Su concepto de transformación del mecanizado (MX) le permite desarrollar soluciones de fabricación más económicas y de alta calidad

Los retos en la tecnología espacial también son grandes. Los componentes de los sistemas de propulsión de cohetes o satélites deben soportar las condiciones extremas del viaje al espacio y en el espacio. Las aleaciones de titanio o níquel de alto rendimiento se mecanizan en procesos altamente especializados, mientras que los tamaños de lote de 1 contribuyen al desafío económico en la mayoría de los casos.

Como resultado de estos retos, la aviación y el espacio llevan ya algún tiempo inmersos en un proceso de transformación de gran alcance. Por un lado, la industria invierte tradicionalmente a largo plazo, ya que el desarrollo de nuevos aviones suele llevar más de diez años y los proyectos espaciales también se diseñan para largos periodos de tiempo. Por otro lado, las fluctuaciones del mercado o los cuellos de botella en el suministro exigen hoy en día un alto grado de flexibilidad. Además, las inversiones no solo son imprescindibles por razones de competitividad. Los ambiciosos objetivos de sostenibilidad también desempeñan un papel decisivo. Ningún otro sector está sometido a tanta presión para reducir las emisiones de CO₂. Incluso debería ser posible volar sin emisiones para 2050. Por lo tanto, las tecnologías de propulsión alternativas, la construcción ligera y los nuevos materiales están en auge. El desarrollo de aviones de hidrógeno, jets eléctricos de corto recorrido y combustible de aviación sostenible (SAF) está en pleno apogeo. Sin embargo, la integración de estas tecnologías es costosa, lleva mucho tiempo y plantea nuevas exigencias en materia de infraestructura y logística. Las empresas que se adapten a soluciones sostenibles en una fase temprana y establezcan asociaciones con proveedores de tecnología innovadora obtendrán una ventaja competitiva decisiva.

Estas colaboraciones ya son esenciales en la producción, donde se realiza una gran parte de las inversiones. En la fabricación de máquinas herramienta, en particular, la aviación y el espacio son un sector clave indiscutible, ya que la calidad de los componentes de los aviones —para la protección de los pasajeros— y la fiabilidad de los componentes aeroespaciales tienen la máxima prioridad. Certificaciones como la AS9100 para la producción de nuevos componentes aeronáuticos garantizan unos altos estándares de calidad. Además, los requisitos de alta rentabilidad son enormes, ya que predominan los lotes pequeños con gran variabilidad. A esto se suma una gran variedad de aplicaciones. Las aleaciones de aluminio con altas tasas de eliminación son tan comunes como las aleaciones de titanio y níquel de alto precio, que se mecanizan en centros de mecanizado estables. Las geometrías complejas también son habituales. Debido a estos y otros requisitos, la cooperación con clientes del sector de la aviación y el espacio ha dado lugar repetidamente a soluciones de fabricación innovadoras en DMG MORI, que siguen marcando la pauta en cuanto a precisión y productividad hasta el día de hoy. Las aplicaciones pioneras abarcan desde el fresado simultáneo eficiente en 5 ejes con altos volúmenes de corte hasta el mecanizado de precisión de materiales difíciles de cortar en la tecnología de turbinas y la construcción de cohetes, pasando por la fabricación aditiva de componentes estructurales con peso optimizado.

Estas tecnologías CNC, que siguen siendo las tecnologías clave en la actualidad, permiten a DMG MORI desarrollar soluciones de fabricación cada vez más económicas que también satisfacen los crecientes requisitos de calidad. Se basan en el concepto de transformación del mecanizado (MX), que combina la integración de procesos, la automatización, la transformación digital (DX) y la transformación ecológica (GX). Por un lado, cada vez más pasos de trabajo (fresado, torneado, rectificado, medición, etc.) se realizan en una sola configuración, mientras que las soluciones de automatización flexibles reducen al mínimo la intervención manual. Esto aumenta la fiabilidad del proceso y alivia la carga de los trabajadores cualificados que se necesitan en la preparación del trabajo y la programación. Por otro lado, los productos digitales dan soporte a procesos de producción completos, desde la planificación de pedidos y la programación hasta el control de calidad y la trazabilidad sin fisuras. Con estas sofisticadas soluciones de fabricación, DMG MORI optimiza la capacidad de las máquinas, el uso de materiales y el consumo de energía, lo que a su vez tiene un efecto positivo en los objetivos de sostenibilidad.

La aviación y el espacio son y seguirán siendo una industria de largo recorrido que aspira a alcanzar las estrellas. Todos los actores deben planificar con antelación e invertir pronto. Por muy complejos que sean los retos, ofrecen muchas oportunidades. Las empresas que se mantengan flexibles, piensen con antelación en términos tecnológicos y no teman invertir en asociaciones e innovaciones sobrevivirán a largo plazo, incluso en un mercado volátil. Con un fuerte enfoque en procesos de fabricación cada vez más inteligentes y sostenibles, DMG MORI crea precisamente las soluciones que los fabricantes de aviones, los expertos aeroespaciales y sus proveedores necesitan hoy en día para mantenerse a largo plazo en el nivel de vuelo.