La seguridad contra el fuego, una prioridad para la industria de plásticos
La Asociación Europea de Distribuidores de Plásticos (EPDA) insiste en que la industria está invirtiendo en el desarrollo de materiales que reduzcan aún más el riesgo de inflamabilidad de los productos plásticos para ayudar a salvar vidas y proteger bienes. Dado que los plásticos reemplazan cada vez más a otros materiales en la construcción, los proveedores europeos se esfuerzan para que sus productos sean lo más resistentes posible al fuego, principalmente en aplicaciones donde la propagación de llama debe limitarse, como conductos de ventilación y revestimientos edificios públicos.
Los plásticos ignífugos también se han desarrollado para satisfacer las demandas de sectores como el transporte (por ejemplo, cabinas de locomotoras, vagones, tranvías, sistemas de metro) y el de semiconductores, que necesitan materiales difíciles de encender que producen muy poco humo. Se están desarrollando paneles, varillas, tuberías y accesorios de baja inflamabilidad en una variedad de materiales como el PVC, poliolefina, policarbonato y PMMA, que son adecuados para aplicaciones donde el comportamiento de combustión puede ser la diferencia para sobrevivir a un incendio.
Plástico, también para combatir incendios
Simona (www.simona.de/en), un fabricante de productos termoplásticos con plantas de producción en todo el mundo y miembro de EPDA, es el primer fabricante de plásticos en el mundo en fabricar tubos y accesorios de poliolefina aprobados por FM en tamaños de hasta 630 mm de diámetro para sistemas de tuberías de agua subterránea diseñados para combatir incendios en edificios.
La aprobación de FM es una de las regulaciones más exigentes que deben cumplir los plásticos que declaran baja inflamabilidad; otros criterios incluyen las normas DIN 4102, DIN EN 13501-1, UL94, NFP 92-501 y BS 476. El cumplimiento de estos estándares está respaldado por pruebas rigurosas en instituciones independientes, que luego están sujetas a constantes inspecciones de terceros y nuevas pruebas como se define en los estándares de fuego.
El presidente de EPDA, Lari Hahtonen, afirman que el desarrollo continuo de plásticos retardantes de llama y aditivos que pueden evitar que los incendios se inicien e inhibir o retrasar la propagación del fuego, hace que el material sea más atractivo para entornos que requieren altos niveles de resistencia al fuego. “A diferencia de los materiales inflamables como la madera, por ejemplo, los plásticos ignífugos son más difíciles de encender y autoextinguirse, por lo tanto, reducen la propagación de la llama. Sin embargo, la industria continuará investigando materiales resistentes al fuego y aditivos que ayudarán a mejorar los estándares de seguridad”.