Benefician especialmente a cereales, cultivos leñosos y pastos
Las últimas lluvias mejoran las previsiones y elevan el ánimo del sector primario
Las precipitaciones registradas durante la Semana Santa suponen un importante revulsivo para el sector primario en España, después de un 2023 especialmente seco en el que la productividad se vio bastante afectada por la escasez de agua.
Los cultivos leñosos, los cereales y los pastos -determinantes para la ganadería- han sido las producciones agrarias más beneficiadas por las copiosas precipitaciones de las últimas semanas, según han señalado a Efeagro las organizaciones agrarias mayoritarias.
Los efectos de las lluvias sobre los cereales son “claramente beneficiosos”, han detallado fuentes de ASAJA, tras añadir que los leñosos, han disfrutado además de “temperaturas no excesivamente bajas”, con lo que “la floración y el cuajado evoluciona positivamente”.
Desde la organización agraria COAG, aún esperan un análisis más concreto por zonas y cultivos, pero en líneas generales hacen un balance positivo para el campo, especialmente en los cereales y los cultivos leñosos de la mitad sur peninsular.
Además, también se verán beneficiados los pastos y han aumentado las reservas de los pantanos más castigados por la sequía de los últimos dos años, y “eso reduce la incertidumbre de la disponibilidad de agua para regadío en los próximos meses”. Aún así, fuentes de esta organización han insistido en que “hay que estar pendiente de la evolución del clima en los próximos meses de primavera”.
Por su parte, la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha considerado las lluvias y nevadas de los últimos días “una muy buena noticia para el campo”, especialmente en una situación de “gravísima sequía”. Estas precipitaciones, a su juicio, “cambian radicalmente las previsiones de los cultivos, especialmente de secano, como el cereal, el viñedo y el olivar”.
Efecto en la ganadería
Para UPA, además, la ganadería se verá beneficiada pues los pastos crecerán considerablemente y el acopio de agua en los embalses garantizará unos adecuados suministros para el regadío.
Sin embargo, ha remarcado que la situación más grave sigue estando en Cataluña y la cuenca mediterránea, “donde las lluvias no han sido tan abundantes”.
Por ello, desde la organización agraria han apelado a “no olvidar que España debe estar preparada para estas situaciones derivadas del cambio climático“ y ”hay que reforzar las inversiones en regadío, de tal modo que cada gota de agua se aproveche y no se desperdicie”, además de reformar el sistema de seguros agrarios para que se el adecuado a la situación de cambio climático.
Los embalses andaluces rondan ya el 40%
Por regiones, cabe destacar que los embalses andaluces rondan ya el 40% de su capacidad tras la importante subida registrada por las lluvias de Semana Santa, ya que la comunidad cuenta con alrededor de 4.800 hm3 de los 12.000 hm3 que tiene de capacidad total, una cifra que seguirá aumentando por las aportaciones procedentes de la escorrentía.
Las abundantes precipitaciones que se han producido durante toda la semana alivian la acuciante situación de sequía de la comunidad y han disparado los porcentajes de agua embalsada en general en casi diez puntos, según los datos recabados por EFE de los Sistemas Automáticos de Información Hidrológica (SAIH) del Guadalquivir e Hidrosur.
La Demarcación del Guadalquivir se encuentra al 43,28% de su capacidad, con 3.477,5 hm3 embalsados de los 8.034 con los que cuenta de capacidad total. Esta subida supone trece puntos sobre el dato de agua con el que contaban el Domingo de Ramos, 24 de marzo.
La Cuenca Guadalete-Barbate está al 27,18%, con 449 hm3 de los 1.651 que tiene de capacidad. El dato significa casi seis puntos más que hace una semana.
Por su parte, las Cuencas Mediterráneas Andaluzas están al 27,39%, ya que cuentan con 315 hm3 de los 1.152 de capacidad total. La subida en una semana es de cinco puntos porcentuales.
Respecto a los embalses de las Cuencas Tinto, Odiel, Piedras y Chanza, el último dato disponible -a falta de la actualización de este lunes- es del 27 de marzo, cuando estaban al 43%, aunque la cifra será significativamente superior por las lluvias registradas en los últimos días.
El pico de precipitación acumulada en Semana Santa se ha situado en Grazalema (Cádiz), con 456,6 litros por metro cuadrado.
La situación generalizada de lluvias en Andalucía durante toda la Semana Santa, con más de 100 litros por metro cuadrado en un día en algunas zonas, da un respiro a una comunidad muy afectada por la sequía, especialmente para el campo.