Entrevista a Jaume Carol, presidente del Catalan Water Partnership (CWP)
El Catalan Water Partnership es una asociación de empresas del sector del agua que incluye 25 socios entre compañías de productos y servicios de tratamiento de agua, consultorías especializadas, ingenierías y centros tecnológicos y de investigación vinculados a las universidades. Jaume Carol, presidente del Catalan Water Partnership (CWP) y director general operativo de Fluidra, explica en esta entrevista la importancia para el sector de apostar por la exportación.
¿Qué objetivos persigue el Catalan Water Partnership (CWP)?
Trabajamos juntos desde 2008 para mejorar la competitividad de las empresas catalanas del sector aquí y en otros países. Para conseguir estos objetivos el Catalan Water Partnership recibe el soporte de varios programas gubernamentales de apoyo a los clústeres como la agencia Acció de la Generalitat de Catalunya, del Ministerio de Industria, Energía y Turismo o programas de la Unión Europea.
¿Por quién está integrado?
Un dato relevante es que el 70% de las empresas que forman parte del clúster son pymes, es decir, empresas con un gran potencial de crecimiento. Algunas, como Fluidra, ya hace tiempo que operamos en el exterior y otras lo van a hacer pronto. De momento, entre todas las empresas del clúster tenemos una facturación agrupada de 900 millones de euros.
Uno de sus objetivos es buscar oportunidades de negocio. ¿Dónde están?
Tal y cómo dijo Christopher Gasson, uno de los principales expertos del sector, en las jornada que el CWP organizó recientemente, ahora mismo los principales mercados para las empresas del agua son China, Brasil, EE UU e India, pero las mayores oportunidades están en Europa del Este, el sudeste asiático y en América Latina.
¿Y en cuanto a los principales negocios en expansión?
Las plantas de tratamiento de agua, los contratos de gestión integral e I+D y los productos de tecnología puntera. Sin embargo, una de las grandes oportunidades de negocio es apostar por la exportación de los productos que ya hemos desarrollado y que funcionan en el mercado nacional.
¿Qué papel desempeña Fluidra en el CWP?
Fluidra es la empresa más grande del Catalan Water Partnership. Somos más de 3.000 trabajadores y operamos en 41 países a través de 150 delegaciones y centros de producción ubicados en los principales mercados. Nuestros productos se distribuyen a más de 170 países gracias a una extensa red comercial. En la actualidad, el 80% de la facturación del grupo proviene de los mercados internacionales. Por esta razón, Fluidra ha desempeñado un rol de liderazgo inicial dentro del clúster como socio fundador, junto con otras empresas del sector. Evidentemente, nuestra dimensión puede ayudar en la visibilidad o en la participación en determinados proyectos, aunque el clúster siempre es un proyecto colectivo. Pensamos que nuestra experiencia en mercados exteriores debe servir de ayuda para facilitar el camino de otros socios, y nos hemos implicado en algunas iniciativas del CWP de internacionalización. Del mismo modo, nosotros también tenemos la oportunidad de aprender de los avances de otras empresas y centros tecnológicos en innovación.
Recientemente, organizaron unas jornadas sobre inmersión estratégica e innovación. ¿A qué conclusiones se llegó?
Tuvimos la oportunidad de escuchar a grandes expertos del sector y de compartir reflexiones entre los socios del clúster. Coincidimos en que debemos convertir a Cataluña en un punto de referencia mundial en el sector del agua. Esto lo conseguiremos mediante la diferenciación, tal y como han hecho clústeres de referencia mundial como el Netherlands Water Partnership en Holanda. También debemos integrar grandes empresas y pymes, y crear proyectos piloto en la zona. El Catalan Water Partnership debe ser una herramienta para conseguirlo.
Sitúa a Cataluña en materia de investigación.
Es impresionante el trabajo que se hace en centros asociados al Catalan Water Partnership como la Universitat de Barcelona, el Parc de Recerca de la UAB o el CTM. En Cataluña hay mucho talento y personas con ganas de emprender. Sin duda, la base es muy buena, el reto es saber potenciarla. Iniciativas como el Catalan Water Partnership deben servir como trampolín para todos estos proyectos y, si lo conseguimos, pronto repercutirá en nuestra economía. Es cierto que algunos países europeos como Holanda empezaron a potenciar el talento antes que nosotros pero creo que estamos en el buen camino porque el trabajo en formación ya se ha venido haciendo desde hace tiempo.
El sector y la economía en general viven unos momentos delicados. ¿Qué puede hacer el I+D por el sector en la actualidad?
La apuesta del Catalan Water Partnership por la innovación es una de nuestras señas de identidad. Creemos que el éxito de las empresas y centros de conocimiento llegará gracias a la investigación y el desarrollo de nuevas tecnologías. Hay muchos países que esperan nuestra tecnología con los brazos abiertos, especialmente en América Latina y Asia. Estos países se encuentran en pleno crecimiento y necesitan todo tipo de servicios y equipamiento para responder a las necesidades de una población que aumenta exponencialmente, y el suministro y tratamiento de agua es una necesidad primaria. El mercado está allí y nosotros disponemos del potencial para responder a su demanda.
¿De qué forma puede contribuir la tecnología y los nuevos desarrollos a hacer un uso sostenible del agua?
Creo que la gestión eficiente del agua va ligada al desarrollo de nuevas tecnologías. Podríamos decir que los dos pilares para uso sostenible del agua son la tecnología y la concienciación ciudadana de que el agua es un bien muy escaso. Por ejemplo, en Fluidra hemos lanzado AstralPool Mac, que es una revolución en el mundo de la piscina ya que permite que el usuario controle, de forma sencilla, a través de una pantalla táctil, todos los parámetros de la piscina. Esto incluye desde el nivel de eficiencia a la filtración y la dosificación pasando por la temperatura. Así, podemos reducir hasta un 50% el ahorro energético, un 90% de producto químico y un 50% en lavados de agua respecto a las piscinas controladas de manera convencional.
Nuestras empresas en el exterior
A pesar de la situación de la economía en la zona euro, la crisis ha pasado bastante desapercibida en muchas regiones del mundo, especialmente en Asia y América Latina, que han seguido creciendo. “Nuestros productos en estos mercados son cada vez más solicitados y en América las empresas españolas tenemos la ventaja del idioma. La situación nacional y europea ha hecho que la economía española se haya abierto como nunca antes había hecho para captar clientes. En este sentido, creo que este momento es muy positivo para nuestro tejido empresarial e industrial”, apunta Carol.
¿Cuáles son a su entender las tendencias que marcarán el futuro del sector?
Creo que el objetivo seguirá puesto en la sostenibilidad, eficiencia y seguridad. Por ejemplo, la iluminación con LED permite ahorrar hasta un 80% de energía. También en el tratamiento de agua nos encaminamos a sustituir el cloro por otros sistemas de filtración, como los rayos ultravioleta. La climatización es otro de los aspectos que más energía consume, y en el que se están desarrollando nuevos sistemas que permitan aprovechar el calor residual. Dada la escasez de agua, continuar impulsando estos aspectos es esencial.
Háblenos de los retos del sector en la actualidad.
Uno de los principales es el aumento de población del planeta, que demanda un uso mucho más responsable del agua. Otro reto es el tratamiento del agua en países dónde hay especial escasez o dónde el agua tiende a estar muy contaminada. Esta situación ocurre especialmente en países muy industrializados o poblados, como China e India.
