El corte por plasma y el láser de Haco despuntan en España
Con tan solo un año y medio de actividad - su presentación oficial fue en la edición de BIEHM de 2006- Haco España puede presumir de haber instalado más de un centenar de máquinas en España. Especialmente importante para Haco España es ofrecer un atento servicio técnico que sin duda ha sido importante para sentar las bases de una gran proyección de crecimiento. “Estamos muy contentos. En un año y medio de actividad hemos desarrollado proyectos importantes” afirma Jaime Sirera, Director Técnico.
Una marca de peso en todo el mundo
A pesar de que el sector se encuentran aún en una fase dubitativa, la delegación española de Haco guarda un as en la manga: un sello de gran calidad. Y es que es precisamente esta cualidad es la que favorece la buena marcha de la empresa. “Nos respalda una gran marca”, señala Jaime Sirera. “Nos hemos encontrado casos de clientes que tenían una máquina nuestra desde hace más de dieciocho años trabajando a pleno rendimiento. Tras el buen resultado, a la hora de comprar nueva maquinaria no dudan en adquirir otra de la marca Haco”.
Servicio postventa de primer nivel
Otra de las ventajas de Haco radica en que la empresa solicita el material a Bélgica, lo que permite recibirlo en casa del cliente en tan sólo 24 horas. “Esto nos da una garantía de resolución de problemas de forma casi inmediata. Algo que empresas ubicadas en países fuera de Europa no puede ofrecer. Tenemos nuestras bazas y las tenemos que jugar bien”, añade Juan Carlos Mingueza, Director Comercial.
La delegación otorga especial importancia a su servicio postventa por dos motivos. “Primero, porque la calidad Haco es suficiente para dar respuestas y segundo, porque tanto la marca como el cliente merecen un trato excepcional”, asegura Juan Carlos Mingueza, en referencia a la filosofía de la empresa. “Si existe un problema existe una solución. Esto hace que la confianza de nuestro producto y en nuestros clientes sea absoluta”.
“Somos una delegación, no somos distribuidores”
“Por un lado es una ventaja, ya que nuestra imagen de marca evita tener que partir de cero y por otro, es un reto ya que el cliente nos exige mucho más. La primera llamada de teléfono que recibimos fue la de un cliente que nos decía `tengo una máquina desde el año 84 y necesito que me envíen un recambió. Hemos entrado al doscientos por ciento en cuanto a exigencia. Pero somos jóvenes y tenemos ganas de trabajar”, asegura.
También tecnología puntera
Tras varias décadas de trabajo, el sector conoce bien su maquinaria, sin embargo, ambos coinciden en que una parte de sus máquinas son poco conocidas. “Nuestra cartera de producto no sólo está formada por plegadoras, cizallas y maquinaria auxiliar. Existen también máquinas de corte por láser desarrolladas por Haco, así como punzonadoras de control numérico y máquinas de corte por plasma. Es un área que debemos potenciar. Creemos que no está lo suficientemente explotada en el mercado y puede dar mucho más de sí”, asegura el Director Técnico.
En cuanto a las máquinas de corte por plasma, la compañía ofrece un producto de calidad comparable a otras grandes marcas del mercado. “Antes existía el plasma oxicorte que no se caracterizab por una alta calidad de corte, motivo por el cual el cliente adquiría una máquina de corte por láser que tiene un elevado coste económico. En cambio, se debe valorar que el corte por plasma ha mejorado mucho en lo que a calidad de corte se refiere y supone una inversión mucho menor”, señala Jaime Sirera. “El plasma de alta definición ha mantenido una buena evolución en cuanto a la calidad de acabados lo que la hace un producto extraordinario”, concluye Sirera.
Dispone de selección del ángulo de corte con lector de posición. También tiene contador de cortes golpes con reset y brazo de escuadreo de 1.000 mm con regla, con guía lateral en T para ajuste del tope delantero.