El incremento de los costes energéticos obliga a Signus a revisar al alza sus tarifas de 2023

El Sistema Integrado de Gestión de Neumáticos Usados, Signus, incrementará en 2023 sus tarifas alrededor de un 20%, una subida con el que la entidad compensará la subida de los costes energéticos, tanto de la electricidad que se utiliza en las plantas de transformación de los neumáticos que han alcanzado el final de su vida útil como la del gasóleo. Así lo anunció ayer en rueda de prensa el director general de Signus Ecovalor, Gabriel Leal.

Fuentes de Signus añaden que las obligaciones recogidas en el Real Decreto ley 3/2022 para la mejora del transporte de mercancías por carretera, según las cuales el precio del transporte por carretera debe actualizarse cada vez que los combustibles protagonizan una subida superior al 5%.

Leal, quien señaló que las previsiones para este año de la cantidad de neumáticos puestos en el mercado sea muy similar a la del pasado año (200.000 toneladas, que corresponde a 20 millones de unidades de NFU), llamó la atención sobre la votación que se produce entre hoy y mañana en la Comisión Europea que podría suponer la prohibición de la comercialización, a partir de 2028, de gránulos de caucho con un diámetro inferior a los 5 milímetros, un subproducto utilizado en instalaciones deportivas con césped artificial. Este es el destino de unas 70.000 toneladas anuales, alrededor del 40% de la cantidad recogida por Signus en 2021. Este material (el caucho vulcanizado), advirtió Leal, no tiene otro uso alternativo.

En la rueda de prensa también participó el director de Relación con las Empresas Adheridas de Signus, Julián Madruga, quien el incremento de las tarifas en 2023 está justificado porque la sociedad sin ánimo de lucro es básicamente una empresa logística que recoge los NFU en los talleres y los traslada a las empresas transformadoras del caucho y del resto de componentes que conforman un neumático. Además, apuntó que desde principios de este año Signus ha compensado los aumentos del precio de la electricidad a las plantas industriales dedicadas a la transformación de los NFUs (trituración y granulación), garantizando así el mantenimiento de la actividad de las mismas.

Otro de los cambios impulsados en 2021 por Signus fue el cambio de categorización de los NFUs, que se estableció en función del peso de cada unidad, en lugar del anterior que los clasificaba por su uso. En el actual ejercicio se ha logrado un estrechamiento de los tramos por peso.