En sus dos versiones: mecánica o automática mediante sensor de presencia
‘Higía’, “la elegante estación de desinfección de manos”
Distanciamiento personal e higiene estricta son las principales recomendaciones para los centros de trabajo en la lucha contra el coronavirus. Y ya no sólo cuando se acabe la terrible pandemia. En la denominada “nueva normalidad” será imprescindible mantener pautas de higiene para prevenir futuros rebrotes. De ahí que los dispensadores de hidrogel comercializados por Representaciones Martín Mena no sean diseñados como meros elementos provisionales, sino como un elemento común que se adapta a cualquier entorno urbano. Y así ha sido concebido el modelo 'Higía' (la diosa griega de la Salud), una elegante estación de desinfección de manos que pueda ser instalada e integrada “perfectamente en su entorno”.
Martín Mena, informan fuentes de la compañía, “aporta una solución práctica, elegante y funcional”. Estaciones de desinfección de manos con pedal o eléctricos, estos últimos accionados mediante sensor de presencia. Se trata de dispositivos sin contacto que suministran hidrogel para higienizar (de Higía) las manos.
Este dispositivo está diseñado para ser ubicado en lugares de gran afluencia de público: entradas de los centros comerciales, aeropuertos, edificios de oficinas, sedes de empresas, hospitales, colegios… También son muy interesantes en estaciones de servicio o en hoteles y cafeterías. Estas unidades de higiene si contacto “se adaptan a cualquier entorno aportando la función necesaria con un toque de elegancia”, describen desde la empresa española.
Para que puedan mimetizarse en cualquier entorno, tienen como opción la posibilidad de personalizar su acabado mediante vinilos, corte a laser. Además, se puede elegir su color entre las diferentes opciones de una carta RAL. “La filosofía de ‘Higía’ es que sea un elemento amable y perfectamente integrado en cualquier lugar donde se ubique”.