Es necesario un mayor acercamiento al ciudadano

Bajo el lema de esta edición, ‘Comprometidos con la sociedad’, el V Congreso Nacional de Áridos, celebrado en Santiago de Compostela del 24 al 26 de octubre, incluyó en su programa una mesa redonda para definir las bases de una estrategia sectorial que permita mejorar la comunicación y las relaciones de esta industria con el entorno social.

La mesa estuvo conformada por Daniel Barragán, secretario de Negociación Colectiva en CC OO Construcciones y Servicios, Desirée Tornero, directora de Agua y Sal Comunicación, Ricardo Pérez, director de Relaciones Institucionales en Geoalcali, Eduardo Ramos, responsable de Consensa, Aniceto Zaragoza, director general de Oficemen, y César Luaces Frades, director general de la Federación de Áridos. Teresa Busqué, presidenta del Comité de Imagen en Anefa, ejerció de moderadora.

Daniel Barragán destacaba que el sector de los áridos debe trabajar con más intensidad para que deje de ser visto por parte de la sociedad como algo negativo. “Debemos hacer entre todos una labor pedagógica porque hay mucha ignorancia sobre los áridos. Este es un sector sostenible e imprescindible para nuestra sociedad. Muchas actividades fundamentales para todos nosotros, como puede ser la construcción, serían imposibles sin la contribución de estos materiales. Pero por desgracia, siempre vende más en los medios una noticia negativa que todo lo mucho que se hace bien”, señalaba el responsable de CC OO.

En la misma línea se manifestaba Desirée Tornero quien en sus doce años como responsable de Comunicación de Arival, la Asociación de Empresas de Áridos de la Comunidad Valenciana, se ha tenido que enfrentar al “gran desconocimiento” que existe entre los medios de comunicación no especializados sobre la actividad de esta industria. “Cuesta mucho que comuniquen algo de nuestro sector y cuando lo hacen suele ser para dar alguna noticia negativa. Desgraciadamente, áridos o extracción son palabras que mantienen aún en España un carácter algo peyorativo, por lo que quizás sería conveniente usar otros términos, como por ejemplo recursos naturales”, indicaba.

Un buen ejemplo de empresa minera que ha trabajado bien la cercanía a la sociedad es la compañía navarra Geoalcali, especializada en la explotación de potasa. Para esta empresa la comunicación es una línea estratégica fundamental y, desde su implantación, ha acometido diversas medidas para “desmitificar la minería”, como jornadas de puertas abiertas en sus instalaciones o la puesta en marcha de una exposición intinerante de minerales. “Hemos desarrollado un proceso de participación ciudadana para saber qué espera realmente la gente de nosotros y qué les preocupa de nuestra actividad. La explotación económica de una mina es importante pero también lo es la responsabilidad social y en ese sentido trabajamos para generar puestos de trabajo, por cuidar de nuestro medioambiente… Nuestras empresas tienen que tomar medidas a largo plazo. La concienciación no viene de la noche a la mañana, tiene que pasar tiempo. Es lo mismo que ocurre con el reciclaje. El sector necesita claramente acercarse más a la sociedad”, decía Ricardo Pérez.

Ante una sociedad cada vez más exigente, el sector de los áridos tiene que implicarse cada vez más en la actividad social, como reconocía Eduardo Ramos. “Hay que relacionarse más, buscar espacios de diálogo, incluir el espacio medioambiental desde el inicio de las operaciones. No tener una actitud reactiva, hay que anticiparse a los posibles problemas. Todo cambio cuesta pero dentro del sector hay que realizar un proceso de innovación social. Hay que abrise a la sociedad y recurrir, sobre todo, a las sensaciones. El árido es necesario para la vida”, añadía.

Por su parte, Aniceto Zaragora, director general de Oficemen, señalaba que al carácter negativo que suele tener el árido en cierta parte de la sociedad, el sector del cemento suma además otro elemento con mala imagen, la transformación industrial. Por ello desde esta industria se viene trabajando desde hace tiempo en mejorar su imagen con medidas como la creación hace doce años de la Fundación Cema, una fundación pionera en la industria cementera europea en la que la patronal y los sindicatos trabajan juntos por la sostenibilidad del sector. “Para poder desarrollar nuestra actividad necesitamos la licencia administrativa pero también una licencia social. En este sentido es importante que nuestra industria transmita sentimientos y emociones, los cuales siempre son mejor recibidos que las normativas”, manifestaba.

Por último, César Luaces Frades, como director general de la Federación de Áridos, destacaba que el sector lleva años trabajando para mejorar la comunicación externa pero sigue encontrando muchos problemas a la hora de poder llegar a los medios de comunicación. Además, reconocía que muchas empresas de esta industria solo tienen en cuenta la comunicación cuando se ha producido un incidente en sus instalaciones, no estableciendo estrategias comunicativas a medio y largo plazo. De todas formas, como se reconoce desde la FdA, uno de los mayores enemigos en materia de reconocimiento social es la competencia desleal a la que se enfrenta el sector, con malos comportamientos que inciden negativamente en la imagen general de los áridos. Consciente de esta grave problemática, la propia Federación ha denunciado durante los últimos años cerca de 500 explotaciones ilegales y seguirá trabajando en esa línea.

En definitiva, el sector de los áridos fortalecerá su estrategia de acercamiento a la sociedad y lo hará desde la propia base. “Hay que ir a los colegios para enseñar a los alumnos lo que hacemos pero también tenemos que ir al Ministerio para cambiar lo que dicen los libros de texto de nosotros”, concluía César Luaces Frades.