Komet: el latido de la economía alemana
10 de septiembre de 2010
La posición de Komet como una de las empresas tecnológicamente más destacadas en su campo no es un hecho fortuito: los 800 empleados activos en Alemanía trabajan en un clima creativo que es productivo por si solo en su propia ‘fábrica de ideas’, por ejemplo. Al edificio se le ha denominado ‘Ideen-Fabrik +’ e ilustra el cambio de la empresa de un fabricante de herramientas a un experto en soluciones creativas en taladrado, escariado y roscado.
El moderno edificio consta de diversas alturas y un total de 2.500 metros cuadrados, los cuales están expresamente ubicados encima de una de las plantas de producción, como parte integral del entorno normal de trabajo. A través de esta conexión espacial, bajo la dirección de Matthias Heinz, y Christof W. Bönsch, quiere expresar la conexión entre el trabajo con nuevas ideas y la ambición creativa: la planta baja, con virutas de metal en el ambiente, y la planta superior, para los clientes y miembros del personal técnico, donde se utiliza un ámbito creativo para el intercambio de ideas, recibir formación adicional y trabajar conjuntamente en la innovación.
Durante varios meses, la Universidad de Economía de Viena ha estado examinando las condiciones de innovación de un total de 248 empresas de mediana envergadura en Alemania. Las primeras 100, entre ellas Komet, llevan el sello de calidad por un año. “Las buenas ideas bien recibidas por el mercado no nacen de forma automática; nacen del duro trabajo diario. Ahora este compromiso tiene su recompensa, y nos muestra que estamos en el camino correcto. En cierto modo, esto también demuestra que no nos quedaremos sin buenas ideas en el futuro”, afirma Matthias Heinz.
En total, 32.500 empleados trabajan en las empresas más innovadoras en toda Alemania. Ellos resuelven problemas y no tienen miedo de las innovaciones. Crean para sus empleados las condiciones óptimas para fomentar la creatividad, a través de una gestión de constante innovación y poder sacar así lo mejor de su personal.
Esto también crea un empuje esencial para la economía alemana: En 2009, alcanzaron una facturación total de 11,1 billones de euros: 42 de esas 100 empresas de tipo medio que llevaban el sello de calidad nacional en el 2010 son número uno de su sector, 10 de ellas son líderes del mercado mundial.
En este sentido, la tradición y una fuerte voluntad de cambio no se oponen, y esto se demuestra por las 60 empresas familiares que están entre los ‘Top 100’ de este año. 86 de las 100 empresas han crecido más rápidamente que la media del sector durante los últimos tres años.
