Anfapa colabora con el Proyecto La Fábrica de Esperanza
En 2019 Anfapa ha colaborado con una actividad que pone énfasis en el apoyo del sector de la construcción a la sociedad, que va en la línea de aportar valor, y a la vez enlaza con su voluntad por participar, desarrollar y fomentar la economía circular, aunque en este caso, tristemente, no es por vocación sino por las consecuencias de la guerra.
Es un proyecto que propone la colaboración en la reconstrucción de Alepo en Siria, devastada por una guerra que ha durado 8 años. Liderado por la ONG española Rescate, el proyecto se llama La Fábrica de Esperanza.
Actualmente la ciudad es, en gran parte, una enorme acumulación de cascotes de los edificios derruidos por los bombardeos; el proyecto ya iniciado consiste en aplicar los conceptos de economía circular a esta devastación, y triturando los cascotes fabricar nuevos ladrillos para que sus habitantes puedan ir reconstruyendo sus casas.
Que el objeto simbólico a la venta en esta campaña sea un ladrillo trasciende del mero hecho de ser un material fundamental para la construcción.
Y como explicó Jorge Martínez, el director creativo del proyecto, “el sector de la construcción en España es extremadamente grande pero no goza de la reputación que merece por la pasada crisis económica que muchos llegaron a calificar incluso como ‘crisis del ladrillo’. Ahora, con este proyecto, ese ladrillo que ha tenido una connotación negativa se convierte en un elemento simbólico y útil con el que poder ayudar a miles de personas”.
En esta declaración, esta iniciativa enlaza con la recuperación del prestigio de nuestro sector, con el que Anfapa está implicada desde hace años.
Este ladrillo solidario, que es el más caro del mundo, 500€ la unidad, es a la vez el más valioso como símbolo de este proyecto; a través de la colaboración de 2.000 empresas y/o entidades se trata de conseguir una aportación de 1 millón de euros.
Desde su puesta en marcha, 136 mujeres y hombres han fabricado 31.000 ladrillos con más de 10.000 toneladas de escombros, beneficiando a unos 15.000 ciudadanos.