52 IMPLANTACIÓN 3D Cada vez son más las empresas que confían en la impresión 3D. Esta tecnología, hasta hace poco relegada al entorno ‘maker’, quizá por culpa de un pensamiento ‘naif’ que la consideraba un invento del futuro o a la inseguridad de las compañías a la hora de invertir en ella, es ahora una opción real para los fabricantes. Como demuestra la consultora británica Context , la incorporación de la fabricación aditiva en las empresas es cada vez más incipiente. Según informa la consultora, las ventas de impresoras 3D industriales y de diseño aumentaron un 7% y un 19% respectivamente en el primer trimestre de 2022. La cifra es más llamativa si se compara el dato de venta de los equipos industriales con el de hace dos años en el mismo período, superando en este caso el 50%. Entonces, ¿se podría decir que 2022 es el año en el que se consolidará esta industria? UN CAFÉ CON MIGUEL ÁNGEL MORA, RESPONSABLE DE SERVICIOS DE INGENIERÍA 3D DE GRUPO SOLITIUM “ES POSIBLE INCORPORAR LA FABRICACIÓN ADITIVA EN UNA EMPRESA SIN NECESIDAD DE HACER UNA GRAN INVERSIÓN” Antes de pedirnos el café, Miguel Ángel Mora, responsable de Servicios de Ingeniería 3D de Grupo Solitium, insiste en dejarnos clara la diferencia entre impresión 3D y fabricación aditiva. “Aunque solemos utilizar los dos términos indistintamente, cuando hablamos de fabricación aditiva nos situamos en un entorno de producción, con altas exigencias tanto de validación como de producción, y no tanto en la experimentación o adquisición de conocimientos de la tecnología, como ocurre en el entorno ‘maker’. Las soluciones de aditiva son, por lo general, equipos profesionales con sistemas propios y cerrados que ofrecen fiabilidad y garantía de buenos resultados desde las primeras pruebas en la instalación. La oficina técnica no Miguel Ángel Mora, responsable de Servicios de Ingeniería 3D de Grupo Solitium.
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