El Parlamento Europeo y el Consejo de Ministros llegan a un acuerdo sobre REACH
11 de diciembre de 2006
El Parlamento Europeo y el Consejo de Ministros han logrado, después de varios intentos, alcanzar un acuerdo sobre
REACH, el conjunto de regulaciones sobre nuevos productos químicos. Dentro del compromiso final, que se presentará a todos los eurodiputados el día 13 de diciembre, se rechazará la autorización de 1.500 productos químicos considerados como los más dañinos si existen alternativas más seguras. Sin embargo, una nueva enmienda permitirá la aprobación de ciertas sustancias químicas en el caso de que los productores demuestren que pueden ser controlados de forma adecuada. Esta medida será favorable para la industria, pues la sustitución obligatoria podría determinar inadvertidamente una prohibición sobre sustancias químicas que tengan beneficios socioeconómicos. Asimismo, para las sustancias peligrosas, habrá la obligación de presentar un plan de sustitución para su reemplazo por alternativas más seguras. Si no existiera alternativa, los productores deben presentar un plan de desarrollo e investigación.
Por otra parte, otros aspectos del compromiso refuerzan los derechos de propiedad intelectual (IPR), con la ampliación de la protección de datos de 3 a 6 años, e intentan evitar la experimentación con animales que no sea necesaria. "Los eurodiputados han convertido el desarrollo de métodos de experimentación sin animales en una prioridad, pero el precio que REACH deberá pagar, al menos a corto plazo, será un aumento de la experimentación con animales", comenta el eurodiputado Chris Davies, que estuvo al frente de la negociación en nombre de la Alianza de los Demócratas y Liberales por Europa (Alde).
De igual modo, REACH propone que los fabricantes e importadores de sustancias químicas elaboren pruebas sobre la salud y seguridad para unas 30.000 sustancias de las 100.000 que haya actualmente en el mercado de la UE. El proceso de cribado se extenderá durante un periodo de 11 años, y podría comenzar con las sustancias químicas más tóxicas y las que se comercializan en cantidades más elevadas. El acuerdo de compromiso ha tenido una buena acogida en el seno de la Comisión Europea, desde donde se afirma que es una "mejora significativa en relación con la posición común anterior".
Sin embargo, varias organizaciones no gubernamemtales se han mostrado menos entusiastas con la situación. Y es que un consorcio de grupos sobre medio ambiente, la mujer, la salud y los consumidores ha afirmado que el acuerdo no supondrá una mejora real respecto a la legislación actual.