OSG-Comaher encuentra la diferencia con sus herramientas especiales

Comaher se fundó en 1973 como servicio de afilado y reacondicionado de herramientas de corte en las empresas que en su entorno comenzaban a demandarlo. La actividad comercial surgió posteriormente. Desde hace casi dos años, la empresa pertenece al grupo japonés OSG, el cuarto fabricante mundial de herramienta de corte.

La actividad está centrada en diversos sectores: la automoción es fundamental, pero también importan el decoletaje y valvulería, el aeroespacial, el eólico y el médico, un sector este último con una importancia creciente y con empresas relevantes en la cercanía de la fábrica. El trinomio OSG-Comaher-Dieterle da mucho juego en el sector del implante.

Los diversos materiales empleados en ese abanico de sectores han obligado a Comaher a investigar y prepararse para intentar dar solución a los distintos problemas de mecanizado que a diario le presentan.

OSG-Comaher cuenta con un Departamento de Ingeniería que asesora al cliente. “Conociendo la pieza, la máquina y el utillaje, estudiamos el proceso de mecanizado, sus tiempos, herramientas y amarres, ofrecemos al cliente la solución completa”, señalan sus responsables.

En otras ocasiones se trabaja en colaboración con importadores o fabricantes de maquinaria cuando han pactado un proyecto llave en mano con su cliente.

En este sentido, Javier Corres, director de producción piensa que “esto es precisamente lo que nos diferencia en el mercado. Herramentistas hay muchos, pero muy pocos ofrecen soluciones de ingeniería al cliente.”

Comaher viene realizando estudios de mecanizado desde hace más de 20 años. Desde entonces hemos hecho equipamientos muy importantes para máquinas individuales, transfer o células de trabajo compuestas por varias maquinas.

Pero la labor no termina con la entrega del equipamiento. También es importante el seguimiento de comprobación de la rentabilidad de las mejoras aportadas. “Este valor añadido es la diferencia”.

Como fabricante de herramientas especiales, OSG-Comaher cuenta con un taller donde la especialización y la flexibilidad productiva mandan.

La marca Comaher engloba cuatro productos: herramienta perfilada, herramienta integral de metal duro, herramienta soldada rotativa y recuperación de herramientas.

Dispone para fabricarlos de 3 perfiladoras CNC, 5 afiladoras CNC y un centro de medición sin contacto.

Un paseo por la producción enseña la vocación de calidad. Se ve maquinaria de última generación y destacan los medios de control, tanto de proceso como de calidad de la herramienta especial, como el sistema de visión o el de reglaje de herramientas.

OSG, Dieterle, Wohlhaupter, Simtek, Tapmatic y Tungaloy son marcas con las que OSG-Comaher mantiene una relación intensa y diaria.

También Schunk es importante. Los portaherramientas hidráulicos Tendo son empleados tanto en producción como en la parte comercial.

En la parte comercial este producto aparte de las ventajas técnicas que ofrecen los hidráulicos (amarre seguro, excelente concentricidad y rapidez de cambio), con los portas Schunk las piezas móviles como los elementos que efectúan la regulación axial ofrecen una seguridad de manejo que marca diferencia con otros fabricantes.

En la producción los portaherramientas Schunk juegan un papel decisivo porque la concentricidad es muy importante en la herramienta y para ello el amarre es esencial.

“Schunk nos ha facilitado las cosas – afirman en OSG-Comaher–. Quitar y poner herramientas con repetición en el posicionamiento es fundamental y el sistema de amarre hidráulico de Schunk nos lo pone muy fácil. El que utilizamos destaca por la estrechez del morro del portapinzas.

Es decir, hay dos factores importantes: el primero, que el amarre sea hidráulico y el salto de la herramienta sea mínimo; el segundo, que el diámetro de amarre de la herramienta sea el menor posible. De esta forma al atacar con la muela el portaherramientas queda liberado. Un portapinzas grueso en la punta obligaría a una herramienta más larga”.