Entra en vigor el Convenio sobre comercio de plaguicidas y químicos peligrosos
5 de abril de 2004
El Convenio de Rotterdam sobre Procedimiento de Consentimiento Fundamentado Previo (CFP), relativo al comercio de plaguicidas y productos químicos peligrosos para la salud y el medio ambiente ha entrado ya en vigor, por lo que de ahora en adelante será legalmente vinculante para los países firmantes.
Este Convenio promueve la agricultura sostenible en un medio ambiente más seguro, contribuyendo de ese modo al aumento de la producción agrícola y la lucha contra el hambre, las enfermedades y la pobreza. Más concretamente, permite a los países importadores decidir cuáles son los productos potencialmente peligrosos que quieren recibir y excluir aquéllos que no puedan gestionar en condiciones de seguridad.
El convenio cubre los siguientes 22 plaguicidas peligrosos: 2,4,5-T, aldrín, captafol, clordano, clordimerform, clorobencilato, DDT, 1,2-dibromoetano (EDB), dieldrín dinoseb, fluoroacetamida, HCH, heptacloro, hexaclorobenceno, lindano, compuestos de mercurio, pentaclorofenol, además de algunas fórmulas de metamidofos, metilo-paratión, monocrotophos, paratión y fosfamidón. En septiembre de 1998 se incluyeron en el procedimiento transitorio del ICP seis plaguicidas adicionales: binopacril, toxafeno, óxido de etileno, cloruro de etileno, monocrotofos y DNDC, una fórmula de plaguicida altamente tóxico a base de benomyl, carbofuran y thiram.
Se incluyeron, además, cinco sustancias químicas de origen industrial: crocidolite, bifenilos polibromatados (PBB), bifenilos policlorinados, (PCB), terfenilos policlorinados (PCT) y trisfosfato (2,3 dibromopropilo). Desde septiembre de 1998 también forman parte del procedimiento transitorio del ICP cuatro sustancias químicas de origen industrial adicionales: cuatro tipos de amianto como la amosita, antofilita, actinolita y tremolita.