El sector de la fabricación aditiva en España
Naiara Zubizarreta, directora de Addimat
26/05/2025
La fabricación aditiva se encuentra en un punto de inflexión. En los últimos años, el sector ha vivido una fase de rápida innovación y avance tecnológico. Hoy, sin embargo, estamos entrando en una etapa más madura, en la que algunas tecnologías ya han alcanzado su madurez industrial, los sectores usuarios están comprendiendo en qué aplicaciones es ventajoso su uso, y la proliferación de proveedores está dando lugar a una intensa lucha por conseguir cuotas de mercado.
En términos globales, y teniendo en cuenta ventas de equipos, servicios, materiales y software, Wohlers Report le atribuye al sector un crecimiento del 9,1%. Sin embargo, si analizamos por subsegmentos, veremos que la facturación por servicios de impresión 3D, materiales y software crece a un ritmo de dos dígitos porcentuales (lo cual es lógico, ya que a mayor capacidad de máquinas instalada, mayor es el volumen de consumo). El dato menos positivo lo encontramos en la facturación global por venta de máquinas industriales de impresión 3D en 2024, alrededor de un 1,5% menor que en 2023. A este indicador, reflejo del panorama de inversión industrial actual, se le suma el hecho de que la mayor tasa de crecimiento en el segmento de máquinas es atribuible a China mientras que Europa y Estados Unidos luchan por mantener su posición en el mercado, no sin dificultad.
Por contra, el año 2024 ha sido muy bueno para el sector de fabricación aditiva español, que registró un incremento del consumo de máquinas de impresión 3D del 27,5%. También creció significativamente la facturación por prestación de servicios de fabricación de piezas por aditivo: un 36,6%. Sin embargo, no conviene comparar las cifras del mercado español con la situación global, ya que España comenzó más tarde el proceso de implementación e industrialización de la tecnología aditiva y esto explica: sería muy preocupante que su curva de crecimiento no fuese más pronunciada ahora, como también lo fue hace 10 años en los países que hoy lideran el sector. Teniendo en cuenta esto, y sin pretender lanzar campanas al vuelo, es una tendencia positiva que nos indica el crecimiento de las empresas usuarias españolas apostando por la tecnología y empezamos a tener constancia de proyectos de gran relevancia, si bien la mayoría de ellos se materializan a nivel confidencial.



