MJ132 - Menaje de mesa y cocina

64 CONTENEDORES HERMÉTICOS ESTOS ELEMENTOS YA NO SOLAMENTE SIRVEN PARA ALMACENAR Y CONSERVAR, SINO QUE OFRECEN SOLUCIONES IMAGINATIVAS Y ATRACTIVAS PARA CALENTAR, CONGELAR, TRANSPORTAR Y CONSUMIR FUERA DEL HOGAR E INCLUSO PARA HORNEAR Y SERVIR DIRECTAMENTE EN LA MESA RECIPIENTES HERMÉTICOS: LA VERSATILIDAD SE IMPONE La versatilidad es uno de los valores que más intensamente están calando en la cocina moderna, con el ahorro de recursos y de espacio como objetivos primordiales. Un claro ejemplo de ello son los recipientes de cocina, cuyas funciones han evolucionado hasta abarcar tres campos diferentes: la conservación, la cocción y el transporte de los alimentos. Así, los nuevos herméticos pueden introducirse en la nevera, el congelador, el lavavajillas, el horno y el microondas, y pueden transportarse, para disfrutar de una comida casera en cualquier lugar, e incluso servir en la mesa. Las necesidades de conservar, congelar y transportar son muy transversales y afectan a cualquier tipo de familia. Históricamente, los recipientes herméticos han dado respuesta con multitud de formas y tamaños, garantizando en diversa medida las funciones de hermeticidad, higiene, inocuidad y ausencia de olores. Sin embargo, en los últimos tiempos, a estas funciones se les han sumado otras, que suponen un ahorro de espacio y un aprovechamiento de recursos. De hecho, si hay una gran tendencia que marque al mercado de los herméticos es la de la multifuncionalidad. Estos elementos ya no solamente sirven para almacenar y conservar, sino que ofrecen soluciones imaginativas y atractivas para calentar, congelar, transportar y consumir fuera del hogar e incluso para hornear y para servir directamente en la mesa. De hecho, los herméticos son, actualmente, uno de los productos más versátiles del sector del menaje, capaz de asumir las funciones que ya realizan otras familias de artículos. Algunos factores han expandido notablemente su uso: por conciencia ambiental o por ahorro económico, cada vez es más habitual llevarse los alimentos preparados al trabajo o a la escuela. En este sentido, los recipientes herméticos compiten con las bolsas portalimentos, que podemos observar de manera habitual entre los usuarios del transporte público, por ejemplo. Pero, aunque existan recipientes exclusivos para esta función, lo cierto es que muchos consumidores usan un mismo hermético tanto para conservar como para transportar. Por todo ello, se trata de un producto con un uso intensivo y, por lo tanto, con una rotación alta en el punto de venta. Y no solamente pueden confluir con los portalimentos sino que, de hecho, forman parte de estos, dado que las bolsas acostumbran a incorporar herméticos en su interior. Pero también el propio recipiente ha evolucionado para permitir transportar la comida con seguridad y comodidad, sin necesidad de una bolsa.

RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx