Las claves para despedir 2025 y arrancar 2026 con fuerza

Para esta edición contamos con la visión de Paz Calp, ‘coach’ especializada en transformación personal y creadora de una escuela ‘online’ de crecimiento interno. Formada con referentes internacionales como el doctor Joe Dispenza, Frank Pucelik —cocreador de la PNL— y Tony Robbins, Paz ha acompañado a miles de personas a reinterpretar su vida, tomar decisiones conscientes y avanzar con seguridad.

Tras quince años en el mundo del ‘marketing’ y la publicidad, en 2010 inició su camino en el desarrollo personal, trabajando en centros, empresas y procesos individuales. Su visión, clara y profundamente humana, es especialmente valiosa para quienes viven el ritmo intenso del salón: largas jornadas, exigencia creativa, contacto continuo con el público y la necesidad constante de reinventarse.

Para Paz, no se puede comenzar un nuevo año sin cerrar el anterior. “Para empezar de nuevo hemos de cerrar el ciclo en el que estamos: agradecer lo vivido, soltar el resentimiento y decidir qué versión de nosotros queremos ser a partir de ahora”, explica.

En la peluquería, esto significa:

• Agradecer lo aprendido durante 2025, incluso las situaciones difíciles del salón, los clientes retadores o los cambios inesperados.
• Soltar el resentimiento y las cargas emocionales que se fueron acumulando. Nada nuevo nace cuando aún llevamos peso del pasado.
• Elegir conscientemente quién quieres ser como profesional en 2026: más equilibrado, más rentable, más creativo, más paciente, más seguro.

“Cambiar creencias y crear nuevos hábitos es imprescindible para realizar todo el proceso”, recuerda Paz. El cierre real no es mental, sino práctico: se vive en el día a día, en los gestos y decisiones.

Muchos profesionales empiezan el año con planes grandes que se desinflan a las pocas semanas. Para Paz, la clave es otra: “Lo primero es tener claridad sobre qué quieres y para qué lo quieres”. Todos buscamos lo mismo —paz, satisfacción, estabilidad—, pero es necesario concretarlo.

Cómo aplicarlo en tu salón:

• Define un objetivo y su propósito: no “quiero ganar más”, sino “quiero estabilidad para vivir con tranquilidad”.
• Pregúntate qué te dará felicidad y paz, no qué “debes” hacer.
• Da un pequeño primer paso: ajustar horarios, revisar tarifas, planificar formación, mejorar el protocolo de asesoría, etc.
• Activa el movimiento: “El cómo se irá desplegando estando en acción y dando pasos pequeños, conscientes y constantes”.

Los objetivos efectivos no nacen de la presión, sino de la claridad.

En el salón, el miedo se manifiesta al subir precios, invertir en formación, presentarte a premios, tomar decisiones con el equipo, atraer un nuevo tipo de cliente o abrir tu propio espacio. Pero Paz lo explica con una sencillez poderosa: “El miedo está siempre presente para protegernos. Lo que no podemos permitir es que nos frene y mucho menos que nos guíe”.

No hay que eliminarlo. Hay que avanzar con él.

“El miedo se disuelve cuando dejamos de luchar contra él”.

Es decir:

• Acéptalo.
• Obsérvalo sin juicio.
• Haz lo que tienes que hacer, aunque te acompañe.

Cuando el miedo deja de liderar, recuperas el control.

Paz es clara: la abundancia no llega por ejercicios aislados, sino por una transformación profunda de mentalidad. “La abundancia se manifiesta con una forma determinada de pensar, sentir y ver la vida”.

Cómo crear mentalidad de abundancia en tu trabajo:

• Cambia la mirada del “no llego” por “tengo posibilidades”.
• Aprecia tu valor: tu técnica, tu estilo, tu forma de conectar con el cliente.
• Rodéate de profesionales que sumen e inspiren.
• Revisa tu lenguaje interno: háblate como el profesional que quieres llegar a ser.

Para el peluquero o barbero, la abundancia no es solo dinero: es clientes alineados, servicios valorados y una energía que genera confianza.

"Nutriéndolas", dice Paz. No existe la motivación eterna; existe la motivación cuidada. Lo mismo ocurre con la confianza: se construye con microhábitos.

Hábitos que elevan la energía del profesional del salón

• Busca cada día algo que eleve tu energía: música, meditación, movimiento.
• Incluye pequeños momentos de alegría en tu rutina.
• Identifica qué te hace sentir vitalidad y ponlo en tu agenda.
• Respeta tus ritmos: pausas, descanso y autocuidado.

• “Permítete encargarte de ti y todo lo demás te será concedido”.

Cuando tú estás bien, tu técnica mejora, tu creatividad fluye y tu relación con el cliente cambia.