Unesid advierte que la reforma eléctrica hundirá la industria española del acero
23 de julio de 2013
El primer efecto, tras la aprobación de la reforma eléctrica por el gobierno, no se ha hecho esperar; mientras que el mercado de futuros de la electricidad en Francia y Alemania está a la baja, el diferencial de España con ambos países ha aumentado ya a 11/MWh. Unesid, asociación de la siderurgia española, considera que los efectos de la reforma eléctrica van a ser devastadores para la competitividad de la industria siderúrgica española, que se ve obligada a exportar un 70% de su producción y a competir con unos precios mucho más altos que en otros países europeos.
La electricidad es el segundo insumo de la industria española, sólo por detrás de las materias primas. El propio gobierno reconoce que el precio de la electricidad para la industria es el más caro de Europa, y no parece que las nuevas medidas vayan a revertir esa tendencia.
La siderurgia española, en particular la de horno eléctrico, viene realizando un esfuerzo de modulación e interrumpibilidad para ayudar a la gestión del sistema eléctrico. Estos esfuerzos, que han conllevado importantes inversiones así como esfuerzos organizativos, recibían una compensación por la garantía que esta industria, junto con otras electro-intensivas, aporta al sistema. La nueva propuesta que el Ministerio de Industria ha remitido a la Comisión Nacional de la Energía supone, en la práctica, un recorte drástico en dicha compensación y generará un mayor diferencial en el precio que esta industria paga por la electricidad.
Unesid considera que la propuesta hace inviable el mantenimiento del esquema que tan buenos resultados ha producido al sistema eléctrico español. Además, la industria siderúrgica española destaca en reciclaje, tiene unas tasas de empleo fijo mucho más elevadas que cualquier otro sector económico, mantiene unos altos niveles de inversión a pesar de la importante crisis que padece y está a la cabeza del desarrollo tecnológico. Unesid no pide subvenciones sino precios de la energía competitivos en relación con otros países europeos.