Los pedidos de máquina herramienta en Italia disminuyen el cuarto trimestre de 2003
Particularmente negativo ha sido el resultado de los pedidos internos, que han bajado un 27,5 respecto al cuarto trimestre de 2003, al precisar un valor de 75 (el menor índice de valor registrado a final de año desde 1998). En cuanto al número de pedidos extranjeros se refiere, el índice registrado ha disminuido solamente un 4.3%.
El índice referente al conjunto de pedidos registrados en 2003 , un descenso del 11,9 por ciento (para un valor medio del índice de 63,4). Fue el descenso del 23,1 por ciento en pedidos internos el que definitivamente marcó el resultado final con respecto al de 2002. En contraste, los pedidos recogidos en el mercado extranjero se han sido prácticamente inapreciables frente al año anterior, registrando pérdidas de tan sólo el 0,2 por ciento.
La coyuntura del sector se confirma negativa: el índice de los pedidos ha mantenido una línea descendente durante los últimos tres años, perdiendo el 36,6 por ciento respecto a 2002. Este dato siempre se ha reflejado la situación de la economía internacional, que aún no ha apreciado los signos de recuperación de los mercados más grandes.
Los diferentes resultados entre los pedidos domésticos y ventas extranjeras, revelan que ante una demanda interna particularmente débil, los fabricantes italianos han sabido mantener una línea competitiva de su mercado internacional.
Analizando en profundidad situación de los mercado extranjeros, siguiendo el dato del comercio exterior relativo a los nueve primeros meses del año revelan una diferencia sustancial entre los mercados de la zona euro, donde las ventas han disminuido del 20 al 30 por ciento, y los mercados no europeos (EE.UU., China, Rusia y Canadá) donde las exportaciones crecen a ritmo sostenible.
“Estos datos -afirma Andrea Riello, presidente de Ucimu- Sistemi per Produrre- es más significativo si se considera que estos países deben apreciar los efectos de la revaluación del euro. El aumento de la exportaciones a EE.UU., China, Rusia y Canadá demuestra, que la industria italiana ha sabido mantener un alto grado de competitividad, pero ha perdido demanda en los países que forman la Unión monetaria Europea.”
“Un indicativo del grado de competitividad- continua Riello- es el hecho que los fabricantes italianos están incrementado la propia cuota de mercado interno: las importaciones han caído más rápido que las ventas de maquinaria made in Italy”.
“En vista de estos datos, para contribuir al impulso del sector- afirma Riello- solicitamos a la autoridad gubernativa su actuación mediante la aplicación de un instrumento de política industrial tal como la liberalizacion de la desgravación de la amortización de las inversiones, que serían vitales para estimular una recuperación”.
“Frente a una crisis que ha afectado a todos los países de la Unión monetaria Europea- continua Riello- el Banco Central Europeo necesita desarrollar una política monetaria, basada en el plan implementado por la Federal Reserve”.
