La subida en el precio de los materiales de construcción requiere de soluciones asequibles y sostenibles
Los últimos datos del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana apuntan a que el material de construcción más usado, el hormigón, ha experimentado un incremento interanual del 30%, con respecto a 2020, cifras que afectan directamente al incremento del precio de la vivienda.
Por ello, desde Penetron, compañía estadounidense referente en tecnología cristalina del hormigón, ha analizado la situación del mercado actual de la construcción y las nuevas tendencias en materia de sostenibilidad y ahorro de costes de este material.
Según explica Gabriela Korsakas, Country Manager de Penetron España: “Si bien es cierto que el mercado de la construcción actual es resistente al cambio, el contexto histórico presente, marcado por la crisis sanitaria producida por la COVID-19, la subida del precio de los materiales, el cambio climático, la sostenibilidad o el uso responsable de los recursos, hacen posible que la industria en España se muestre proactiva a invertir en nuevas tecnologías que sean partícipes del cambio.”
La compañía desembarcó en España a principios de 2021, con el objetivo de ofrecer una solución sostenible y duradera. La tecnología cristalina de Penetron reduce, significativamente, los costes, ya que acelera la velocidad de construcción y, posteriormente, los gastos de mantenimiento, gracias a su tecnología que aporta capacidad de ‘auto-curado’ al hormigón. Para Korsakas, “el papel de la innovación y las nuevas tecnologías será fundamental para afrontar este escenario y tratar de que los precios de los materiales no afecten a la viabilidad y rentabilidad de los proyectos y compañías del sector.”
Las soluciones cristalinas de Penetron son utilizadas para proteger las estructuras de hormigón expuestas al agua o a posibles ataques químicos, que requieren de una permeabilidad reducida y permanente. “Se trata de que la estructura sea como un cuerpo humano que regenera sus heridas. Existen muy pocas tecnologías de ‘auto-curado’ disponibles en el mercado actual del hormigón. Un nicho que requiere de nuevas soluciones que tengan un menor impacto ambiental”, afirma Korsakas.
Tal y como apunta, “gracias a esta capacidad, las estructuras aumentan significativamente su vida útil, requieren de menos mantenimiento y se sustituyen los productos asfálticos, que tanto contaminan, por productos minerales que tienen un menor impacto ambiental y no contaminan una vez se convierten en desechos”, concluye Gabriela Korsakas.