Oerlikon Balzers abre su primer centro de competencia de automoción en Europa
En una gran inauguración, Oerlikon Balzers ha abierto las puertas de su primer centro de competencia europeo para recubrimientos del sector de la automoción.
La nueva planta en Veľká Ida, cerca de la ciudad eslovaca de Košice, es parte de la estrategia global de Oerlikon Balzers para el mercado de la automoción.
En la planta de Veľká Ida, el grupo ha centralizado todas las actividades de servicio para la industria de automoción alemana y europea. Desde esta planta se dará servicio a todos los conocidos fabricantes de coches y sus proveedores en Europa.
Veľká Ida está posicionada dentro de la corporación como la planta de producción más grande y más moderna hasta el momento: además de máquinas de recubrimiento ultra-modernas diseñadas y fabricadas por Oerlikon Balzers, también cuenta con sistemas de ensayo totalmente automatizados y alimentadores de carga de piezas, así como la más avanzada tecnología de decapado para el mantenimiento del utillaje y los componentes del sistema. Todos estos sistemas son los más avanzados del momento. Asímismo, se ha instalado un almacén computerizado para las piezas aún sin procesar y para el producto acabado.
Además de Veľká Ida, la compañía está trabajando en dos centros de competencia más en EEUU y China. La nueva planta de Eslovaquia va a asumir un papel pionero en este proceso: para reducir los gastos de planificación, las siguientes plantas de automoción serán de construcción idéntica.
Los principales retos para los recubrimientos de automoción son la fricción, el desgaste y las necesidades de precisión absoluta que los fabricantes demandan. Después de todo, la menor fricción deriva en un mejor rendimiento y una menor emisión de gases; menos desgaste significa que los componentes pueden soportar mayores cargas, mientras que su vida útil se expande, son más fiables y más seguros; y la habilidad de cumplir con estrictos requisitos en tolerancias garantiza una mayor eficiencia.
Las innovadoras tecnologías de recubrimiento como éstas son una inversión en el futuro, ya que contar con motores eficientes significa un menor consume de combustible y recursos.