Catalunya Plants, más de 15.000 metros cuadrados de cultivos y complementos para jardinería
16 de febrero de 2011
Al frente del negocio se encuentra desde hace tres años, Gerard Siñol, que a pesar de su juventud ha tenido que adaptar el negocio familiar a marchas forzadas a los cambios que impone el mercado. “Aquí se comenzaron a vender plantas para la agricultura y fruteros en 1986, y el paso de vivero de planta ornamental a centro de jardinería lo dimos en 1992, evolucionando desde entonces de una pequeña nave hasta los 4.500 metros cuadrados cubiertos y 15.000 metros de cultivos y complementos para jardinería, de los que disponemos actualmente”. Estos números avalan actualmente a Catalunya Plants como uno de los centros de jardinería con más superficie destinada a plantas, con un total de 200.000 plantas, árboles y arbustos.
Al igual que la mayoría de centros de jardinería de nuestro país, las plantas ya no suponen el grueso del negocio. En Catalunya Plants han ido ganando terreno las secciones de bricojardinería, decoración y mascotas, suponiendo todas ellas una parte importante de la facturación total. “Si hemos apostado por tener animales y complementos para mascotas en la tienda es porque existía la demanda, en una tendencia que ya venía imponiéndose en el resto de Europa. Muchos de los clientes que tienen jardín cuentan con una mascota y era lógico ofrecerles aquí, en un espacio mucho más amplio, todo aquello que necesitan para su cuidado. Además aquí tienen aparcamiento, carros para transportar los productos hasta el coche, etc., algo mucho más complicado si ha de ir a una tienda de barrio”, añade Gerard Siñol. Realizando un paseo por las instalaciones de Catalunya Plants podemos encontrar multitud de animales, desde los que están para el simple recreo y disfrute de grandes y pequeños, hasta los expuestos para su venta: peces, anfibios, hámsters o incluso reptiles.
La crisis también afecta a los centros de jardinería
Aunque muchos crean que la crisis no afectó a los gardens, desde uno de los centros más importantes de nuestro país se constata todo lo contrario. Es más, para ellos la crisis comenzó antes, a causa de los problemas de sequía que vivió nuestro país hace tres años, y que perjudicó a los gardens en su campaña de marzo a junio de aquel ejercicio. “Desde entonces la crisis nos ha obligado a reestructurar, a ajustar gastos y a disminuir el número de proveedores”, añade Gerard Siñol. También el cliente que acude hoy al garden, aunque se ha mantenido en número, se gasta menos dinero en el mismo producto optando por una línea más barata, según asegura el mismo empresario.