Un 60% de la industria española apuesta por la digitalización, pero sólo el 21% tiene proyectos en fase avanzada
La industria española ha intensificado su apuesta por la digitalización, pero aún se encuentra en una fase intermedia de madurez. Así lo asegura el VIII Informe Smart Industry 4.0, elaborado por el Observatorio de Industria y Tecnología junto con la consultora Structurit. Según este documento, casi el 60% de las empresas industriales declara haber desarrollado iniciativas de digitalización con resultados positivos, pero sólo un 20,83% se considera en una fase avanzada.
En paralelo, el porcentaje de compañías que reconoce proyectos con escaso retorno se reduce al 19,44%, el nivel más bajo de toda la serie histórica. Además, por primera vez, el informe traza una radiografía cuantitativa de la Smart Industry en España, identificando más de 88.000 entidades relevantes (sector privado y administraciones públicas) con una escala económica conjunta de 863.418 millones de euros, equivalente al 52% del PIB nominal estimado para 2025.
La foto sectorial muestra que bloques como automoción y manufactura, alimentación y bebidas, energía, farmacéutico y químico, retail y transporte concentran la mayor parte del esfuerzo inversor en Industria 4.0.
“Respecto a años anteriores, se observa una evolución positiva en la colaboración intersectorial y en la apuesta por la formación y el talento digital, factores que el informe identifica como críticos para la competitividad. Sin embargo, la escasez de perfiles especializados sigue siendo una de las principales barreras para la transformación digital”, comenta Enrique Ramírez, presidente del Observatorio de Industria y Tecnología.
Así se explica en el estudio, según el cual, el 76% de las empresas reconoce la necesidad urgente de reforzar sus programas de capacitación y atraer talento tecnológico, y paliar la falta de profesionales con una respuesta coordinada entre empresas, instituciones y organismos colegiales.
IA, ciberseguridad y hoja de ruta a cinco años
El informe dedica un bloque específico a la inteligencia artificial, incluida la IA generativa. Aunque el interés es muy elevado, sólo una minoría, una de cada 5 (22,8%) ha desplegado proyectos a escala. No obstante, un 46,5% cuenta con iniciativas en fase piloto o exploratoria, lo que indica que cerca del 70% del ecosistema ya está utilizando este tipo de tecnologías.
¿Qué barreras están ralentizando su implantación en el sector? Principalmente la falta de talento especializado, las dudas sobre privacidad y confidencialidad de los datos industriales, la complejidad de integración con sistemas OT (tecnología operativa) y sistemas IT (tecnologías de la información), y la ausencia de estándares compartidos.
En paralelo, la ciberseguridad industrial y la calidad del dato se consolidan como pilares de cualquier estrategia 4.0. La primera es esencial para proteger a la organización y sus procesos, ya que la digitalización, ya sea mínima o masiva, aumenta la exposición a riesgos. Por su parte, la segunda es básica para la toma de decisiones en tiempo real, algo imprescindible para ser competitivo en la actualidad.
Recomendaciones
Más allá del diagnóstico, el estudio plantea una agenda de recomendaciones para los próximos cinco años, entre ellas:
- Impulsar la formación continua y las competencias digitales, con la ingeniería industrial liderando la transición hacia entornos inteligentes.
- Fomentar la interoperabilidad y la estandarización para facilitar la integración de tecnologías y procesos a lo largo de la cadena de valor.
- Priorizar la inversión en IA generativa, gemelos digitales y analítica avanzada, vinculando siempre los proyectos a procesos críticos y métricas de impacto.
- Reforzar la ciberseguridad y la calidad del dato como condiciones necesarias para una digitalización segura y sostenible.
- Alinear la transformación digital con los objetivos de eficiencia energética, reducción de emisiones y economía circular.
- Implantar desde el Estado un Plan Nacional de Transformación Industrial 4.0, así como un marco de interoperabilidad OT/IT basado en estándares europeos.
“Hay que decir que el documento diferencia entre recomendaciones a nivel país, dirigidas al Ministerio de Industria, otras para empresas productoras, para los profesionales por área de responsabilidad y para los integradores. Son planteamientos muy dirigidos para conseguir que, entre todas las esferas implicadas, alcancemos una industria mucho más competitiva e innovadora”, indica Javier de la Cuerda, CEO de Structurit.
El VIII Informe Smart Industry 4.0 da continuidad a la serie iniciada en 2018 y se presenta como una referencia para empresas, administraciones y agentes del ecosistema industrial. En esta edición ha contado con el apoyo de entidades como la Asociación Española de Robótica y Automatización (AER) y el Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de Madrid (Coiim), entre otros colaboradores.
El informe completo está disponible para su descarga. También se pueden consultar las ediciones anteriores en el repositorio de conocimiento del Observatorio de Industria y Tecnología, útiles para analizar la evolución de la digitalización industrial en España a lo largo de la última década.


