulgaria, consisten en una tarifa fija que ofrece la posibilidad de circular por sus autopistas de pago durante un periodo determinado. Este es el sistema de viñeta y ésta puede ser física con una pegatina o electrónica, la e-viñeta. Los segundos, los cerrados, son los sistemas más comunes en países como Francia, Italia, España o Portugal, se paga en función del trayecto recorrido y tipo de vehículo, generalmente a través de estaciones de peaje en autopistas. Este sistema también está implantado en Alemania, aunque en su caso se aplica exclusivamente a vehículos pesados de más de 7,5 toneladas mediante el sistema Toll Collect que usa tecnología GPS y se cobra automáticamente según la distancia recorrida, tipo de vehículo y peso. Del mismo modo, la mayoría de los países han pasado a sistemas de cobro electrónico para vehículos pesados, normalmente a partir de 3,5 toneladas, así el sistema de Francia, el TIS-PL, emplea dispositivos electrónicos a bordo (OBU, por sus siglas en inglés) que permiten el paso sin detenerse en los peajes, mediante el sistema Liber-t o Telepeaje interoperable. El Telepass, muy utilizado en Italia tanto por vehículos ligeros como pesados, permite el acceso rápido a autopistas, aparcamientos y ferris. El Via-T, el sistema de telepeaje compatible con la mayoría de las autopistas de peaje en España. Austria, por su parte, utiliza el sistema GO-Box para vehículos de más de 3,5 t, con cobro por kilómetros recorridos, empleando microondas DSRC para la detección de los vehículos. Por último, Hungría usa el sistema HU-GO basado en GPS y de uso obligatorio para camiones, permite el prepago o pago a posteriori mediante un registro.

Para los vehículos pesados que se dedican al transporte en Europa el uso de dispositivos electrónicos a bordo se ha convertido en una norma. Estos dispositivos permiten registrar y abonar los peajes de forma automática, sin necesidad de detenerse en las barreras de los peajes, mejorando la eficiencia del transporte, la fluidez del tráfico y la reducción de los tiempos de tránsito.

En Europa coexisten varios sistemas de peaje que se clasifican en dos grandes categorías, abiertos y cerrados.

Frente a esta realidad de diversidad de sistemas de peajes, la Unión Europea ha impulsado el desarrollo del EETS (European Electronic Toll Service), un servicio que persigue integrar en un solo sistema el pago de peajes en varios países. Merced de los dispositivos EETS, las empresas pueden gestionar los peajes de múltiples estados a través de un único contrato y por tanto una factura unificada y un único aparato a bordo de cada vehículo. En la actualidad, proveedores como DKV Mobility, Telepass, Toll4Europe, Eurowag, BP Tollbox o Shell ofrecen soluciones EETS que permiten recorrer países como Alemania, Francia, Italia, Austria, España, Portugal, Bélgica o Hungría sin necesidad de adquirir dispositivos específicos para cada red de autopistas. En España, no son pocas las empresas del sector que adoptan este tipo de soluciones como Primafrio, Disfrimur, Transportes Caudete o Grupo Fuentes son solo algunas de las que emplean estos dispositivos para reducir papeleo y evitar errores en la declaración de trayectos de las mercancías. Esto les permite integrar la gestión de los peajes en sus sistemas de planificación de rutas y contabilidad, del mismo modo que, beneficiarse de condiciones especiales con sus proveedores de servicios.

El incumplimiento de las obligaciones de peaje en Europa no resulta un asunto banal para las empresas de transporte, pues circular sin viñeta válida o sin OBU activo o mal configurado puede conllevar multas importantes para el operador logístico. De esta manera, circular sin GO-Box en Austria o con saldo insuficiente puede suponer una multa inmediata de hasta 240 euros para vehículos ligeros y hasta 2.000 euros para pesados. Las sanciones en Hungría por no pagar el HU-GO superan los 400 euros por infracción, aplicándose por tramo sin cobertura. El sistema Toll Collect de Alemania es capaz de imponer multas de hasta 20.000 euros en casos graves de fraude o manipulación. En Francia y Italia, si un vehículo pesado accede a una autopista sin OBU o sin registrarse correctamente en el sistema de peaje electrónico, la multa puede superar los 1.000 euros por trayecto efectuado. Además, en muchos países las autoridades pueden inmovilizar el vehículo hasta que se abonen las cantidades adeudadas, lo que supondría una pérdida de tiempo, costes añadidos al transporte, incumplimiento de la entrega e incluso, el deterioro de la mercancía.

La elección del sistema adecuado y la adopción de soluciones interoperables no solo simplifican la operativa diaria de la empresa, sino que también permiten un mejor control de los costes. Las plataformas de peaje avanzadas ofrecen servicios como informes detallados de uso, facturación consolidada, gestión centralizada de flotas y herramientas para la recuperación del IVA en peajes internacionales. Así mismo, en un contexto donde el precio del combustible y los costes logísticos siguen al alza, minimizar gastos innecesarios en peajes o incluso, percibir bonificaciones, evitar sanciones por circular sin autorización y optimizar las rutas de tránsito son elementos fundamentales para mantener la competitividad en el sector.

La elección del OBU y la adopción de soluciones interoperables simplifican la operativa y permiten un mejor control de costes.

En el ámbito del transporte profesional en España y Europa, diversas empresas ofrecen dispositivos de telepeaje que facilitan la circulación por los diversos países y sus sistemas. Andamur ofrece dispositivos como Toll4Europe, ServiBOX e Interoperable EU, que permiten el pago de peajes en hasta 18 países europeos, incluyendo España, Francia, Italia, Alemania, Polonia y los puentes escandinavos. Estos dispositivos emplean tecnologías de radiofrecuencia y satelital, ofreciendo ventajas como la activación y desactivación de países sin coste adicional, la recuperación de IVA y la gestión centralizada de flotas. Por su parte, AS24, filial de TotalEnergies, proporciona soluciones específicas de telepeaje con su tarjeta Eurotrafic para transportistas. Sus dispositivos permiten el pago de peajes en varios países europeos facilitando la gestión de flotas y la recuperación de impuestos, así como servicios adicionales como las tarjetas de combustible y herramientas de gestión de gastos. Axxès ofrece dispositivos como B’moov y Viaxxès. Mientras el primero permite la circulación por 14 países europeos, incluyendo Francia, Alemania, Italia y los puentes escandinavos, con servicios de geolocalización y seguimiento de entregas, el segundo, está diseñado para rutas en España, Francia, Portugal e Italia. Ambos dispositivos permiten el pago de estacionamientos seguros y la recuperación de IVA. El servicio CRT de Cepsa, proporciona dispositivos de telepeaje que permiten a los transportistas abonar peajes en diversas autopistas europeas. Estos dispositivos se integran con otros servicios de la empresa como las tarjetas de combustible, así como herramientas de gestión de flotas. OnTurtle ofrece su servicio OnTolls Europe, que permite el pago de peajes en 18 países europeos con un único dispositivo. Gracias a su colaboración con Axxès, también proporciona los dispositivos B’moov y Viaxxès, ampliando la cobertura y servicios disponibles para los transportistas. Del mismo modo, también ofrecen funcionalidades como la geolocalización, la gestión de flotas y la recuperación de IVA. Repsol ofrece soluciones de telepeaje a través de su plataforma B2B, facilitando el pago de peajes en España y otros países europeos. Sus dispositivos están diseñados para integrarse con otros servicios de movilidad y gestión de flotas que ofrece la misma compañía. UTA Edenred cuenta con el dispositivo UTA One Next, compatible con 17 contextos de peaje en 15 países europeos, incluyendo Alemania, Francia, Italia y los países escandinavos. Este dispositivo ofrece conectividad 4G, control en tiempo real a través de una aplicación móvil y servicios telemáticos avanzados. Además, es compatible con el nuevo sistema de peaje basado en kilometraje implantado en Dinamarca desde enero de 2025. Por último, Vrio ofrece también soluciones de telepeaje que permiten el abono de peajes en diversas autopistas europeas y sus dispositivos se integran con otros servicios como son sus tarjetas de combustible y herramientas de gestión de flotas.

Como vemos, hay una amplia variedad de soluciones de telepeaje que proporcionan a los profesionales herramientas eficientes para gestionar sus rutas por Europa, optimizando costes y tiempos de tránsito. La elección del dispositivo más adecuado dependerá de las rutas habituales, las necesidades de gestión específicas y los servicios adicionales específicos de cada empresa de transporte.