Programas de saneamiento oficial en el ganado caprino de la Región de Murcia.
(Durante la presente semana, OVIESPAÑA publica varias informaciones sobre los programas de saneamiento oficial del caprino en algunas de las comunidades autónomas con mayor importancia de este sector, tras la mesa redonda celebrada en el último Foro Nacional del Caprino)
La Región de Murcia cuenta con un total de 463 explotaciones de caprino y 168.776 reproductores censados, con una importante presencia en las comarcas de Altiplano y Alto Guadalentín. Se trata de explotaciones intensivas en su mayor parte, o semi-intensivas, con la raza Murciano-Granadina como principal protagonista, produccion destinada a la industria quesera y una media de unas 370 cabras por explotación, con poca superficie de tierra asociada a la explotación, alimentación basada en forrajes y concentrados, y mano de obra mayoritariamente familiar.
De esta descripción partió la ponencia impartida por Javier Sidrach de Cardona Ortín, jefe del Servicio de Sanidad Animal de la Consejería de Agricultura de Murcia, durante la última edición del Foro Nacional del Caprino. En su intervención describió los programas de saneamiento oficial en el ganado caprino de esta comunidad autónoma.
Brucelosis ovina y caprina
Murcia lleva varios años sin casos de brucelosis ovina y caprina en sus explotaciones, por lo que el próximo objetivo es conseguir la calificación de ‘oficialmente indemne’ a la enfermedad. Además, se ha ido reduciendo progresivamente el número de animales de reposición vacunados de brucelosis, desde los casi 125.000 ejemplares de la década de los 90 hasta los 10.944 animales del pasado ejercicio 2016.
Tuberculosis caprina
La Región de Murcia cuenta con una dilatada experiencia en la lucha contra la tuberculosis caprina, ya desde el año 1995, cuando se reguló de forma oficial este programa. Así, un sondeo epidemiológico señalaba que el 33% de las explotaciones y el 17% de los animales eran positivos a la enfermedad.
De esta forma, se realizan análisis a los animales mayores de 45 días, o de dos años en el caso de que estén vacunados contra la paratuberculosis. La prueba diagnóstica es intradermo reacción IDTB, realizada por los técnicos de las ADSG y asociaciones. También se controlan los movimientos entre explotaciones y se establecen medidas relativas a la reposición y a la bioseguridad en las granjas que tienen mayores problemas.
De esta forma, en la última década se ha conseguido reducir el porcentaje de explotaciones positivas de un peligroso 25,38% en el año 2006 a un 3,22% en el pasado ejercicio. Respecto a los animales positivos, se ha pasado de un porcentaje del 6,68% al 0,30% en la última década.