La publicidad estereotipada causa rechazo entre los consumidores
Los mensajes con estereotipos de género empiezan a causar rechazo y resentimiento entre los consumidores, según el estudio The Future is Female, de Havas Creative.
La presión hacia las marcas que emiten mensajes publicitarios con estereotipos (especialmente de género) ha ido en aumento en los últimos años, y es que diferentes grupos de consumidores empezaron a rechazar este tipo de anuncios, por lo que muchas marcas que los empleaban se dieron cuenta que debían llevar a cabo un cambio en su estrategia publicitaria si querían llegar a todos sus públicos objetivos. Así, las empresas empezaron a estudiar bien la línea en la que se movían los consumidores para adaptarse a su forma de pensar. Esta tendencia empezó con las diferencias de género entre hombres y mujeres, pero poco a poco se extendió a otros grupos de consumidores, como los padres o la tercera edad.
Basta de anuncios con hombres que no saben cambiar pañales
En este sentido, el uso de clichés y estereotipos hace que los usuarios empiecen con el rechazo hacia las marcas y terminen con el odio hacia las mismas. Como ha descubierto recientemente el estudio The Future is Female, elaborado por Havas Creative tras analizar las reacciones de los consumidores (hombres y mujeres) ante la publicidad en 32 países, seguir usando estereotipos de género en la publicidad ya no les deja indiferentes. Así, según se desprende de la investigación, los mensajes que incluyen a la figura femenina que limpia o cuida de los hijos, y al hombre que no sabe cambiar pañales están creando resentimiento entre los espectadores, no solo porque no se sienten identificados, sino también porque sienten “rechazo”.
Los consumidores ven el futuro más igualitario
El estudio ha puesto de manifiesto que también ha cambiado la visión que los consumidores tienen de las posiciones de los diferentes géneros en la sociedad. En este sentido, las conclusiones de The Future is Female recuerdan que los encuestados tienen claro que los hombres ya no son quienes marcan cómo debe ser el mundo. Pues el porcentaje de hombres que declara que las cosas funcionan mejor en el trabajo si es el hombre quien manda o que el hombre debe ganar menos que la mujer es bajo. No obstante, todavía no se encuentra en mínimos.
Así, los cambios en la sociedad que muestra el estudio deben reflejarse en la estrategia publicitaria de las marcas, que conseguirán penetrar en un mayor número de consumidores si se alinean con sus pensamientos de igualdad y equidad entre los diferentes grupos de género y demográficos.