Primer sistema de iluminación de rueda con led para automóviles

Imaginemos una rueda de vehículo, por ejemplo, de un automóvil, que se ilumina al girar y cuyo color variará en función de la velocidad a la que se desplace. Eso es gracias a la incorporación en dicha rueda de un dispositivo eléctrico que comprende una serie de leds, como fuente de luz, asociados a un mecanismo de inducción electromagnética. ¿Película? No, es una de las innovaciones presentadas recientemente en el Club de Inventores Españoles de la mano de Raúl Hernández Moral, de Barcelona.

El dispositivo incorporado a la rueda comprende, esencialmente, un imán y una bobina acoplados al eje de la rueda de manera que se mueven de modo relativo, es decir, de manera que, al menos uno de ellos gira con ella alrededor del otro determinando la generación un campo de corriente de inducción electromagnética que alimenta los leds conectados a la bobina. Además, no requiere incluir pilas u otros medios de alimentación eléctrica, con la particularidad de que la intensidad de dicha corriente está relacionada, directa o indirectamente, con la velocidad de giro de la rueda. Se trata de un led RGB de 4 conexiones y con 3 colores integrados (R, red; G, green; B, blue) y que, con la combinación de los tres se obtiene también el color blanco. Existe también la posibilidad de un led RGBW, es un led de 5 conexiones con el blanco puro (W de White). Dicho led nos proporciona todos los colores del espectro visible más la adición del blanco puro conseguido no hace mucho.

En ambos casos, en función de la velocidad del vehículo, y por tanto, de la velocidad de giro de la rueda, ésta se ilumina con un color u otro de toda la gama del espectro visible, en función del color con que se iluminen los led en cada momento según la velocidad del vehículo.

La rueda incorpora el dispositivo acoplado a la parte interior de la llanta de la rueda, la cual presenta una serie de alojamientos expresamente previstos para la inserción de los conjuntos de led, de modo que son visibles desde la parte lateral del vehículo. Con ello, se consigue que la rueda luminosa proporcione luces de colores al moverse el vehículo, colores que irán cambiando con la velocidad a que se desplace el mismo, por inducción electromagnética, sin pilas, baterías ni mantenimiento ni fricción.

Cabe señalar que, opcionalmente, el dispositivo contempla la inclusión de un componente electrónico de control que regula el suministro de voltaje desde la bobina a los leds para evitar sobretensiones, y sin que se descarte que, además, se trate de un componente programable, por ejemplo un microchip, para conseguir determinados patrones de funcionamiento en base al comportamiento de giro de la rueda, provocados por la maniobras de vehículo, por ejemplo para que en función del sentido de giro de la rueda se iluminen unos u otros leds de cada conjunto.

Esta innovación dota a los vehículos de un ‘lenguaje preventivo’ que mejora la comunicación visual durante la conducción y reduce los tiempos de respuesta de los conductores.

Este desarrollo supone una mejora comunicativa y por tanto positiva para la seguridad vial, otorgando a los vehículos un lenguaje preventivo a distancia que reduciría notablemente los tiempos de respuesta de los conductores gracias a un sencillo código de color.