Toledo activa el ‘Plan Integral Toledo Recicla Vidrio’
El Ayuntamiento de Toledo y Ecovidrio han puesto en marcha el ‘Plan Integral Toledo Recicla Vidrio’, una actuación desarrollada en colaboración público-privada que comenzó con la instalación de 48 nuevos contenedores de 240 litros en todo el Casco Histórico de la ciudad y que continuará en otoño con una recogida puerta a puerta destinada a la hostelería. El objetivo es “equilibrar la balanza entre ventajas e inconvenientes de vivir en el Casco” y avanzar hacia un modelo más sostenible, tal como ha afirmado el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, durante la presentación de la iniciativa celebrada en el propio casco urbano, acompañado por el subdirector de la zona centro-norte de Ecovidrio, Ricardo Sevilla.
La segunda fase, que comenzará en otoño, se dirige a los establecimientos hosteleros del Casco, principales generadores de residuos de vidrio en Toledo. Estos negocios dispondrán de un servicio de recogida puerta a puerta “lo que facilitará de manera notable el reciclaje para todos ellos”, según apuntó Carlos Velázquez.
Ricardo Sevilla indicó que “esperamos incrementar la recogida de los envases de vidrio en Toledo en más de un 50 %, pasando a recuperar 1.200 toneladas de vidrio y con ello pasar de la cifra que tenemos actualmente de 10 kg por habitante al año, a aproximadamente unos 19–20 kg por habitante, y cumplir así con el objetivo de la tasa de reciclado de envases de vidrio que marca la Unión Europea, de llegar al 80 % en el año 2030”.
Más medidas para un Casco Histórico habitable y sostenible
El ‘Plan Integral Toledo Recicla Vidrio’ se suma a otras acciones puestas en marcha por el Consistorio toledano con el objetivo de revitalizar la vida residencial en el Casco Histórico y favorecer su sostenibilidad. Entre ellas destaca el proyecto de eliminación del bolseo, que se encuentra ya en su novena fase y ha alcanzado 99 calles, con la instalación de 135 contenedores. Esta medida, en palabras del alcalde, ha supuesto “una mejora notable en la imagen que damos como Ciudad Patrimonio de la Humanidad”.
También se han implantado dos Ecopuntos en las calles Alfonso XII y Martín Gamero para la recogida selectiva de vidrio, plástico, papel y cartón. Según Velázquez, “se están utilizando mucho por los vecinos y fue una medida muy bienvenida”.
Además, en junio se pusieron en funcionamiento puntos limpios móviles en toda la ciudad, incluyendo el Casco. Estos recursos complementan los dos puntos limpios fijos ya existentes en Toledo: uno en el Polígono Industrial y otro en la rotonda de la Plaza de Holanda. La nueva red ha permitido “incrementar en un cien por cien los dos servicios de puntos limpios fijos que hay en la ciudad”, según destacó el alcalde.
Carlos Velázquez recalcó que se trata de “pasos pequeños que se van adoptando para avanzar en el reciclaje y en el respeto al medioambiente y que pretende convertir el Casco Histórico de Toledo en un lugar que invite a los vecinos a vivir”.
Carlos Velázquez concluyó señalando que “grandes avances en solo dos años en un Casco Histórico en el que era impensable el reciclaje y a día de hoy es un hecho que en el Casco se puede reciclar y cada vez hay más facilidades para ello”. Para el alcalde, esta transformación forma parte de “una estrategia más amplia e importante para equilibrar la balanza de vivir en este emblemático barrio de la capital regional”.
Beneficios ambientales del reciclado de residuos de envases de vidrio en Toledo
El reciclaje de envases de vidrio es un elemento clave en la lucha contra el cambio climático y la descarbonización de nuestra economía, destacan fuentes de Ecovidrio. También es imprescindible en la transición a un modelo de desarrollo más circular y arraigado en la Agenda 2030. En concreto, durante el pasado ejercicio, gracias al reciclaje de envases de vidrio en la ciudad de Toledo, se ha logrado:
- Evitar la emisión de 500 t de CO2, una cantidad equivalente a retirar más de 230 coches de la circulación durante un año.
- Ahorrar 616 Mwh de energía.
- Evitar la extracción de 1.036 t de materias primas (arena, sosa y caliza), un peso equivalente a casi el peso del Cristo Redentor de Brasil.

































