Entrevista a José Maria Román, director comercial de Enplater

Enplater se fundó en el año 1962 y se dedica a la impresión de material flexible. Un 95% de la producción está dirigida al sector alimentario y en los últimos años se está especializando también en otro tipo de aplicaciones para el sector industrial. Nuestro volumen de trabajo lo medimos en metros cuadrados de manipulación, Enplater durante 2009 ha cerrado con un total de 170 millones de m2 impresos. Tocamos todos los sectores de alimentación (bebidas, pastelería, productos congelados, etc.) y además, en el sector industrial manipulamos todo tipo de estructuras en papel, aluminio, polietileno, y otro tipo de aplicaciones como pueden ser materiales para detergentes, para cosmética, laboratorios, etc. Hemos abierto un poco las posibilidades de aplicación que hasta hace unos años quizás estaban enfocadas exclusivamente a la alimentación. Hoy en día Enplater conoce todos los procesos y trata por igual a todos los sectores.

El huecograbado es una técnica de impresión que consiste en unos cilindros que tienen tres procesos. El primero sería lo que es el núcleo de hierro donde se le da una base de cobre y sobre éste se graban los cilindros con una punta de diamante que hace un pequeño hueco donde se deposita la tinta y ésta se transmite a la lámina de film para embalaje, podrían ser diferentes tipos de materiales (polipropilenos, poliéster o poliamidas, entre otros). Esta tinta que se deposita en ese pequeño hueco es la que se transmite al material y es donde la persona, a través de un proceso de preimpresión, que no deja de ser un proceso fotográfico de composición, puede ver visualmente las fotografías, los textos, los degradados, todo lo que sería un diseño. Cuando se acaba de grabar todo el cilindro se tiene que endurecer porque al cobre, al ser bastante blando, se le podría hacer un pequeño rasguño que se transmitiría al material. Antes de poner el cilindro en una impresora de huecograbado, tiene lugar una tercera fase que sería el baño de cromo. Encima del cobre grabado se da una capa de cromo para endurecer la superficie y ya está preparado para ponerlo en la línea de impresión. Cabe destacar que cada color es un cilindro grabado, cada cilindro transmite al material una tinta concreta y se van superponiendo las distintas tintas para al final obtener una imagen.

Nosotros disponemos de grabadoras electrónicas y de huecograbado que graban a 8.000 puntos por segundo sobre esta base de cobre del cilindro de la que he hablado.

Sí, permite imprimir a gran velocidad. Ahora los tiempos han cambiado y hemos tenido que adaptarnos pero durante muchos años el sector industrial requería de grandes volúmenes. Estas máquinas tienen unas velocidades importantes de impresión. En nuestro caso disponemos de máquinas hasta 500 metros por minuto que nos permiten fabricar grandes y pequeñas cantidades con la mejor calidad de impresión.

Enplater siempre ha creído que es la mejor técnica por varias razones, pero sobre todo por la calidad. Es el sistema que nos permite dar más puntos por cm2, es decir, más definición visual. Durante muchos años ha habido una gran diferencia entre lo que era el huecograbado y los demás sistemas. Hoy en día también es verdad que negarse a reconocer que otros sistemas de impresión han mejorado sería absurdo porque todos los profesionales del sector lo saben. Pero por un tema meramente técnico, el huecograbado es el que permite disponer de más calidad porque genera más puntos por cm2. Donde quizás hoy día se puede ver más diferencia es en los diseños, los cuales tienen unos fondos con degradados. Cuando hay unos cambios de tonalidad que requieren tener mucha definición, aquí es donde el huecograbado tiene una diferencia visual importante respecto a otros métodos de impresión.

Sí, sobre todo por la tinta. Las tintas por aplicación normal que dependen de otros sistemas de impresión tienen más o menos opacidad. Las tintas por huecograbado tienen una densidad óptica muy importante, son bastante más opacas que el resto de tintas para otros sistemas. Cuando tu ves una impresora en huecograbado puedes darle más opacidad, más vida y más brillo. Para poder llegar a esta calidad de opacidad y de brillo de las tintas, en muchas ocasiones para sacar la misma intensidad de color, necesitan dar dos pasadas del mismo color. Por ejemplo, nosotros podemos tener un color rojo Pantone 485 que tiene un brillo y una densidad muy importante que a nivel visual se ve mucho y en cambio en la flexografía, si quieren sacarle el mismo partido, tendrán que dar dos capas de cerrojo para tener la misma intensidad que el hueco. Esto es una diferencia sustancial en la impresión en huecograbado. Otro plus importantísimo es que la impresión en huecograbado permite imprimir a mucha mayor resolución que otros sistemas como la flexografía.

En nuestro caso son máquinas de huecograbado para grandes y pequeños volúmenes. Ahora disponemos de una máquina nueva con cambio y limpieza de cilindros automático, una revolución dentro del sector. Esto nos ha permitido poder competir con otros sistemas de impresión como la flexografía, porque el mercado está pasando de grandes tiradas a otras mucho más cortas. Esta máquina hace los cambios hasta 9 colores simultáneamente de forma completamente automática. Nosotros ya tenemos esta máquina en funcionamiento, trabajando las 24 horas, en la nueva factoría que abrimos en Huesca ahora hace un año.

La verdad es que hay mucha maquinaria que utiliza esta tecnología. España se ha caracterizado por ser un país en el cual ha habido muchas empresas dedicadas a este sistema de impresión. Lo más común que encontramos es el huecograbado y la flexografía, sobre todo en el sector de la alimentación.