De la fábrica al centro de decisión
responsable del segmento de automoción de Rockwell Automation (Milwaukee, Wisconsin)15/10/2008
15 de octubre de 2008
Los organismos reguladores regionales e internacionales complican aún más el proceso de fabricación. Así, las estipulaciones del Departamento de Transporte de los Estados Unidos y la Comisión Económica para Europa exigen registrar la localización, el seguimiento y la procedencia de las piezas y los productos químicos. Al combinar un sistema de programación de capacidad finita con un sistema de ejecución de fabricación (Mes), todos los niveles de fabricación, ingeniería y gestión de la producción se vuelven localizables a lo largo de todo el proceso.
Por fortuna, la mayoría de los fabricantes de neumáticos pueden integrar actualmente sus sistemas de control e información. A medida que los fabricantes de neumáticos vayan reconociendo el tremendo valor que la información de planta reviste para el resto de la empresa, seguirán tomando datos de la fábrica, convirtiéndolos en información utilizable y, por lo tanto, creando una planta, una actividad y una cadena de suministro coordinadas y sincronizadas.
Donde la goma toca el asfalto
Una de las funciones de un sistema Mes avanzado es garantizar que el proceso de fabricación cumple las especificaciones y requisitos y que se utilizan las recetas adecuadas en la fabricación de los lotes. Además, el sistema Mes garantiza la transmisión en tiempo real de la información sobre calidad a todos los niveles de la empresa, desde el laboratorio hasta la planta y la oficina de ingeniería de la empresa. El acceso a esta información permite a la empresa reaccionar y corregir problemas inmediatamente.
Superar retos, superar expectativas
El sistema de programación reconoce los límites de la capacidad real de la fábrica, como los patrones de turnos laborales, los centros de trabajo, la mano de obra y las herramientas. Algunos sistemas también reconocen las limitaciones materiales, como los inventarios disponibles y las entregas previstas de material.
Integrando el sistema de programación con el sistema de planificación de recursos (Erp) y el Mes, el proceso de fabricación obtiene un valor añadido extra. El programador utiliza los datos del Erp y el Mes para crear el plan óptimo para las instalaciones. Las sinergias que se derivan del trabajo conjunto de estos sistemas pueden ayudar a los fabricantes de neumáticos a alcanzar sus objetivos de producción dentro de las limitaciones de costes y crear una ‘pizarra electrónica’ en la que se definirán las rutas, los recursos necesarios y la productividad máxima.
Programación y Mes: un dúo dinámico
El sistema de programación procesa órdenes emitidas desde un Erp y determina el tiempo y el lugar de procesamiento. Así, se programan de forma eficaz la fabricación de los lotes basándose en las reglas de negocio. Las reglas se establecen en función de indicadores clave de gestión (KPI) y se utilizan para generar una programación de producción. Después, utilizando funciones Mes como soporte principal, se realiza un seguimiento de la producción real comparándola con el sistema de programación. Simultáneamente, se mide el rendimiento de los KPI y, si es necesario, se ajusta la programación de producción sobre la marcha para garantizar la consecución de los objetivos definidos.
Además, el Mes captura información real sobre el rendimiento y la remite al sistema de programación. Estos datos permiten al sistema de programación ajustar automáticamente las duraciones y los lotes y las asignaciones de recursos. Si la maquinaria se detiene, el sistema de programación puede redirigir los trabajos a otros equipos disponibles.
¿Por qué no basta con el Erp?
Un sistema de programación de capacidad finita no sustituye a un Erp, sino que debería enfocarse como una aplicación complementaria que se utiliza para recabar información clave de la planta, lo que añade valor a la plataforma empresarial. La necesidad de integración funciona en ambas direcciones. Las plataformas empresariales pueden beneficiarse enormemente del hecho de contar con información precisa y puntual de la fábrica.
Las soluciones Erp son sistemas basados en transacciones que definen ‘qué es necesario’, ‘qué hay disponible’ y ‘qué se requiere’. En el plano de la fabricación, el Erp genera órdenes de producción basadas en los requisitos de clientes y las previsiones, así como la compra de las materias primas que sustentan la producción.
Paso a paso
Dado que la mayor parte de los datos necesarios se recogen manualmente, el siguiente paso de la integración puede parecer una tarea descomunal. Sin embargo, existen metodologías que facilitan el camino. La información procedente de estas grandes áreas y sistemas de fabricación se puede identificar y se pueden desarrollar interfaces entre ellos.
La fabricación de neumáticos es un proceso complejo. La integración del control y la información con una programación de capacidad finita permite a los fabricantes optimizar sus operaciones. Se pueden conseguir notables ahorros de costes, como una mayor productividad en la fabricación, así como ventajas derivadas de una mayor visibilidad, un mejor seguimiento y un control más estrecho de las operaciones.
Incuity Software (una empresa no cotizada) es un proveedor de software de inteligencia de fabricación empresarial. Con sede en Mission Viejo (California), es una empresa financiada por American River Ventures y Palomar Ventures.
Rockwell Automation (NYSE: ROK) es uno de los principales proveedores mundiales de soluciones de potencia, control e información para automatización industrial. La compañía reúne marcas mundiales en el campo de la automatización industrial, como los controles y servicios Allen-Bradley y el programa de gestión de fábricas Rockwell Software. La firma tiene su sede en Milwaukee (Wisconsin, Estados Unidos) y cuenta con 20.000 empleados que atienden las necesidades de los clientes en 80 países.