Imprescindibles en los actuales hábitos de vida del mundo occidental
El valor de los plásticos
La industria de los plásticos en Europa -incluyendo a los transformadores y los fabricantes de maquinaria- da empleo a un millón y medio de personas y su facturación alcanza, aproximadamente, los 160.000 millones de euros anuales. Ante estas cifras y la evidencia de los plásticos en nuestras vidas, qué menos que dedicarles unas páginas a estos materiales, sin los cuales los actuales modos de vida no serían posibles. En su origen, cómo no, la química.
¿Ha mirado a su alrededor? Electrodomésticos, equipos médicos, envases y embalajes, automóviles, medios de transporte, construcción, gestión del agua, telecomunicaciones, deportes, ocio, agricultura, seguridad y protección, etc. El plástico es omnipresente.
Los plásticos son elementos esenciales de nuestro entorno cotidiano. Sus características favorecen su presencia en nuestro día a día.
Ligereza
Son materiales ligeros, pero de gran resistencia. Sin los envases y embalajes de plástico, el peso de los embalajes se multiplicaría por cuatro, los costes de producción y el consumo de energía serían el doble, y el volumen de residuos se incrementaría un 150 por ciento.
Ayudan a reducir el consumo de carburante en el transporte al disminuir el peso de los vehículos: con 100 kg de componentes plásticos en los coches, se consigue un ahorro anual de combustible equivalente a 12 millones de toneladas.
Los plásticos reforzados ayudan al Airbus A380 a reducir su consumo energético y mejorando sus costes.
Seguros e higiénicos
Los materiales plásticos hacen nuestra vida más segura: "airbags", cinturones de seguridad, sillas para bebés, cascos para bicicletas, instrumental médico..., son sólo unos cuantos ejemplos. Gracias a los materiales plásticos, la seguridad y la protección de las personas es más sencilla y eficaz.
Contribuyen de manera muy valiosa a mejorar la sanidad y la higiene. Por ejemplo, pueden proporcionar y distribuir agua potable de manera económica, fiable y segura. Los envases de plástico actúan como barrera contra los microorganismos, impidiendo la contaminación de los alimentos.
Además, mantienen las condiciones de esterilidad, y se utilizan para garantizar la ausencia de riesgos de contaminación, como por ejemplo, en jeringuillas y guantes quirúrgicos desechables.
Por su condición de materiales irrompibles, los materiales plásticos se utilizan para garantizar la seguridad, por ejemplo, en envases y embalajes.
Resistentes y duraderos
Los plásticos permiten aplicaciones duraderas y eficaces. Son materiales resistentes a la intemperie que permiten reducir al mínimo los gastos de mantenimiento y son ideales cuando el ciclo de utilización es muy largo. Así, en la construcción se utilizan cables, ventanas, espumas aislantes y tuberías de plástico que pueden durar más de 50 años en condiciones óptimas.
Asimismo, como los plásticos absorben los esfuerzos de impactos y sacudidas, son perfectos para fabricar elementos ligeros tanto en el exterior como en el interior de los medios de transporte: automóviles, trenes, aviones, etc.
Los envases de plástico actúan como barrera contra los microorganismos, impidiendo la contaminación de los alimentos
También son resistentes a cambios de temperatura ambientales.
Y presentan muchas otras ventajas. Son buenos aislantes (en el aislamiento de edificios, se consigue un ahorro energético equivalente a 150 litros anuales de combustible para calefacción, por cada 50 kg de materiales plásticos), son flexibles y adaptables, reutilizables, versátiles e innovadores. Los ejemplos son muy numerosos, pero gracias a ellos los alimentos frescos envasados duran mucho más tiempo y se han producido avances espectaculares en microcirugía.