Knauf impulsa el debate sobre economía circular y sostenibilidad con la certificación Cradle to Cradle

Knauf, uno de los referentes en la fabricación de materiales de construcción en seco, ha celebrado recientemente un encuentro centrado en la economía circular en los materiales de construcción y la certificación Cradle to Cradle (C2C). Con la colaboración de EIG y Grupo Construcía, el evento reunió a expertos y actores clave del sector para reflexionar sobre el futuro sostenible de la construcción.

Uno de los momentos más relevantes fue la intervención del químico Michael Braungart, co-creador de la certificación Cradle to Cradle, quien compartió su visión sobre el papel crucial que pueden desempeñar los materiales de construcción en la transición hacia modelos más sostenibles. “Tenemos un verdadero problema de escasez. La economía circular es fundamental y debemos de optar a la hora de diseñar de elegir materiales que nos ayuden a avanzar hacia la ecoeficacia, optimizando el impacto positivo, y la ecoeficiencia, reduciendo el impacto negativo de nuestro modelo de producción”, expresó Braungart. Además, defendió que “no hay que pensar en minimizar el impacto, sino en reducirlo”.

La certificación Cradle to Cradle es un estándar global que evalúa la sostenibilidad de productos según cinco categorías: salud de los materiales, circularidad del producto, emisiones (energía, aire y clima), gestión del agua y del suelo, y equidad social. A diferencia de otras certificaciones, requiere renovación cada dos años, garantizando así una mejora continua.

Este compromiso con la sostenibilidad se refleja en el anuncio de Knauf a principios de año sobre la ampliación de la certificación Cradle to Cradle (C2C) nivel Silver a prácticamente todas sus placas de yeso y perfiles metálicos producidos en las plantas de Escúzar y Guixers, en España. Esta decisión posiciona a Knauf como referente en la adopción de materiales sostenibles y regenerativos en el sector.

Con esta iniciativa, Knauf reafirma su compromiso con la sostenibilidad y el diseño circular en el sector de la construcción. Apostar por la certificación Cradle to Cradle no solo responde a una necesidad medioambiental urgente, sino que también impulsa un cambio de paradigma en el modo de concebir, diseñar y construir espacios. La evolución hacia un modelo regenerativo se antoja como una necesidad para el futuro del planeta.

Durante la apertura del evento, Pablo Maroto, director de marketing y técnico de Knauf España y Portugal, instó a la industria a replantear sus sistemas productivos. En sus palabras, la certificación C2C “nos invita a pensar más allá del reciclaje y a aspirar a una producción regenerativa, en la que los residuos se conviertan en recursos y los sistemas sean diseñados para ser verdaderamente circulares”.

La posterior mesa redonda sirvió como plataforma para debatir los desafíos y oportunidades que presenta la aplicación de los principios de economía circular. Esta práctica se basa en cerrar el ciclo de vida de los productos mediante su reutilización, renovación, reparación y reciclaje, conceptos clave para un modelo constructivo más eficiente y respetuoso con el entorno. Además, sostuvo que “debemos intentar pasar de lo lineal a lo circular” y que “el sector de la construcción, históricamente, ha tendido a ser más parte del problema que de la solución”.

Por otro lado, Ignasi Cubiña, cofundador de EIG y CSO de Grupo Construcía, recalcó: “debemos trabajar para que la construcción pase de ser extractiva a ser regenerativa. El enfoque del programa C2C Certified nos da la posibilidad de diseñar de manera positiva para conseguirlo”. Asimismo, subrayó el valor de la certificación: “esta certificación genera confianza, verifica información y da credibilidad a las empresas que la poseen”.

El evento también puso en relieve los beneficios que la certificación Cradle to Cradle puede ofrecer tanto a los consumidores como a los profesionales del sector. Según Michael Braungart, esta certificación “se centra en tener una agenda positiva” y “obliga a mostrar con qué materiales haces un producto y de dónde proceden, mejorando la decisión del consumidor”. Asimismo, recalcó la utilidad que puede tener para una empresa como Knauf, ya que “el yeso se puede usar continuamente en un ciclo sin fin”.

Además de facilitar transparencia y trazabilidad, el certificado C2C ayuda a cumplir con los estándares más estrictos en sostenibilidad y eficiencia energética. Es una herramienta valiosa para alcanzar certificaciones de edificios sostenibles como Leed, Breeam o Well, permitiendo a arquitectos, constructores y promotores ofrecer proyectos que prioricen la salud de los usuarios y el respeto al medioambiente.