La cocreación como respuesta a los retos de las plataformas abiertas y la Industria 4.0

Jash Bansidhar, director gerente en Europa, Advantech.

Lo que buscan a menudo es una solución integral basada en un estándar abierto que elimine el problema de la dependencia de un suministrador. La clave es acabar con la complejidad que caracteriza a los proyectos IoT y garantizar el éxito a los clientes, ofreciendo para ello los conocimientos necesarios para obtener innovadoras soluciones IoT adaptadas a sus entornos y aplicaciones. Esto exige disponer de expertos y productos para cada elemento técnico de la solución. Junto con las plataformas abiertas, proporcionan a los usuarios una libertad sin precedentes para seleccionar lo que necesitan gracias a nuestro alto grado de especialización.

Esto resulta especialmente importante ante la creciente competitividad en la mayoría de los sectores. Las empresas necesitan innovar con el fin de cubrir las expectativas cada vez más altas de los clientes, así como de mantener e incrementar la cuota de mercado, todo ello dentro de su infraestructura ya existente y en los entornos altamente regulados en los que trabajan. Ello exige un proceso de innovación que no consiste en una invención radical sino en la evolución del negocio con la tecnología como medio para conseguir los objetivos estratégicos.

En paralelo, la adopción de la Industria 4.0 implica otros retos. La Industria 4.0 requiere que las personas desempeñen un papel protagonista, con independencia del nivel de automatización y autonomía que hayan adoptado los sistemas de producción. Por todo ello, la selección y la efectividad de los interfaces (HMI) son cruciales.

A medida que se han desarrollado los procesos industriales, los HMI se han hecho más complejos, pero no se han optimizado necesariamente en función de la experiencia del usuario. Pero un diseño deficiente implica un mayor riesgo para trabajadores y activos, al tiempo que los usuarios modernos esperan que el interface sea sencillo y parecido al que utilizan en sus smartphones.

La selección y la efectividad de los interfaces (HMI) son cruciales en la Industria 4.0.

La tecnología de reconocimiento facial se está generalizando en los dispositivos móviles y es previsible que ocurra lo mismo en el entorno industrial. Lo mismo ocurre con el control por voz, cuya enorme ventaja es que permite tener las manos libres y reducir el riesgo de distracción.

Sin embargo, quizás el factor más importante para impulsar el desarrollo del HMI es la IA. Las máquinas y sus sensores IoT generan enormes cantidades de datos y las previsiones indican que los HMI incorporen algoritmos de aprendizaje automático que puedan aprovechar la potencia de estos datos y adaptarse a las acciones del operario.

Por lo que respecta al hardware, los paneles de control de manejo intuitivo experimentan actualmente un crecimiento significativo. Estos paneles ofrecen funciones organizadas por aplicaciones discretas y fáciles de usar, de forma parecida a la pantalla de un smartphone. El usuario puede comprender así fácilmente las opciones disponibles y realizar las acciones apropiadas.

También está aumentando el uso de HMI en las máquinas, capaces de suministrar no solo información para la monitorización de la máquina sino también aplicaciones para operaciones, gestión de herramientas y datos de mayor nivel sobre rendimiento.

Se espera asimismo el crecimiento exponencial de los HMI móviles. Los fabricantes desean monitorizar y controlar las operaciones desde cualquier lugar. Por el momento, tablets y teléfonos móviles son los dispositivos preferidos para ello, pero es muy posible que se traslade asimismo a la tecnología wearable.

Está claro que IoT industrial abarca numerosas tecnologías que dificultan enormemente la promoción de aplicaciones universales para este entorno. La única manera de abordarlo consiste en la creación de un completo ecosistema de IoT industrial a partir de la formación y el aprovechamiento de sólidas alianzas. El desarrollo de WISE-PaaS, la plataforma en la nube para IoT industrial, ha sido nuestra respuesta a la que se han unido suministradores de tecnología, proveedores de plataformas y expertos en dominios verticales para converger en un solo ecosistema que proporciona soluciones a medida y aumenta el valor para los clientes en toda la comunidad.

Las máquinas y sus sensores IoT generan enormes cantidades de datos y las previsiones indican que los HMI incorporarán algoritmos de aprendizaje automático para aprovecharlos.

Una de las principales cuestiones que afronta este método es la fragmentación de la gestión de la máquina. Este aspecto se divide en dos facetas en la que es preciso avanzar: la fragmentación de los procesos de negocio y la fragmentación de la conectividad entre los equipos.

Para muchas empresas, la fragmentación significa hacer frente a diversos sistemas antiguos e incompatibles que funcionan de manera aislada. La recogida de datos puede resultar realmente complicada en un entorno así, pero una transformación total no resultaría económica. Esto hace que la creatividad y la inventiva sean fundamentales.

Para acabar con la fragmentación es necesario que todas las partes se comprometan a colaborar de forma amplia. Nuestro planteamiento de cocreación se centra en proporcionar los recursos de la plataforma y la inversión en alianzas con integradores de los sistemas para hacer realidad nuestra misión de lograr un planeta inteligente.

Para los integradores de sistemas, las ventajas de este sistema van mucho más allá de la capacidad de reproducir con rapidez las aplicaciones a través de WISE-PaaS ya que les permite pasar de vender tan solo soluciones a desarrollar y gestionar modelos innovadores de forma proactiva para los servicios de funcionamiento y mantenimiento, especialmente adaptados a las necesidades y las aplicaciones de cada cliente.