Pieralisi convierte el ‘slop oil’ en recurso energético mediante tecnologías de separación y recuperación
Un estudio europeo publicado en la revista ‘Circular Economy and Sustainability’ analizó en qué medida los residuos oleosos de refinerías, buques o tanques de transporte pueden gestionarse de forma más sostenible. La investigación concluyó que los procesos de separación y recuperación —frente a prácticas tradicionales como la incineración— son los más eficientes, respetuosos con el medioambiente y alineados con la normativa vigente. En este marco, Pieralisi, especializada en tecnologías de separación centrífuga, desarrolló en Europa una solución integral para el tratamiento del slop oil, un residuo líquido altamente contaminante que se genera en operaciones de refino y limpieza industrial, y que ahora puede transformarse en energía útil.
Hasta el momento, su gestión se resolvía a menudo mediante incineración, almacenamiento o vertido controlado, prácticas que suponían altos costes operativos y un impacto ambiental significativo. Frente a estas soluciones, Pieralisi introduce un modelo más eficiente basado en la separación y recuperación de la fracción oleosa, que puede reincorporarse a procesos productivos o ser aprovechada energéticamente.
Separación y reutilización del residuo
La innovación de Pieralisi permite dividir el slop oil en tres componentes: agua, sólidos y fracción oleosa. Esta última, en lugar de quemarse, puede reutilizarse como recurso industrial o energético.
María Eugenia García-Baquero, jefa de negocio de Pieralisi en España y Portugal, explica que “el proceso de separación y recuperación consiste en dividir el residuo en agua, sólidos y, finalmente, la fracción oleosa. Esta parte oleosa, en lugar de quemarse, puede reutilizarse en procesos industriales o energéticos, sustituyendo al petróleo nuevo que, de otro modo, habría que extraer y refinar”.
La directiva añade que “de esta manera no solo reducimos lo que se quema, sino que también evitamos generar emisiones adicionales ligadas a la producción de combustible desde cero”.
De pasivo ambiental a activo energético
Este enfoque convierte al slop oil en un recurso de valor, con ventajas directas para las industrias que lo generan:
1.- Recuperación de hidrocarburos útiles, optimizando el rendimiento en procesos de refino o valorización.
2.- Reducción de volumen, toxicidad y costes vinculados a la gestión de residuos peligrosos.
3.- Cumplimiento de las normativas medioambientales más exigentes en Europa.
4.- Contribución a la economía circular al transformar un desecho en un recurso energético.
La propuesta de Pieralisi se integra en un modelo industrial que busca minimizar el impacto ambiental sin renunciar a la eficiencia. Sectores como el energético, el logístico o el químico —que generan cada año miles de toneladas de slop oil— encuentran en esta tecnología una alternativa clara a prácticas obsoletas, capaz de cumplir la normativa, optimizar recursos y generar valor a partir de residuos altamente contaminantes.

































