Epsar impulsa un salto estratégico en la reutilización del agua en el área metropolitana de València
La Generalitat Valenciana, a través de la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar), anunció en el Dinar dels Guardes del Tribunal de las Aguas de Valencia que elevará del 45 al 75 % la reutilización del agua depurada en el área metropolitana de València.
Este incremento inversor permitirá recuperar cerca de 29 hectómetros cúbicos de agua regenerada al año, “dejando de perder un recurso valioso y convirtiéndolo en motor de sostenibilidad, agricultura y recuperación ambiental”. Según detalló el vicepresidente segundo, “estos costes los asume íntegramente la Epsar, no los ayuntamientos ni los agricultores”, al tiempo que defendió que “lo hacemos porque creemos en una política hídrica moderna, responsable y comprometida con los regantes y con el medio ambiente”.
Más inversión para la regeneración y el bombeo
Martínez Mus precisó que el salto del 45 al 75 % en reutilización supone un gasto adicional de 513.000 euros respecto a la situación actual. Esta variación deriva del aumento tanto de los costes de regeneración como de los de impulsión hasta los puntos de entrega, con especial incidencia en las instalaciones de Puebla de Farnals y Carraixet.
El vicepresidente segundo subrayó también “el papel clave de los regantes en la gestión eficiente del agua, la sostenibilidad y la protección de nuestro entorno”, y destacó “la lección de gobernanza participativa que representan las comunidades de regantes, donde la gestión equitativa de un recurso esencial se pone al servicio del bien común y del equilibrio territorial”.
Pacto del Agua: una estrategia basada en el consenso
Martínez Mus reivindicó el espíritu de consenso que la Generalitat quiere consolidar en su política hídrica y recordó que “hablamos de agua como instrumento de unión y no de enfrentamiento”, en referencia al I Pacto de l’Albufera, definido como “un acuerdo histórico que simboliza el esfuerzo, la cooperación y la generosidad que garantizarán la salud ambiental del lago en los próximos años”.
Entre las principales medidas del pacto, el vicepresidente segundo detalló:
1.- La inversión en depuradoras con tratamiento terciario para generar agua apta para el riego.
2.- El abono de los costes de impulsión de aguas regeneradas desde Pinedo al Azud del Reparto.
3.- La construcción de nuevas balsas para asegurar el riego y aumentar los caudales destinados al lago.
Estas actuaciones, señaló, reflejan “un cambio de etapa basado en el consenso, la solidaridad y la cooperación”.
El valor simbólico y operativo del Tribunal de las Aguas
En su intervención, Martínez Mus destacó igualmente la vigencia del Tribunal de las Aguas, al que definió como “uno de los símbolos vivos de la gestión sostenible y democrática del agua, basado en la oralidad, la inmediatez y el consenso, que durante siglos ha garantizado la resolución pacífica de los conflictos entre regantes”. Añadió que su continuidad “nos recuerda que las mejores soluciones vienen de la confianza mutua y del compromiso colectivo con aquello que nos une: el agua, fuente de vida, de trabajo y de identidad para esta tierra”.






















