Descubriendo los beneficios de los innovadores cierres Nomacorc para vino
El pasado 25 de abril, Vinventions nos invitó a conocer la planta de fabricación donde desarrolla sus tapones Nomacorc. Ubicada en Thimister-Clermont, Bélgica, la fábrica produce 6 millones de tapones al día en temporada alta y desde ENEO, junto a otros 30 profesionales de toda España –entre bodegueros, distribuidores y prensa especializada–, tuvimos la oportunidad de ver en primera persona cómo se fabrican las soluciones de cierre para vino del segundo grupo empresarial más importante del mundo en lo que a fabricación y facturación se refiere.
Vinventions es un referente mundial en cierres. Con una amplia experiencia en enología, y especialmente focalizados en acabar con la presencia de TCA, la compañía diseña y fabrica soluciones innovadoras y sostenibles con el objetivo de preservar la calidad del vino, proporcionando protección y valor añadido.
Vinventions se centra en capacitar a los productores con el conocimiento y las herramientas necesarias para garantizar la calidad óptima, consistencia y duración de la vida útil de sus vinos y espumosos.
En su planta de Thimister-Clermont, Vinventions fabrica 1.300.000.000 cierres anuales, alcanzando la cifra de 6 millones de tapones al día en la temporada más alta. En un espacio de 10.000 m2, la planta da empleo a 230 personas, que se dividen en turnos para mantener la planta operativa 24/7 todos los días de la semana.
A nivel de equipamiento, cuenta con 5 líneas de extrusión, 14 líneas de biselado y estampado y 28 máquinas de finishing. Con ello, da servicio a más de 1.800 clientes que acumulan alrededor de 15.000 pedidos al año.
¿Cómo se fabrican las soluciones de cierre de Nomacorc?
“El enfoque de la marca Nomacorc está centrado en la sostenibilidad”, nos explicó Marta Arranz, enóloga y responsable de la gama de herramientas Wine Quality Solutions. Y es que dentro de la amplia gama de soluciones de Vinventions, los cierres sintéticos de Nomacorc combinan eficacia técnica y características sostenibles para proteger el vino.
La marca Nomacorc está especializada en resolver los problemas relacionados con el sabor a corcho (TCA) y en introducir la gestión del oxígeno a través de los cierres. Nomacorc también es el primer cierre en utilizar materias primas sostenibles innovadoras. “Esta gama de tapones está diseñada para abordar los desafíos ambientales, incluida la reducción de las emisiones de carbono (gama Green Line), la circularidad (gama Blue Line) y la lucha contra la contaminación marina (gama Ocean)”, señaló Arranz.
El proceso de fabricación de estos tapones se inicia en la fase de extrusión, momento en el que la materia prima y los gránulos se mezclan, se funden y se prensan en un molde para crear un tubo que se solidifica en remojo con agua. Tras ello, llega el proceso de co-extrusión, es decir, de una segunda extrusión. Aquí, se unen dos materiales sintéticos (piel y espuma) por adhesión térmica y se crea el tapón completo antes de pasar a la fase de corte. Mediante una cuchilla rotativa, previamente pulverizada con una mezcla de agua y etanol, se corta el tubo y se da forma a cada tapón.
Los tapones ya cortados llegan verticalmente a la máquina de biselado. Luego, son llevados a un tapiz que les empuja a los lados y los gira. Dos discos en rotación constante biselan el tapón a una velocidad media de 7.000 tapones a la hora. Seguidamente, les quita el polvo restante para dejarlos listos para la impresión. En este momento, los tapones entran en un carrusel, se fijan y hacen una rotación sobre sí mismos. Al mismo tiempo, se imprimen eléctricamente mediante un tratamiento llamado ‘Corona’, que modifica la tensión de la superficie del tapón, logrando una mejor adhesión a la tinta.
Cuando los tapones ya están impresos, se pasa al tratamiento de superficie. En un primer silo se les quita el polvo y en un segundo silo, se les trata con silicona alimentaria. Después, por un lado, se recogen los tapones de retención de cada lote –que se guardan en laboratorio durante 5 años– y, por otro, los tapones se agrupan cada 1.000 unidades en una cinta para su control visual final. Si los tapones están en las condiciones correctas, llegan al proceso de empaquetado en cajones o cajas de cartón, que quedan abiertas un tiempo para que el etanol del corte se evapore.
Con el tapón ya impreso, el tratamiento ‘Corona’ modifica la tensión de la superficie del tapón, logrando una mejor adhesión a la tinta.
Empaquetado de los tapones.
Soluciones para todo tipo de vinos
“Estamos especializados en crear un tapón para cada tipología de vino, consultando con el cliente sus necesidades y ofreciéndole la solución que mejor se adapta”, nos dijo Marco Lozano, director comercial en España y Portugal de Vinventions. “Nuestros métodos de producción están validados por la Organización Internacional del Vino (OIV) y tiene en cuenta tanto la tasa de transferencia de oxígeno (OTR) como la desorción, ofreciendo una medición fiable para todo tipo de tapones”, añadió Marta Arranz.
En este sentido, Vinventions realiza una evaluación de la verdadera contribución del tapón al aporte de oxígeno en la botella, permitiendo que los enólogos pueden evaluar el rendimiento del tapón, identificar variaciones y tomar decisiones en función de sus objetivos. “Por mucho que nosotros garanticemos la mejor solución de cierre, de nada sirve si el aporte de oxígeno durante el proceso de embotellado no es el adecuado. De ello nace nuestra gama de herramientas enológicas Wine Quality Solutions, centrada en eliminar desviaciones sensoriales, garantizar la consistencia de botella a botella y controlar la duración de conservación”, señaló.
Durante la visita, además de descubrir las distintas gamas de cierres de Vinventions, disfrutamos de la cata 'Taste the difference' en la que pudimos comprobar cómo afecta el tapón a la evolución del vino.
Gracias a todos sus años de investigación, la gama de soluciones de Vinventions es cada vez más amplia. Dentro de la gama de cierres sintéticos Nomacorc encontramos los modelos Reserva para vinos de alta gama; Ocean, el primer cierre del mundo hecho con plástico reciclado proveniente de los océanos; Select y Classic, especialmente diseñados para el control de oxígeno y formados por la línea Blue Line –la primera solución de cierre circular en el mundo, fabricada al 50% con materiales reciclados, para vinos tranquilos de calidad superior– y la línea Green Line –el primer y único tapón del mundo con una huella de carbono neta neutra–; y Smart, la solución más económica.
Otra gama de productos son los SÜBR, la primera gama de cierres micronaturales para el vino que no contiene ni poliuretano ni contaminantes, o los tapones de rosca VINTOP.
VINTOP Infinite: un tapón de rosca revolucionario con tecnología digital
VINTOP Infinite es la última innovación de Vinventions, un exclusivo tapón de rosca para vinos (estándar BVS) que cuenta con tecnología de impresión digital de vanguardia. VINTOP Infinite ofrece infinitas posibilidades de personalización, con hasta 2.000 colores disponibles para diseños llamativos. Gracias a ello, se abren nuevos caminos para la creatividad en el embalaje y la expresión de marca, ya que los diseños ahora pueden abarcar la parte superior y lateral de forma continua. Los productores de vino ahora también pueden crear diseños específicos para campañas de marketing cortas y dirigidas, mejorando el compromiso y el reconocimiento de la marca.
La rápida muestra del cierre, los plazos de entrega ultrarrápidos y los tamaños de pedido flexibles aseguran que los productores de vino, embotelladores y minoristas puedan crear un compromiso superior con el consumidor mientras gestionan sus desafíos de adquisición y cadena de suministro.
“Estamos muy orgullosos de ser los primeros productores de tapones de rosca en proponer la impresión digital, tanto en la parte superior como en el lateral, lo que es un punto de diferenciación importante para las marcas”, dice Frédéric Grégoire, director de Tecnología de Vinventions. “Esto nos permite mejorar radicalmente nuestro servicio”.