Viveros Verón presenta pequeños frutales para terrazas
28 de septiembre de 2010
A la hora de determinar cómo iba a realizarse esta producción se tuvieron en cuenta seis propiedades del producto:
- Estética: Los frutales van destinados a la venta en superficies comerciales (centros de jardinería, bricolaje y grandes superficies comerciales entre otros), es por ello que tiene que tener una presentación atractiva, tanto la planta en sí misma como la maceta y el etiquetado que lleva.
- Asequible: Los frutales han de llegar al consumidor final a un precio asequible que permita una cierta 'compra por impulso' y una 'rotación del producto'. La idea es que el consumidor utilice el producto como planta anual o bianual.
- Manejable: El contenedor es pequeño (7 litros) y la altura total de la planta de poco más de 1 metro, lo que lo hacen fácil de manejar y transportar.
- Conocido: Se buscaban que las variedades de los frutales fueran las que “todos conocemos”, una pera conferencia o una manzana golden.
- Etiquetado: Merece una mención especial el etiquetado que lleva la planta. Este árbol frutal ha de poder venderse en todas las épocas, en primavera tiene una bonita floración, en verano tiene sus hojas y sus frutos incipientes, pero se presenta el árbol de una manera que se resulte también atractivo en invierno.
- Homogeneidad del producto: Los frutales son todos iguales, es decir, el proceso productivo es artesanal, cuidando con todo detalle el desarrollo de la planta. Todos tienen el tronco recto, un grosor de tronco similar, la cabeza formada a la misma altura, la misma longitud de ramas, similar tamaño de cabeza.