La competitividad de la industria europea de maquinaria no debe convertirse en una víctima colateral del ‘marcaje de origen’

La industria europea de maquinaria advierte que su competitividad podría sufrir un serio revés debido al continuo fracaso de la Unión Europea en su afán de introducir un sistema de vigilancia mejorado –un sistema considerado esencial en la lucha de la competencia desleal en el Mercado Interno causado por la entrada y la circulación de productos que no cumplen la normativa básica. En la discordia continua de los Estados Miembros también aparece otro tema –el marcaje del origen-, que ha paralizado cualquier progreso en el borrador de la Reglamento relativo a la vigilancia del mercado de productos (MSR), por lo que la posibilidad de que la propuesta se adopte en la actual legislatura (antes de abril) se reduce a cero.

Representando a la asociación europea de maquinaria (Cece, Cecimo, Cema, Euromap y Fem), Filip Geerts ha declarado: “Nuestras industrias son víctimas colaterales del punto muerto en el que se encuentra la política aplicada por el Consejo, un tema que en realidad no está relacionado con la vigilancia del mercado. Mientras tanto, los productos que no cumplen las normas del Mercado Interno continúan dañando la competitividad del mercado. Esto no solo frena el crecimiento potencial de las industrias sino que también daña la seguridad del usuario, el medio ambiente y los progresos para alcanzar los objetivos energéticos y climáticos de la UE. Sin duda, se trata de una situación inaceptable sobre todo porque se ha producido pocos días después del Comunicado de la Comisión Europea sobre el Renacimiento de la Industria, que pretendía poner la competitividad como prioridad absoluta”

Restablecer el nivel de igualdad de condiciones en el Mercado Interno a través de un sistema de vigilancia mejorado permitirá pasar de una competitividad basada en el precio a una competitividad de calidad, confianza y eficiencia de recursos, lo que es un requisito fundamental para el éxito de las industrias de valor añadido europeo en medio de todas las presiones de competencia mundial.