La iniciativa busca educar al mercado y reforzar la confianza en estas soluciones, a través de contenidos estratégicos en redes sociales y medios especializados
Sto Ibérica presenta la campaña 'Lealtad al sistema' para sensibilizar al sector sobre los aspectos legales de las soluciones SATE
Sto Ibérica alerta sobre una tendencia creciente en el mercado del aislamiento térmico por el exterior: la utilización de componentes ajenos a las certificaciones oficiales, una práctica que pone en riesgo el rendimiento, la trazabilidad y la seguridad de las soluciones instaladas. Para frenar esta deriva, la compañía impulsa la campaña 'Lealtad al sistema', con la que busca promover el empleo de configuraciones completas y verificadas mediante Evaluaciones Técnicas Europeas (ETE), además de sensibilizar al sector sobre las consecuencias normativas, técnicas y de durabilidad que implica mezclar productos de distintos fabricantes.
Conscientes de una práctica cada vez más extendida en obra nueva y rehabilitación, Sto Ibérica, compañía especializada en la fabricación y comercialización de productos y sistemas de construcción, ha puesto en marcha la campaña ‘Lealtad al sistema’. Su objetivo es que las soluciones instaladas en los edificios se ajusten fielmente a las clasificaciones recogidas en la Declaración de Prestaciones del Sistema, al tiempo que se sensibiliza a profesionales, administraciones y opinión pública sobre la importancia de emplear configuraciones completas, suministradas íntegramente por un único titular y ensayadas conforme a evaluaciones técnicas reconocidas a nivel europeo.
El motivo de esta iniciativa radica en una preocupación creciente del sector: el mercado del aislamiento térmico por el exterior (SATE) está experimentando un aumento en la utilización de productos que no forman parte de la certificación correspondiente. Esta tendencia compromete el rendimiento del sistema, invalida el cumplimiento del Reglamento de Productos de Construcción y genera incertidumbre en torno a la durabilidad y la seguridad de las soluciones aplicadas.
La campaña contempla la difusión de contenidos específicos en redes sociales y medios especializados, apoyados en material gráfico y divulgativo. También incorporará demostraciones técnicas y publicaciones que aporten datos sobre los riesgos derivados de no mantener la lealtad al sistema y sobre las ventajas de utilizar únicamente configuraciones ensayadas y certificadas. “La industria no puede permitirse poner en riesgo la calidad de los SATE mezclando componentes que no han sido diseñados ni ensayados para trabajar juntos. La lealtad al sistema no es una opción comercial, es una responsabilidad técnica y un requisito para garantizar seguridad, durabilidad y eficiencia energética. Con esta campaña queremos proteger al sector y dar visibilidad a un problema real que afecta a miles de obras cada año”, señala Javier Álvarez, responsable del Departamento Técnico de la compañía.
¿Qué es la lealtad al sistema y qué riesgos implica no cumplir esta premisa?
La lealtad al sistema consiste en utilizar de manera íntegra y coherente todos los materiales que forman parte de un SATE validado mediante una Evaluación Técnica Europea (ETE). Este documento, emitido por un organismo notificado por la EOTA —la Organización Europea para la Evaluación Técnica de productos de construcción innovadores—, permite a los fabricantes emitir la Declaración de Prestaciones y el marcado CE del sistema completo.
Dado que estas soluciones no disponen de una norma armonizada y, por tanto, no están obligadas a llevar marcado CE, la ETE representa hoy el mecanismo más fiable para acreditar la idoneidad de un sistema completo y declarar prestaciones importantes o incluso obligatorias, como el comportamiento higrotérmico, mecánico o la reacción frente al fuego. Para preservar esta validez, la normativa exige que todos los componentes incluidos en el kit certificado se utilicen de forma conjunta, sin sustituir elementos por productos de otros fabricantes o distribuidores, y establece que un organismo externo realice un Control de Producción en fábrica que garantice el cumplimiento de lo certificado.
Cuando se combinan componentes de distintos fabricantes —por ejemplo, morteros de uno y aislamiento de otro— se rompe la trazabilidad del sistema, se pierde cualquier garantía sobre su comportamiento final y se incumplen las exigencias del Reglamento de Productos de Construcción.
Esta práctica conlleva riesgos significativos, siendo el primero de ellos el incumplimiento de la ley. La lealtad al sistema implica que todos los componentes procedan de un único titular y hayan sido ensayados y certificados de manera conjunta mediante una Evaluación Técnica Europea (ETE). Al mezclar productos de diferentes proveedores, esa coherencia desaparece y el conjunto deja de estar respaldado por una metodología de verificación reconocida. Como consecuencia, se vulnera el Reglamento de Productos de Construcción y se elimina toda garantía trazable sobre las características y el rendimiento del sistema.
Además, modificar la configuración certificada repercute directamente en el comportamiento del sistema en obra: la clasificación al fuego deja de estar garantizada y pueden producirse fisuraciones, desprendimientos, puentes térmicos, pérdidas de adherencia, incompatibilidades entre capas o un envejecimiento prematuro que afecte tanto a la estética como a la durabilidad de la fachada. A ello se suma su impacto en los objetivos europeos de eficiencia energética, ya que la fiabilidad de estas soluciones es esencial para avanzar en la renovación térmica del parque edificatorio. Si los usuarios perciben incertidumbre sobre su durabilidad o se demuestra una merma en el rendimiento real, su adopción se ralentiza y se dificulta la descarbonización del sector residencial.
El compromiso de Sto Ibérica
Con el objetivo de reforzar la calidad y la seguridad del mercado, la compañía garantiza que todos los componentes de sus sistemas sean suministrados por un único titular, mediante un modelo de venta 100% directa. Esto asegura trazabilidad completa, control de calidad y cumplimiento de la configuración validada en la Evaluación Técnica Europea (ETE). Además, la compañía complementa esta evaluación con controles internos adicionales y un seguimiento continuo de materiales y procesos de aplicación.
Como parte de su compromiso con la sostenibilidad y las buenas prácticas en la construcción, Sto ha decidido asumir también una función educativa: informar, formar y alertar sobre las consecuencias de utilizar sistemas no certificados o montados con componentes de distintos orígenes. “La transición energética exige soluciones fiables y duraderas. En Sto trabajamos para que cada fachada contribuya realmente a un parque edificatorio más eficiente y seguro. La lealtad al sistema no es solo un compromiso con la calidad, sino también con las personas y con el futuro de nuestras ciudades”, concluye Javier Álvarez.

























